Teniendo un rico trio con la amiga de Rebeca

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Hola Estefanía,

Soy Beti, una amiga de Rebeca. Te vas a quedar flipada pero me ha dicho que podía hablarte con total sinceridad. Así que, allá voy:

Tengo 44 años, me he divorciado recientemente, 3 niños, dos perros, Jajajaja y custodia compartida. El caso es que estoy un poco desatada últimamente. Y me apetece probar otras cosas.

Con este mensaje iniciamos una conversación hace unos días esta nueva amiga y yo.

Hola….esta Rebeca…..!!! Jajajaja
Perdona, has tenido que flipar
No, no, que va!! Yo no flipo con casi nada ya
Rebeca dice que puedes enseñarme sitios
Si, claro. Vives en MADRID? Como es tu desate?
Si, vivo en MADRID. De momento solo con tíos. No he estado nunca con una mujer, no he hecho tríos, no he hecho casi de nada….joder!!!
Jajaja, me encanta la gente como tú
por?
Todo por descubrir…..
Efectivamente, eso, seguro
Sois una caja de sorpresas. Has leído mi blog?
No sabía que escribías un blog
Te paso el enlace ( https://40historiasdesexo.blog/category/estefania/)

Si, por favor, empiezo a leer hoy mismo. Salimos la semana que viene?
Plan? Local liberal?
Por ejemplo, pero luego igual no me animo. Quiero probar cosas.
Se hizo un silencio en la conversación, yo sabía que estaba leyendo mi blog y efectivamente, lo siguiente que comento en el chat fue lo interesantes que eran todas mis historias y que si eran reales.

Puedo hacerte una pregunta personal? escribió Beti.
Claro, le contesté yo
Cómo supiste o cómo te diste cuenta, no se, que también te atraían las mujeres?
Pues lo supe en un periodo de mi vida que estuve desatendida sexualmente por mi primer marido. Comencé a tener fantasías, pensamientos….
Pero las fantasías son una cosa y la realidad es otra. Yo fantaseo un montón, pero, no se
Las mujeres alrededor de mí en esa época me empezaron a atraer, en especial una. Por la fantasía se empieza. Si te excita pensar en ello te gustará.
A mi me atrae una compañera pero 1) es una empresa pequeña 2) no está interesada
Siempre se puede probar y luego decir que no te gustó. Hay muchas mujeres, no te compliques con una tan cercana. Prueba en un local, sin compromiso, sin conocer, tocando, experimentando. Allí no hay que dar explicaciones.
Era por hacerlo con alguien conocido y que me asegurara cierta confianza y cercanía
Bueno, eso te lo puedo dar yo….estás buena? Jajajaja
No se, fea no soy…pregúntale a Rebeca Jajajaja
Y tu? Estás buena?
Estoy buena
Te mando fotos
Vale, yo también te mando ( le mande una con Roció el día de nuestra cena)
Estás buena!!
Jajajaja, gracias!! Tu también eres muy guapa! Quien es? Rocío?
Si, es Rocío
Mmmm, es muy guapa también
Genial, podemos hacer pandi!!
Yo quiero quedar ya!!
Ansiosa!!
Pasaron un par de días sin que pudiéramos volver a hablar por mi trabajo, estoy bastante ocupada últimamente pero ella me dijo lo burra que se había puesto leyéndome. La siguiente conversación rondó acerca de que le había hablado de ella a Jesús y del tipo de historia que tenía con el. Muy especial, totalmente liberal y que seguro que se animaba a quedar con nosotras. Que, con dos tías funcionaba genial. En cuanto le hable de él, me dijo que quería hacer un trío. Yo le dije que era uno de los mejores amantes que había tenido nunca y eso parece que la animó. Le mande una foto suya, después de preguntarle a él si podía hacerlo y le pareció muy guapo. Así que intentamos cerrar una cita para poder quedar los tres.

