Una mamada a un desconocido en medio de una fiesta

Hola a todos en la pagina de Todo Relatos

Me presento ante ustedes, soy Fated, un chico de apenas 19 años de edad que lleva mucho tiempo leyendo en la pagina pero hasta ahora me atrevo a escribir alguna de mis experiencias homosexuales para ustedes. Soy de México, mido 1.73 m y soy de complexión mediana, cabello corto color negro y de piel clara. El tema de mis preferencias es bien sabido por las personas que conozco, no por ser amanerado ni nada asi, simplemente porque me han visto con mis novios y demás muchas veces, incluida mi familia, por lo que no es raro que se me hagan bromas sobre gays o asi, pero dejaron de molestarme hace mucho tiempo.

Bueno, comienzo a relatar.

Lo ocurrido pasó hace unos cuantos meses, cuando tenia 18 años. Estaba en una fiesta en una casa, con unos amigos y amigas, éramos 5 en total. Ellos no son importantes en el relato por lo que directamente evitare decir sus nombres o mencionarlos. La casa era grande, era de dos pisos y tenia una terraza muy amplia, lo suficiente como para que estuvieran unas 25 o 30 personas, mesas, sillas y mas en ella. El interior esa espacioso, las habitaciones eran grandes y espaciosas, de color blanco todas las paredes del interior, incluidas las del baño, aunque ya llegaremos a ese lugar despues.

Todos estaban arriba en la terraza, unos hablaban y reian en la mesa otros estaban cantando o bailando cerca del estereo, yo era de esos últimos, ya que me gusta mucho cantar. Todo estaba perfecto hasta entonces, aunque no me sentía tranquilo, sentía como si alguien me mirara y estaba en lo cierto, en algún punto al voltear hacia la mesa noté como uno de los chicos me miraba fijamente, como si me analisara. Era mas o menos de mi edad, aunque mas alto que yo, de cabello castaño oscuro y piel clara, llevaba una chaqueta oscura sobre una playera negra lisa y unos jeans azules oscuros que le quedaban algo ajustados. Intente no darle importancia pero no me era posible ignorarlo. En algún punto simplemente ya no me acordaba de ello y segui como si nada pasara.

Al poco tiempo me aleje del grupo que estaba en el estereo y me fui hacia la mesa, para interactuar un poco con todos. No duré mucho ahí, tuve que ir al baño, el cual estaba en la planta baja, por lo que me aleje de todos los demás. No duré mucho ahí, ya que no quería perderme nada de la fiesta, pero al salir de ahí me topé con que el chico que me miraba estaba sentado en un sillon fuera del baño, como si esperara o mas bien, como si me esperara a mi.

-Ah, hola, me llamo Brandon… -No se giró para voltear a verme, puesto que ya lo estaba haciendo desde que salí por la puerta.

-Hola, ¿qué tal? Yo me llamo Dario. -Respondí algo dudoso de lo que pasaba, pero intrigado, ya que, aunque no lo mencione antes, Brandon se veía bastante atractivo para mi.

-Si… lo se… tus amigos me contaron mucho sobre ti desde hace rato.

En ese momento supuse lo que me quería decir, sabia que yo era gay y quizá quería algo conmigo, no lo dije directamente pero se sentía cierto aura especial en el ambiente.

-Jajajaja espero que nada malo. -Respondí solo para ver su reacción, sinceramente no sabia que esperar aun.

-No, no para nada, de hecho, algunas cosas interesantes… como que estas soltero… -A medida que lo decía comenzaba a ponerse de pie y acercarse hacia mi. -Que tu ultima relación terminó hace 3 meses… y… por ultimo… que tu…

Ni siquiera terminó de decir la frase, se había acercado tanto a mi que básicamente estábamos pegados el uno con el otro. Al decir “tu” lo siguiente que hizo fue besarme directo en los labios. Mientras avanzaba hacia mi pude sentir que iba a hacerlo, pero cuando ocurrió me congelé por completo. Me tomó con ambas manos rodeando mi cabeza, su agarre era fuerte, mis manos tomaron sus brazos firmemente mientras respondia a su beso. Su pelvis se pegaba a la mia lentamente, pero al ser el mas fuerte que yo me pegó a la puerta del baño, mientras nuestros cuerpos también se juntaban fuertemente. Sentí como su ereccion estaba pegada a mi, mientras que la mia terminaba de formarse.

Dejó de besarme por un momento, el cual aproveche para poner mis manos contra la pared, a la altura de mi cabeza, como toda una chica. El sonrió al verme y extendió su mano hacia la puerta del baño… la abrió y yo entendí lo que me intentaba decir. El cuarto del baño era grande, bastante mas de lo que estaba acostumbrado, aunque no se me hacia raro ya que el resto de las habitaciones también eran muy amplias. Al cerrar la puerta se giró hacia mi y seguimos besándonos, esta vez me pegó a la pared contraria a la puerta mientras me arrimaba aun mas su cuerpo, yo estaba que explotaba de la excitación. Comenzó también a besar mi cuello y a darle ligeras mordidas mientras yo solo respondia con ligeros gemidos que apenas se escuchaban. Despues de eso le desabroche su pantalón y lo baje junto con su boxer, su verga dura estaba frente a mi cara, ya que me había incado para hacer eso ultimo. Estaba perfectamente depilada, tenia un olor fuerte pero que a la vez era atrayente y además media sus buenos 17 centimetros. No pude evitar voltear a verlo mientras comenzaba a meterla en mi boca. La meti entera, ya que practica en mamar me sobraba. Al llegar mis labios a tocas su pelvis el me tomó por la cabeza y me comenzaba a mover de adelante hacia atrás, siendo el quien llevaba el ritmo de mi mamada. Yo me limité durante esos pocos segundos a tomarlo por su culo, que no era grande pero también estaba perfectamente depilado. Despues de eso tiré muy fuerte y la saque de mi boca, para bajar un poco mas mi cabeza y comenzar a chuparle sus huevos, que tampoco tenían un solo vello. Mientras lo hacia comenzaba a masturbarlo con una de mis manos, el solo gemia en señal de que le gustaba. Asi paso un poco tiempo hasta que volvi a meter su miembro en mi boca. Comencé a chuparlo muy rápido y el a los dos minutos de eso se vino en mi boca. Mi boca tenia su semen en ella y como no podía ser de otra forma, me lo trague todo. El salió de ahí antes que yo ya que me encontraba paralizado, me había encantado la forma en que pasó todo. A los dos minutos volvi a la fiesta, nadie notó nuestra ausencia, excepto por mi amiga Laura, que me preguntó si había pasado algo, a lo que asentí pícaramente, mientras Brandon estaba sentado al lado de ella.