Descubriendo lo sumisa y adicta que soy

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Acababa de cumplir los 14 y ese verano mis padres decidieron que en vez de quedarme en Julio en casa fuese con mis tíos, a su apartamento de la playa en la zona de Cádiz. Mi tío tenía cerca de 45, y mi tía 44, no tenían hijos, me sacaban más de 30 años, aunque yo veía siempre a mi tío, igual muy apuesto algo pillín ya que siempre tenía bromitas y toquecitos con su sobrina preferida. Reconozco que a mí me gustaba en cierta forma provocarle y esperar alguna frase bonita hacia mí, aprovechaba mis escotitos y minifalda para insinuarle y dejarle ver algo más de lo normal.

Llevábamos ya en su apartamento casi una semana, habíamos jugado otras veces en el agua pero los roces los consideraba normales igual que me daba la sensación que lo mismo le parecía a mi tía

Pero un día se convirtió en tan especial para mí y también para él, por todo lo que paso. Estábamos jugando en el mar con un balón de playa los tres, tenía que impedir que mi tío cogiera el balón, estaba detrás mía, note que me empujaba con la rodilla metiéndomela desde atrás entre mis piernas yo apretaba mis piernas para que no pudiese moverse, en un momento puso la mano en mi culo, no le dije nada y siguió tocándome, recuerdo que nos caímos al agua y sin salir a la superficie me toco el coño por encima del bikini, más bien me lo agarro.

Seguimos jugando y esta vez se atrevió a meter su mano en el bikini tocándome el culo, yo mire a mi tía y vi que no se percataba de nada, me arrime a mi tío para hacer que sacara su mano, lo que conseguí fue que la metió más adentro y me tocaba el coño, estuvimos así un rato hasta que mi tía me tiró el balón y al ir a recogerlo él se vino encima mía hundiéndonos, ese momento me bajo la braguita del bikini y me paso su mano por mi coño enseguida salimos a la superficie y yo subiéndome la braga del bikini con disimulo, yo no le decía nada porque me gustaba lo que hacía, él lo noto enseguida no le mostraba ningún signo de rechazo ni de enfado. El balón estaba justo a mi lado y cambiamos de posición tenía a mi tío delante, se pegó a mí y se apaño para doblar su pierna y tocarme con su pie en el bikini, veía que yo no protestaba y me gustaba el juego le dejaba hacer. Enseguida me toco a mi delante y una de las veces que de nuevo nos hundimos me metió su mano en la parte superior del bikini y me sobo las tetas, cuando salimos mi tía solo dijo «lo pasáis bien, y la vas hacer tragar mucha agua vaya lo que aguantáis» como me acuerdo de esas palabras cuando yo me esperaba alguna reprimenda

Seguimos jugando un rato más y siempre aprovechaba para tocarme de alguna forma.

Mi tía se salió a la playa y mi tío aprovecho para decirme bucea por debajo, me quede mirando sin entender, me insistió, le obedecí y cuando llegue a su altura vi que se había bajado el bañador y se le veía la polla, estaba empinada rígida me levanté justo donde estaba el, era la primera polla de uno mayor que veía y me dijo así compensamos el que te viera tu coño te molesta? Conteste, qué no en absoluto, le miraba ensimismada encantada de todo, me cogió una mano diciéndome cógemela así lo hice y me encantó la sensación, me ordeno que moviera la mano, yo mire a la playa para ver sí mi tía nos veía pero a esa distancia no distinguiría lo que hacíamos, moví la mano y seguí sus instrucciones de cómo hacerlo hasta que note como se corría y subía a la superficie su leche, solté su polla y me aleje nadando.

Al rato vino nadando hacia mi diciendo, a que te gustó, le conteste, seguro que menos que a ti, me dijo ven aquí acércate y me acerque, estaba juntó a él, vi como se había bajado otra vez el bañador, me dijo metete a bucear y métetela en la boca venga, le obedecí sin decir nada y estuve un rato con su polla en la boca, la notaba pringosa pero no me desagrado nada, quería quedar bien y viese no era una tontita y aguante un buen rato chupándosela lo que pude, cuando salí a la superficie se la había puesto dura y le miré a la cara mientras me decía buena chica pero ahora tienes que seguir venga abajo, no sé porque pero le obedecía en todo, me encantaba obedecerle, me sumergí y fui directa a su polla me la metí en mi boca chupándola pero no consiguió lo que pretendía de correrse se dio cuenta era difícil y no conseguiría hacer que se corriera en mi boca, salí a la superficie y el metió su mano y cogiendo la mía me dijo ven lo haremos juntos, le pajeaba otra vez y no paraba de decir eres mi sobrina maravillosa mi preferida, dime has chupado muchas pollas porque se nota y le dije que sí pero de edad parecida a la mía y así se corrió.