Ella estaba nerviosa, pero la noche de antes de nuestra cita me hizo una consulta. No sabía si debía de ir a follar con un amigo suyo casi a 100 km de su casa para volverse luego por que no se podía quedar a dormir. Yo le dije que hiciera lo que le pidiera el cuerpo, pero que si iba, que fuera sin bragas. Al par de horas me escribió que estaba en casa de su amigo para follar, pero con bragas. Mmmm, que cacho zorrón!! Me encanta!!

Me mando una foto de un liguero con una braguitas, espectaculares, diciéndome que nunca había llevado uno de esos y que no sabía si iba a saber ponérselo. A lo que contesté que si no sabía, que se lo llevara que le ayudábamos Jesús y yo a ponérselo y a quitárselo.

Joder, estoy entre cachonda y acojonada, me dijo antes de que llegara la hora de la cita.
Te entiendo perfectamente
Tu estabas así?
Yo he pasado por distintos estados
Por distintos?
Si…cachonda, acojonada, envalentonada, excitada…y ahora lo vivo todo con total normalidad y naturalidad
Joder, vale, me quedo más tranquila
Es normal. Mi consejo es que disfrutes mucho como lo sientes todo ahora porque es una situación única, disfrútalo porque no lo vas a volver a sentir así nunca.
Llegué la primera, espere a Jesús y Beti llegaría un poco más tarde, así que la esperamos dentro del local, avisando en la puerta de que iba a venir y que era “nueva” en esto.

Independientemente de esa cita con mi nueva amiga, estaba deseosa de volver a verle. De sentirle, de besarle. Me siento especial cuando estamos juntos y una cita con él siempre me hace feliz. A Jesús le deseo, le veo y mis bragas chorrean, así que según nos morreamos al encontrarnos y según entramos por la puerta le digo que primero me va a follar con la ropa puesta y luego ya tomamos algo y esperamos a nuestra invitada. Quería que me follara antes de compartirle ese día. Le pareció una idea fantástica y así se lo hicimos saber a nuestra amiga de la puerta. Todas las salas en las que nos podíamos encerrar estaban ocupadas, así que me arrime a mirar en una que estaban follando a la mujer a cuatro patas. Mi cara pegada en las celdillas que dejan ver lo que ocurre dentro y levantando mi vestido las manos de Jesús, notando mi humedad. Para clávame su polla mientras la pareja a escaso metro de nosotros también jadeaba y se volvió a mirarnos puesto que yo también lo hacía. Estábamos en medio del pasillo, sin pudor, me pone mucho eso y más cuando noté que alguien se acercaba por detrás. Apoye uno de mis pies en una parte alta y con las piernas totalmente abiertas mientras sentía unas manos desconocidas en mi piel tras de mi, Jesús consiguió un squirt que resbalaba por mis muslos. Estaba muy excitada, cachonda. Esos dedos anodinos me masturbaban después consiguiendo que me corriera mientras la pareja seguía follando y disfrutando. Ella tenía unas tetas espectaculares y el follaba bastante bien, parecía. Le pedí a Jesús que fuéramos al baño y allí me lave un poco y se la chupe con ansia. Cuando salimos, mire a la barra y allí estaba. Ya había llegado, antes de tiempo.

Una rubia con media melena, vestido negro, mediana altura, mucho más atractiva de lo que parecía en las fotos…un culo buenísimo y una bella sonrisa. Me acerqué hacia ella, confiando que Jesús viniera tras de mí y le di un par de besos, él hizo también lo propio. Pedimos algo de beber y tuvimos de charla un buen rato, un rato largo. Beti tenía muchas dudas y no conocía nada del mundo liberal, de nuestras vidas….y no nos gusta hablar a ninguno de los tres!! Jajaja, vaya trío!! En todos los sentidos….

