Nuestro primer trío con mi pareja (Segunda parte)

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La primera parte de la historia la pueden encontrar aquí.

Aquí estamos de nuevo con lo que sigue así que disfrútenlo

Era increíble la forma en como se la cogía, él la sostenía de las nalgas al mismo tiempo que se las abría y así se apreciaba mejor cómo ella se comía ese trozo enorme de carne maciza, carne que le llenaba todo su coño desde la entrada hasta el fondo, en esa posición quedaba al descubierto su chiquito ese hoyo arrugadito que tiene y que también sabe de placeres, es increíble el espectáculo que me estaba dando ni en las películas tres equis he visto escenas tan candentes, el movimiento de sube y baja, ver como entraba y salía la verga de Rodolfo, toda brillosa de los jugos que destilaba su panocha, ¡qué palo tan rico! el que en esos momentos le daban a mi mujercita, palo que está por demás decir que lo gozaba como la puta que es.

-¡SSSSSiiiiiii así cogeme no te detengas méteme tu fierrote y destrózame la panocha, no tengas piedad que siento que me voy a venir, anda mueva la verga, dale duro a este biscocho que hoy tienes aaaaahhhhhhhhggg yyyyaaaa, yyyyyaaaaaaaa así aaaaahhhhhgg

Me vengo tómalos te los doy aaaaaaahhhh mmmmmmmm rico muy rico…! –Musitaba ella.

En eso él se levantó del sofá y así sin sacarle la verga, la cargo en vilo solo se sostenía por su tronco el cual estaba totalmente clavado en su cuerpo, mejor dicho en su panocha, la tomó de las nalgas y así se la llevó hasta la recamara ella solo se quejaba.

-¡AAAAAAhhhhhhgg rico, delicioso nadie me llena tanto como tú tienes un pito que me hace ver estrellitas, pero no te vayas a venir todavía, aun quiero seguir cogiendo…!

–Decía ella. Mientras, yo los seguía de cerca viendo que no se le saliera de su cuevita ese animalón que tenía totalmente clavado hasta la empuñadura y que por su puesto ella no pensaba dejarlo escapar por un buen rato al menos no hasta quedar totalmente satisfecha. La llevo a la recamara y la recostó en la orilla de la cama y ahí la siguió bombeando muy lentamente,

-¿Así te gusta? siente mi verga como te llega hasta adentro nadie la aguanta toda y tu te la comes completita no cabe duda que eres una putita muy golosa que le encanta la verga y aprieta como nadie…! –Comento él.

-¡Siiiiii me encanta ser una putona pero no dejes de cogerme, a mi marido le gusta que su mujercita sea muy puta le encanta verme con la panocha llena de verga y de mocos, así que tienes que llenarme pero todavía no, todavía no te vengas que te mato…! Contestó ella.

-¡No te preocupes que yo aguanto tu me dices cuando quieras que te llene y vaya si te llenaré tengo los huevos llenos de leche ¡Te aseguro no te la vas acabar…! –Dijo él. En ese momento yo tenía la verga completamente parada y me dolía de lo dura que estaba, por lo que me acerque y se la di en la boca, ella me recibió con gusto y solo gemía.

-¡Mmmmmm sssssiiiiiii rico aaahhhhhgggg hhhhhuuuuuu oooooohhhhh riquísimo ¿Te gusta mi vida, te gusta ver que me cojan? Creo que si porque lo tienes durísimo…!

–Comentó. A lo que respondí

-¡Si mi amor te ves divina recibiendo verga gózalo cariño disfruta esa verga y apriétalo para que sienta como muerde tu perrito exprímelo bien…!

-Realmente ella no necesitaba esa motivación estaba en la gloria al sentir los embates de Rodolfo, se la sacaba toda hasta la punta y se la metía hasta que sus bolas chocaban con las nalgas.

Así estuvieron cogiendo por un rato, de repente ella lo halaba con los talones en su cintura para sentirlo en lo más profundo de sus entrañas, mientras yo solo me limitaba a mirar y sentir sus labios en mi pene, situación que me tenía al borde del orgasmo, por lo que se la tuve que quitar ya que de lo contrario me vendría en cualquier momento y quería seguir prolongando mi eyaculación por más tiempo.