Nos pusimos a nadar hacia la orilla pero antes me dijo tengo que enseñarte a masturbarme y tragártelo todo, te haré una experta

Cuando llegamos a la sombrilla mi tía seguía tumbada sin enterarse de nada,

Nos fuimos al piso y mientras mi tía estaba en la ducha, vino a mi dormitorio, yo seguía en bikini me dijo quítate el bikini quiero ver lo bien que estas desnuda, mientras vigilaba que mi tía seguía en el baño, me desnude y le pregunte te parezco bonita, me contesto eres preciosa y un cuerpo de modelo me gusta, me encanto oír eso de una persona mayor adulta, era lo mejor que me habían dicho nunca y me quitaba el complejo de no sentirme a gusto conmigo misma, mi tío aprovecho el momento para decirme que en la siesta de mi tía bajara a la playa, él solía irse a caminar su paseo, no pregunte porque pero me lo imaginaba

Cuando fui al baño no pude aguantar más y me masturbe como solía hacerlo, para mi cuerpo sí que era una experta

Esa tarde no tardo en encontrarme en la playa y me llevo a un sitio resguardado, me tumbe en la toalla solo con las braguitas en tetas, con mi tía no podía hacerlo no lo aprobaba, y acercándose a mi me las beso, me las acarició mientras su mano me recorría con caricias todo mi cuerpo, sentir sus manos entre mis piernas y después dentro de mis bragas, me excito muchísimo, me dijo quítate la braguita, seguía obedeciéndole sin rechistar.

Me quede desnuda y me toco me acaricio los pezones me gustaba me excitaba aun mas, me separo las piernas y se entretuvo con mi coño y labios acariciándolos tocándolos me masturbaba como yo hacía y le iba diciendo sigue así continua, el aprovecho para que repitiera que era su chica y que le obedecería en todo que mi cuerpo le pertenecía, yo a todo decía que sí y repetía sus palabras como él quería, me corrí en ese estado de excitación, a continuación me metió un dedo dentro de mi coño sabía bien lo que hacía busco mi punto débil y en cuanto me lo toco no pude contenerme, volví a correrme como una guarra gritando, si soy tuya sigue, en ese momento me beso notó mis labios fríos de placer, quitó el dedo de mi coño y pegándose a mi me dijo bájame el bañador, le obedecí, siguió diciéndome es hora que te enseñe a masturbarme y luego a chupármela, le obedecí en todo siguiendo sus instrucciones estuve pajeandole como decía, lamiéndosela y chupándosela hasta qué se corrió en mi boca, me ordeno que tragase todo, lo hice y me gusto mucho su sabor. Me encantaba su polla como él decía polla de maduro

Estuvimos hablando me dijo de quedar otras tardes así y que estuviese preparada para cuando no estuviese mi tía buscaría para estar conmigo, a mi tía no había que decirla nada y ni qué sospechara nada. Nos fuimos cada uno por separado, me puse el sujetador por si venia mi tía. Al rato llego mi tía a la playa. la llamé para que pusiera conmigo, después de una hora la dije que me iba al piso para ducharme que ya estaba cansada de tanta playa.

En el apartamento ya estaba mi tío, me llevo a mi dormitorio nos desnudamos y le quise demostrar que ya sabía chupar su polla y me dedique a ello, mientras él me tocaba, de nuevo se corrió en mi boca, le cogí gusto a hacérselo a tragármelo, notaba que me mojaba muchísimo

Esa tarde de paseo por la ciudad se empeñó en hacerme un regalo el primero de los muchos que me haría.

Desde ese día siempre buscamos el vernos y todos los días se la chupaba más de dos veces al día, quería follarme y por precaución me lo hacía por atrás, para mí fue toda una sorpresa que me la metiera por el culo pero tampoco me desagradaba le comente que me excitaba mucho oírles follar por la noche y que me masturbaba mientras les oía, alguna noche vino a mi cama para que se la chupara después de haber follado a mi tía, así le limpiaba de sus jugos, me daba muchísimo morbo saber donde había estado su polla antes, cuando volvía a su dormitorio yo tenía que masturbarme cada vez mas viciosa.

Me convirtió en su sumisa viciosa

De vuelta de ese verano seguimos viéndonos muchas muchísimas veces y no tardamos mucho en follar, y en regalarme cosas hasta que le dije no mas regalos que no puedo justificarlo y empezó a darme dinero, así me dijo que era su putita sumisa, chupe otras pollas de chicos de mi edad pero las de maduros son las que me gustan y excitan.

Me encantaba tener un amante secreto ser su putita y lo convertí en mi gran secreto

Desde entonces siempre que le apetecía a él ó a mi quedábamos, siempre con mucha discreción. Cuando me case se apaño para quedar conmigo dos días antes de la boda y pasar una noche completa fue maravilloso, era su regalo de bodas como me dijo. El sabe de sobra que mi marido en el sexo no le llega a su altura ni mucho menos, y que con el llego a correrme las veces que deseamos, en cuanto hablamos por teléfono ya estoy mojada y mis manos van directas a mi coño sin parar de tocarme.