Ella parecía escandalizada con ciertas cosas y hubo un momento en el que empecé a dudar que la tarde llegara a buen término, no sé. Cuando logró relajarse con la conversación acercó su cara a la mía y me dio un beso en la mejilla. Jesús miraba atentamente y entonces yo le dije a ella: “Creo que no es eso lo que querías hacer exactamente”. Entonces, cogí su cara con mis manos y la besé en la boca. Cuando se separó ella dijo “no he besado nunca a una mujer”, volviendo a por más y dándonos un beso apasionado mientras nuestro espectador estrella lo disfrutaba a tope. Luego fue él, el merecedor de un beso por su parte, también apasionado. A partir de ahí, sabíamos que estábamos cómodos y con confianza para seguir avanzando. Poco a poco….

Me apetecía ver lo que había debajo de ese vestido de aspecto monjil y se lo levanté. Es espectáculo fue total!! un conjunto negro de liguero y braguita que la hacían muy muy muy apetecible. Con la falda en mis manos, subida miré a Jesús y le pregunté que qué le parecía. Su cara lo decía todo, sabía que estaba deseando comersela. Hice que se diera la vuelta para verle el culo y ella, avergonzada, lo hizo pero nuestros deseos se dispararon a partir de ese momento.

En estos sitios no suele haber nunca nadie de mal rollo, pero, precisamente hoy había un baboso borracho que dio un par de vueltas alrededor de nosotros y supe que nos iba a dar algún quebradero de cabeza. Lo que le contábamos a Beti era que todo lo que había era buen ambiente, que si no quieres hacer algo con alguien, lo dices, lo haces saber y punto… sin dar ninguna explicación y aquel indeseable nos estaba haciendo quedar mal. Se le acercó por detrás hablándole al oído, muy cerca y haciendo que se violentara un tanto, a lo que salí en su defensa diciendo que la dejara en paz que le había dicho que no le apetecía nada con él. A mi se enfrentó y luego fue a por Jesús, a lo que yo salí al paso por que se que entre dos tíos la cosa puede ir a muy fea. La persona a cargo del local también se dio cuenta y vino al quite, pero para entonces el ambiente se enrareció un poquito.

Viendo que allí en la barra no nos apetecía seguir y que ya nos habíamos caldeado Jesús dijo que se iba a duchar. “A duchar?” dijo Beti. “Si, vengo de trabajar y siempre me gusta darme una ducha”, le dijo. “Ven, vamos con él y nos quitamos la ropa”, le dije. Ella no se quería desnudar, quiso quedarse con su conjunto de lencería, se encontraba más segura y, la verdad es que estaba espectacular. Jesús y yo nos envolvimos con la toalla y nos fuimos los tres a una de las duchas del fondo del local. Cuando nos dirigíamos hacia allí, el baboso volvió a hacer acto de presencia así que Jesús avisó a la chica del local y le llamó la atención seriamente para que abandonara la sala, cosa que hizo, inmediatamente y luego nos informó de ello, dejando a Beti mucho más tranquila.

En ducha, encerrados, sitio pequeño y creo que la clave está ahí en sentirse encerrados… todo fluye. No para Jesus y para mi, si no para Beti. El verse allí con nosotros dos, sólo con una toalla puesta, que él se quitó para meterse en la ducha mientras nos miraba atentamente, fue el detonante para que se diera cuenta de donde estaba y con quien estaba. Comencé a besarla. Quería tocarle esas tetas tan apetecibles bajo ese sujetador negro. Me las comí, ansiosa, jugué con ellas en mis manos. Mientras, Jesús, nos miraba con cara de deseo. Besaba su roja boca, gemía, se había quitado sus braguitas y las había puesto en la muñeca a modo de pulsera. La acompañarían ahí el resto de la tarde/noche. Su agitación se desbocaba por momentos. Me agaché para empezar a saborear su coño, quería que notara la sensación de una boca de mujer en su placer. Jadeaba y Jesús no pudo controlarse más, cuando yo estaba abajo él se lanzó a su boca, besando ardientemente. Me metí entonces en la ducha y los dejé a los dos fuera. Yo me enjabonaba mientras veía el espectáculo de que mi hombre se estuviera comiendo a esa mujer deseosa de aventura y que, le estábamos dando entre los dos. Era su primer trio, su primera visita a un local…. todo podía pasar a partir de ese momento y ese lo viví como espectadora, excitándome, viendo como él la deseaba, como la disfrutaba. Los besos, mientras él tocaba su clítoris, eran muy calientes, me acariciaba observándoles, haciendo crecer en en mi la excitación cada segundo. El se agachó para clavar su cara en su entrepierna, ella abría la boca para soltar sus gemidos, sus corridas, sus orgasmos, no podía controlar que una boca como la de Jesús estuviera dándole todo ese placer, hubo un momento que la tenía en vilo sobre su cara, ella elevaba su pierna para facilitar que él estuviera ahí y sentir todo con las piernas bien abiertas. Respiración agitada, gritaba, gemía, disfrutaba muchísimo y yo, dejé de ser espectadora para empezar a tocar sus tetas, chuparlas, besarla y cerrarle la boca.

