Follando en la plaza con un taxista
Era un sábado por la madrugada y quede de ir con mi amiga Jenny a bailar y tomarnos unos cuantos tragos, ella me llamo llorando a las 3:43am porque había terminado con el novio y la habían cambiado por una chica más tetona, le dije de todo para hacerla sentir mejor y consolarla, pero no se me ocurría nada más para quitarle la tristeza, así que le propuse que nos viéramos en el parque que queda a cuatro cuadras de su casa para que fuéramos a una de las cantinas que hay en la zona, ya tenía puesta mi pijama y me bañe rápido para ponerme bien linda y salir, tome un taxi y en par de minutos llegue al parque donde ya estaba mi amiga esperándome, muy sexy sentada en la banca con si vestido rosado acompañado de sus hermosas perlas, nuestro plan era ir de cacería y buscar algún chico que nos hiciera felices, a las 04:00am ya estábamos bien borrachas de tanto tomar y mareadas de tanta droga que nos metimos combinada del licor, desafortunadamente ya nos tendríamos que ir porque los locales los cierran a las 04:00am por ley, era triste tener que despedirnos pero lo importante es que ya Jenny se sentía mejor y estaba alegre, había cumplido mi misión de amiga consejera pero si me iba algo decepcionada porque no conocí a ningún hombre que valiera la pena, lo que significaba que tendría que irme a dormir solita y odio esa idea, no me quedaba de otra que aceptar la realdad y con resignación tome un taxi y me monte para que me llevara a mi casa.
El taxista se orilló bien cerca al andén en donde me encontraba para preguntarme donde necesitaba ir, y la verdad era un hombre ya bien madurito y guapo, por cierto, ya bastante canosito pero muy atractivo y bien conservado, no sé qué, pero había algo que me cautivaba de ese hombre y me hacía sentir atracción hacia él, pero parece que no era la única que lo estaba detallando porque el también no dejaba de detallarme con la mirada, no soy presumida pero tampoco me considero fea y es normal esa reacción, tenía cara de querer algo más y estoy segura que preferiría estar en el asiento de atrás con migo que conduciendo, pero era un hombre responsable y se concentró en el camino.
Ese hombre que estaba conduciendo era la respuesta a mis oraciones y peticiones de muchas noches, desde que lo vi me jure a mí misma que me acostaría con el pasara lo que pasara, me desabroche mi blusa dejando mis senos al aire, el acomodo el retrovisor en una posición en la que pudiera vérmelos, yo los acariciaba mientras lo miraba con cara de morbosa.
– Pero mira cómo se me han puesto los pezones, ese cerdo de la cantina me los estuvo lamiendo, me ha dejado mis pobres senos llenos de lametones, algunos hombres son tan impulsivos, ¿usted es impulsivo?
El pobre se quedó tan sorprendido que ni podía pronunciar una sola palabra, entonces me quité la falda y seguí provocándolo.
-Y como si fuera poco, como me ha dejado las medias, completamente llenas de semen, ni me las puedo quitar por el movimiento, ¿sería usted tan amable de parar y ayudarme?
Ni siquiera lo pensó porque hay mismo freno y se orilló contra la orilla de la carretera, ya estábamos por el parque cerca de mi casa y estaba solo como siempre.
-Sería más cómodo si te bajas y te tumbas sobre la hierba preciosa
Solo le respondí sonriendo al darme cuenta que se cumpliría lo que quería desde el principio, la hierba estaba suave y muy húmeda porque temprano había llovido, se quitó la camiseta y tenía un cuerpo bastante velludo y musculosito marcado por el gimnasio, luego se quitó los pantalones y los boxers, su verga era bastante grande y se notaba a lo lejos.
Se tumbó sobre mis piernas y mientras me besaba su verga se fue introduciendo poco a poco dentro de mi húmeda vagina.
-Te gusta chiquita?
-Si si, mucho eres el mejor, lo haces como ninguno no te detengas
Me la metió por un buen rato teniéndome en esa posición, hasta que sentir como su semen rodeaba todas mis nalgas y me manchaba con ese rico líquido que me derramo, la tenía demasiado grande y me lo hizo tan fuerte que tarde en recuperarme de semejante éxtasis de gozo, se la chupe para limpiarle el semen de su verga y nos vestimos para subirnos al taxi e irnos, igual desde el principio yo quería era un rapidito, camino a mi casa me pase para el sillón de adelante y se la chupe mientras llegábamos y el manejaba, bueno espero que les halla gusta mi regreso después de tanto tiempo.