Se la estuvo cogiendo por espacio de más de cuarenta y cinco minutos, tiempo en el cual ella se vino no sé cuántas veces, debieron ser muchas ya que la cama estaba completamente mojada de los jugos que soltaba a cada orgasmo que le provocaba la verga de Rodolfo, la puso en todas las posiciones habidas y por haber se la cogió como quiso, en lo que yo simplemente tomaba infinidad de fotos imágenes que hoy me calientan igual que esa vez.

-¡Ya papi ya vente!, ¡Dámelos¡ los quiero ya, lléname como la puta que soy, anda cariño ya quiero sentir tu semen derramarse dentro de mi…! –Comento ella.

–Él contestó.

-¿Ya los quieres putita, quieres sentir mis mocos en tus entrañas?

-¡SSSSiiiiii ya los quiero ya dámelos descarga todo lo que tengas, me prometiste una gran cantidad de leche y ahora me cumples o me dejas como estaba…! –Replico de nuevo.

-¡En donde te los echo preciosa, pídeme en donde los quieres, si no me los pides no te los doy…! –De nuevo contesto él.

-¡Donde tú quieras pero ya, ya quiero que me llenes toda, nadie me llena como lo haces tú tienes una manguera que me vuelve loca y ya quiero mi lechita, ¿Qué no sientes que mi perrito tiene sed? ya le dio agüita a tu pito y es justo le devuelvas el favor, anda cariño no me hagas esperar quiero lecheeeeee…!

-Mi vida –Dijo dirigiéndose a mí.

-¡Dile que ya se venga que descargue toda su leche en mí que me la dé donde se le antoje pero ya la quiero, anda papi dile que no me haga sufrir ya quiero sentirlo…! –Musitaba.

Yo simplemente me limite a ver lo que pasaba, él no se quería venir aun y nuevamente le dijo.

-¡Si no me dices en donde quieres mi leche no te la daré así que dime donde te los echo…!

Ella contesto casi gritando, implorando la descarga que sabía la llevaría a un orgasmo más.

-Adentro, dámelos adentro vente dentro de mi biscocho llénalo con tu crema, ponle su lechita, remójalo completamente hazlo como solo tú sabes hacerlo quiero que te vengas junto conmigo…! Él se empezó a mover con mayor rapidez y ella lo abraso fuertemente seguro se estaba viniendo antes que él y aun así seguía pidiendo más y más.

De pronto, le clavo toda la verga, hasta juntar de nuevo sus pelos con los de ella, únicamente se observaban las bolas de fuera, completamente recogidas señal inequívoca de que estaba al borde del orgasmo y así fue. Un alarido de intenso placer dejaron escapar al unísono.

-¡Haaaagggg yaaaaa me vengo te los doy…!

-¡Así lléname toda no dejes nada, vacía todas tus bolas, déjate venir, aaaaaaaahhhhhgggg ssssiiiii que rico siento se te puso más gordo otro más, y uno más cuanta leche…!

-¡Ahhgg ya son tuyos siéntelos…!

-¡YYYYaaaaa mmmmmm aaaaahhhhhggggg cuanta leche, mi vida se está viniendo, me está llenando completamente, me ve a inundar toda aaahhhggg yo también me vengo tómalos te los doy siente como se juntan nuestras leches…!

–Era lo único que se oía, estaban realmente disfrutando como nunca ese intenso orgasmo que los estaba sacudiendo.

Me puse detrás de ellos y pude apreciar claramente la forma en que mi mujer tenía totalmente clavada esa verga hasta el fondo mismo de sus entrañas solo se apreciaban las bolas de él muy retraídas debido a la descarga que acababan de sufrir, ella por su parte abrazaba su cuerpo con las piernas para que no se le fuera a escapar nada, de la copiosa descarga de la cual había sido blanco, estaban laxos disfrutando los últimos instantes del que fue un orgasmo como pocos he visto en mi hembra y que la dejo totalmente desfallecida, y sumidos en un sopor típico de ese tipo de orgasmos, de repente él se dio cuenta del momento que estaban pasando y se separó de ella aun con la verga medio erecta, en cuanto se levantó dejo al descubierto el hoyo de mi esposa que rebosaba de mocos y ella con una sonrisa de plena satisfacción, en cuanto me vio recobro la noción del tiempo, me acerque a su lado y pregunte.