Cuando paró de sentir le pregunté: “Te has corrido?, cuantas veces? y ella me contestó: “joder, te pareces a mi exmarido”, soltando una carcajada los tres y sin recibir contestación….

Íbamos a encerrarnos los tres, lo teníamos claro y, en fila india, fuimos entrando en la sala donde habíamos decidido hacerlo. Cuando cerramos la puerta Jesús echó las cortinas y yo le pregunté a Beti si las quería abiertas o cerradas, para ver lo valiente que estaba y decidió que abiertas, por lo que podrían vernos desde fuera. Ella se sentó en la camilla alta que había dentro y le abrí las piernas, con cariño, mientras acercaba mi boca a su coño. Así, del tirón, antes de que Jesús se acercara y me quitara el sitio. Le chupé con cariño, lamí su clítoris, lo succioné mientras arqueaba su espalda, mientras sentía placer, le gustaba… Me gusta su cuerpo, está muy buena. Me encanta tener mi boca metida en ella. Uso mis dedos para penetrarla mientras miro hacia su cara y veo que la tiene girada hacia la polla de Jesus. Se ha colocado a su lado para que se la chupe y lo hace con ansia. El está encantado viendo como me como su coño y le doy placer. Cuando mis dedos entran y salen a la vez que chupo, sus gemidos suben de intensidad y la rapidez con la que se la chupa aumenta. Un tímido squirt aparece mientras jugueteo en su raja pero creo que ella no se da ni cuenta, está demasiado ensimismada. Golpeo su coño y sigue sintiendo gusto.

Jesús le pide que se ponga a cuatro patas mientras toco las tetas de mi amiga. Están los dos sobre la camilla y yo de pie en el suelo con ellos a la altura de mi cara. Se que la quiere follar ya. Juguetea con sus dedos por detrás y arrima su polla, ella se vuelve loca. Entonces es cuando me acerco a por un condón y se lo doy para que se lo ponga. Inmediato, entra hasta el fondo embistiendo a esa hembra a merced a cuatro patas frente a él. Fóllala, fóllala, le digo mientras se acerca para besarme y yo le chupo los pezones y a ella le meto un dedo en el culo no sin antes comprobar cómo entra la polla en su coño con la mano. No se si le gusta el anal pero me pareció que ese agujero pedía guerra… habrá que comprobarlo. Me encantará hacerlo, tanto de espectadora, como con el juguete nuevo que me compré hace unos días.

Cuando estábamos en el momento más álgido, se acercó la masajista del local diciendo que necesitaba la sala para dar un masaje, así que grité que salíamos en cinco minutos sin variar en nada lo que estábamos haciendo, de momento. Unos segundos más tarde, unos bombeos más tarde dentro de ese coño chorreante, decidimos salir a buscar otro enclave para seguir con nuestros juegos.

Una sala al fondo del local, totalmente abierta, simplemente una cortina permite la “intimidad”. Cuando la elegí no estaba del todo segura de que Beti admitiría jugar allí cuando, además Jesús dijo que nos iban a freir a “visitas” pero no le importó, estaba totalmente entregada a la causa, al disfrute, al desmelene. El colchón está en alto y es como un pequeño escenario. Mi alma exhibicionista disfruta en ese espacio. Se que van a venir a mirar, a mirarme, a mirarnos, a intentar acercarse, ese titubeo que se siente que tienen los hombres que hasta allí se arriman y que no saben ni ellos mismos si van a ser capaces de venir a la escena para disfrutarla desde cerca, participando o desde lejos siendo meros observadores de la situación, la percibo y me excita sintiéndome la directora de orquesta que permitirá o no que uno me toque, o que uno me folle o no. Es mágico, para mi lo es. Pero, además, hoy, me sentía un poco protectora de esa persona que quería vivir aventuras y de la que me creí un poco responsable en ese momento.

Los tres arriba, nos miramos, de rodillas, como si de una coreografía se tratara y nos tuviéramos que poner de acuerdo para empezar a la vez. Le dije a ella que se tumbara, abrí sus piernas y entre ellas me acerqué a sus tetas, a su tripa, la besé por todo el cuerpo hasta llegar a su coño. Yo me aseguré de tener mi culo hacia la esquina de la pared, por la que no podía entrar nadie nada más que Jesús, que estaba allí mismo y que sentía que se acercaba poco a poco para penetrarme mientras observaba como me alimentaba del cuerpo de nuestra chica. Empezaron a entrar hombres, no se muy bien de donde salían por que minutos antes no vi tantos en el local, pero aparecían como setas. Unos vestidos, otros desnudos que al verme follada se decidían por sobar a Beti. Primero tocan una teta mientras se pajean, uno, dos… se animan según ven que son admitidos a tocar, de momento. Yo observaba mientras estaba siendo follada y alcanzaba un orgasmo que grité para que todos supieran que lo estaba haciendo.

Beti se sintió confiada y cambió de postura. Su culo hacia la puerta por la que entraban los visitantes y, con ese conjunto de lencería mientras Jesús me follaba era irresistible, así que el primero que se acercó a juguetear con su coño fue un inglés alto, bien parecido y con una polla muy pero que muy interesante. Supimos que era inglés porque cuando decidió follársela pidió un condón en inglés pero no lo encontró, por lo que se tumbó delante de ella para que le comiera la polla. Beti se afanó en comérsela muy bien mientras miraba a los ojos de ese apuesto hombre queriéndole decir que yo quería también esa polla, pero no hubo suerte. A los pocos minutos dijo que se corría, y se corrió salvajemente mientras otro hombre de los que jugueteaba por detrás de ella veía como se colocaba un condón y metía su polla hasta el fondo manteniendo las manos en sus caderas para sujetarla. Ella no miraba, no sabía quien la follaba. Me buscaba con su boca, nos besábamos, éramos zarandeadas por las pollas que nos metían por detrás, una enfrente de la otra. Veía la cara de placer de esos hombres, del que la follaba ahora y los que tocaban, todavía tímidos. Mientras el inglés se acercó de nuevo para limpiar con un papel su corrida.

De vez en cuando Jesús paraba de follarme, le podía el espectáculo? Prefería follársela a ella? quería que se la comiera? yo no quería apartar la vista de lo que tenía delante. Beti me estaba dando una muestra de placer para disfrutarla y no me la quería perder. Pero Jesús volvía a la carga, me volvía a follar y yo seguía disfrutando de detrás y de delante. Con la vista por delante y por mi coño por detrás. Espectacular momento. Lo viví muy intensamente. Ver como penetraban a mi amiga era como si lo estuvieran haciendo conmigo. El siguiente hombre con sus manazas sobre su culo, metiendo su polla en ella, agitándola contra mi, me puso a mil por hora. Beti me agarraba las muñecas, sujetándome, aferrándose a mi como para hacerme sentir el placer que sentía ella y lo estaba consiguiendo. Me corría, me corría, mi coño se encogía y soltaba todo el flujo que podía al sentir el clímax. Lo dije en alto: “me corrooooooo, agggghhhhhh” Quería que Beti supiera que estaba disfrutando tanto o más que ella. Super placentera la situación.