-¿Te gusto amor, te gusto como te cogió?

-¡Si mi amor me cogió bien rico tiene una verga muy rica y me dio muchos mocos, mira como me escurren…! -Contestó.

-¡Oye pero si te dejo toda llena de leche, ¿Te aventó muchos mocos? ¿Te gusto cuando se estaba viniendo? Dime que fue lo que te gusto Más…! –Volví a comentar

-¡Sí, me aventó muchos, pero tu aún no te vienes anda cariño cógeme tú también lléname igual que él lo hizo anda papi junta tu leche con la de él quiero sentirme bien llena de leche…! –Volvió a decir.

Había oído muchas platicas de lo que se siente cuando alguien mete la verga en un biscocho recién cogido y lleno de leche como estaba el de mi esposa, pero nunca pensé que yo llegaría a hacerlo, siempre pensé que YO NUNCA HARIA UNA COSA DE ESAS y heme ahí, a punto de remover el atole que acababan de depositar en el hoyo de mi mujercita y que además yo la había llevado para que se la cogieran. Quien ha probado esto sabe de lo que hablo, nunca pensé que sería tan excitante sentir una panocha tan resbalosa, tan lubricada por los mocos de otro hombre, estaba a punto de sentir el túnel de mi mujer completamente lleno de leche, porque algo era seguro ese tío se venía como si fuera una manguera.

Me acomode de inmediato apuntando mi verga al centro de su panocha y no hubo más, se le fue de una estocada limpia a causa de lo bien aceitado que me habían dejado el camino,

-¡AAAAhhhhhhgggggg, ssssssiiiii cogeme siente como estoy llena de leche así papi mételo cogeme déjame sentir tu verga, ahora si voy a quedar toda cogida anda mi cielo disfruta como lo hice yo siente como goza la putita de tu esposa, ¿Te gusta que sea una puta cariño? ¿Te gusta mover el atole de otro? –Comentó.

-¡Si mi amor es rico nunca te vi gozar como lo acabas de hacer, me vengo mami me vengo…! –Conteste.

-¡Así papi lléname tú también anda mi vida échamelos todos para que se junten con los de Rodolfo mmmmmm que rico te estas vaciando muy rico así mi vida dámelos anda lléname más aaaahhhhhggggg que delicia quedar completamente llena de mocos hoy si quede como nunca mi amor…!

Nos quedamos quietos unos momentos como queriendo disfrutar más ese instante, queriéndolo alargar lo más que se pudiera para tenerlo vivo en la mente el mayor tiempo posible o al menos hasta que se repitiera de nuevo. Poco a poco fuimos tomando conciencia de donde estábamos y Rodolfo nos miraba en el quicio de la puerta y comento.

-¡Espero les haya gustado porque lo que es a mí me encantó, tienes una mujer muy rica que coge como ninguna y espero esto se vuelva a repetir pronto ya saben estoy para servirles…!

-¡Claro que nos gustó y ten por hecho que volveremos por más solo deja que se dé el espacio y aquí nos tendrás en menos de lo que te imaginas, porque lo que es yo ya quiero que se repita…! -Contesto ella, al tiempo que se limpiaba la panocha que ya le empezaba a escurrir los mocos que acabábamos de depositar en ella y al mismo tiempo se vestía, para retirarnos.

Rodolfo aun desnudo y con la verga colgando nos acompañó hasta la puerta para despedirnos.

-¡Gracias por haber venido, quede satisfecho espero ustedes también y como ya dije regresen pronto ya saben esta es su casa y esta verga esta para servirte y cogerte Irmita…! –Comento y ella respondió-

-¡Pues gracias a ti que nos permitiste hacer realidad una de nuestras fantasías esperamos que pronto podamos volver por más y que cuando así sea no tengas las fuerzas suficientes para darme una buena cogida…!

Nos despedimos de él pero ella se despidió tomándolo de la verga y dijo.

-¡Adiós campeón bueno no digo adiós sino hasta pronto, te dejo para que te repongas y se te acumule más leche que quiero que la próxima vez me dejes más llena de mocos, hasta luego…!

Tomamos el camino de regreso a casa en el camino fuimos callados pero al llegar volvimos a coger hasta entrada la tarde, recordando todos los momentos que acabábamos de vivir.

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