Empapados en sudor estábamos los tres. Me giré hacia la polla de mi chico, necesitaba unos mimos para ponerse a tope y se los dí. Lamía sus pezones, le besé, nos besamos con deseo. Intercambiando nuestro placer con nuestras lenguas. Justo los que necesitaba para que Beti se girara sobre ella misma y le diera su culo a cuatro para ser follada de nuevo por esa polla. Lo ideal hubiera sido que ella mientras me comiera el coño pero era demasiado para el primer día jajajaja…. con que se lo dejara comer, suficiente, iremos paso a paso. Jesús se puso el preservativo y la folló duramente escasos segundos. Sabía que se iba a correr dentro de ella, hoy el regalo iba a quedar envuelto en plástico y para nuestra nueva amiga. No me va a tocar beber leche. No se lo voy a pedir porque se que hoy le costaría correrse así. El grito de guerra me hizo percibir que así estaba siendo. ¡¡Disfrútalo cariño!! pensé en ese instante.

Paramos, nos sentamos, los hombres que observaban se fueron yendo. Ya no había más que ver. Solamente tres cuerpos extasiados de deseo, despeinados, sudorosos, chorreantes, satisfechos….. y sonrientes, muy sonrientes. A mi me dio un ataque de risa, que contagié y al que a uno de nuestros observadores le hizo mucha gracia y comentamos algo entre nosotros sobre la risa. Era el hombre que me había estado metiendo mano antes de que llegara Beti, curioso.

Nos quedamos hablando mucho, mucho rato.. al poco uno de los hombres que nos había estado mirando vino para felicitarnos por el buen trío que hacíamos y lo mucho que le habíamos hecho disfrutar. Mmmm, eso me gusta y creo que a Beti también le gustó oírlo. Comentamos con ella lo que nos había sorprendido, para bien, tanto a Jesús como a mi. Para ser la primera vez había estado como pez en el agua, se había soltado, el placer había sido su único pensamiento mientras estuvimos allí y eso lo notamos los tres haciendo que disfrutáramos todos muchísimo y es de agradecer, la verdad. Muchos temas de conversación salieron y ella seguía con las bragas en la muñeca y repitiendo lo intenso y placentero que había sido todo. Ella ya quería repetir otro día, lo tenía claro. Me encanta!!!!

Se quedó con la copla del inglés, de lo bueno que estaba y la pena de que no la había follado. Le preguntamos a la del local si venía a menudo por para ver si nos lo podíamos encontrar algún otro día. Habrá que volver para ver si se quita la espinita y nos lo encontramos, la verdad, yo tampoco le haré ascos a esa polla. Nos preparábamos para irnos y me acerqué al baño, cuando salí estaban los dos en la barra morreándose intensamente y Beti tenía su mano en el paquete de Jesús… vaya calentón que tenía otra vez!!!!. Creo que si le digo que sigamos, por ella, habríamos entrado al lío otra vez jajajajaj… que vicio!!!!

En la calle nos besamos en la boca para despedirnos mientras se aseguraba de que volveríamos a hablar y que nos veríamos de nuevo. Yo estaba convencida de que así sería y de que así será. Estamos deseando volver a quedar y volver a disfrutar… cuando? pues, no lo sé, nuestras agendas nos lo irán diciendo pero estoy segura de que Jesús también se apuntará.

¿Sabéis que me gustaría realmente? un encuentro entre Rocío, Beti y yo con hombre o sin hombres pero me inclino a que si quedamos las tres, va a ser un escándalo. Voy a planear una cena con espectáculo después jajajajaja

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