El conserje que se folla a las inquilinas
Eran las 8 de la noche el horrible jorobado se encontraba en su fiel carcocha a mitad de un terreno baldío, tomando unos tragos acompañado de una hermosa jovencita semidesnuda, jamás en su miserable vida se hubiera imaginado estar en una situación así, Manuel la miró con incredulidad, aun no creía las palabras que había escuchado, todo parecía un sueño, abrió y cerró la boca, pero no salió ninguna palabra, ¿cómo estaba pasando esto?, Cosas como esta no le suceden a tipos ordinarios como él.
-Deberíamos seguir adelante antes de que cambie de opinión — dijo Jessica quien tampoco podía creer lo que estaba sugiriendo. No podía entender las razones por las que estaba tan caliente, pero quería seguir adelante.
Luego de tomar un pequeño sorbo al fuerte licor que tenía el viejo, se acercó más a él, inclino su cuerpo y le dio un tierno beso, el jorobado correspondió aquella muestra de afecto de inmediato, rodeándola con su brazo para atraerla aún más como si de unos enamorados se tratasen y con su mano libre agarro la desnuda pierna de la chica firmemente.
Pronto los besos tiernos empezaban a subir de nivel, se besaron apasionadamente, explorando la boca del otro con la lengua. Ella podía sentir aquellos labios resquebrajados apoderarse de su boquita como todo un experto. Por su parte Manuel comenzó a pasar su mano suavemente de arriba hacia abajo por toda la longitud de los blancos muslos de la nena.
-uyyy señor usted sí que sabe besar muy rico, recuerde que todo esto lo hago como regalo por defenderme de esos horribles borrachos, así que disfrútelo porque dudo que un viejo miserable como usted vuelva a tener una oportunidad como esta.
Don Manuel lejos de ofenderse, volvió a apoderarse de esos finos labios para que ella no siga hablando, le encantaba sentir ese suave rostro y sentir ese fresco aliento rodearle toda su arrugada cara, poco a poco hacia más avances bajando su rostro hasta el sensible cuello de la muchacha para llenarla de besos y volver nuevamente a esos mojados labios, ella por su parte solo cerraba los ojos y se dejaba llevar por el momento.
Pronto Jessica sintió como aquel rasposo rostro bajaba mucho más allá de su cuello, llegando a sentir candentes besos en el inicio de sus pechos, desgraciadamente para ambos, la blusa limitaba los avances del viejo para bajar aún más su feo rostro.
Jessica al ver que el jorobado no se atrevía a bajarle el escote de su blusa por miedo a que se la rompiese, decidió actuar por su cuenta, así que, alejándose de la boca de su horrible acompañante, le puso la mano en el hombro para mantener el equilibrio mientras levantaba la pierna y la giraba sobre el rechoncho cuerpo del hombre para así sentarse sobre su regazo. estaba un poco apretado por lo pequeño que era el carro, pero podía arreglárselas. Manuel se quedó mirándola asombrado mientras ella hacia los últimos movimientos para estar mucho más cómoda.
Recordemos que Jessica solo tenía puesta su pequeña ropa interior, mientras que el repugnante tipo tenía su verga afuera, apenas una fina tela impedía que el viejo jorobado penetrara en ese mismo instante a la hermosa mujer que estando arriba de él, empezó a contornear su cuerpo como si de verdad estuviera siendo penetrada.
La jovencita por fin cómoda, agarro las manos del viejo colocándolas sobre sus apetecibles pechos, dándole luz verde para que este viejo suertudo siguiera tocándola tal cual como se habían quedado en el vestidor de la piscina, ella sonrió ante la forma en que el rostro del viejo se iluminó cuando comenzó a masajearlos.
-Te gustan mis senos, ¿no es así, viejo pervertido? — dijo con una voz juguetona
–Oh, Dios mío, sí. Son realmente maravillosos, nenita, son tan suaves… — hablo por fin el jorobado, quien aún le costaba procesar lo que le estaba sucediendo.
-Bueno, creo que ahora te mereces algo más que solo tocarlos.
Con eso, la excitada jovencita agarró la parte inferior de su blusa levantándola completamente, dándole una gran vista al vejete de aquel apretado brasier negro, el cual esperaba que se la quitara por completo, pero grande fue su sorpresa al ver que la jovencita volvía a bajar su blusa atrapando su canosa cabeza en el proceso. Afortunadamente, el material de la parte superior era lo suficientemente elástico como para aguantar tener la cabeza del horrible sujeto dentro de aquella prenda, haciendo que inevitablemente el viejo pegara su rostro entre esas hermosas montañas de carne.
la cabeza del anciano estaba completamente sumergida debajo de ella. La bella jovencita esbozó una sonrisa cuando sintió que el viejo se comenzaba a mover rápidamente dentro de ella de lado a lado como si se tratara de un “motorboating”.
Jessica se imaginaba la alegría en el rostro del anciano. Por su parte Don Manuel estaba en la gloria. Felizmente frotaba su rostro, besando y lamiendo la suave y cálida piel mientras avanzaba al jugoso premio mayor.
– ¡Siiiiii, chúpamelas, viejo bastardo! ¡es lo que querías ¿no?! ¡hazlo papi no me hagas esperar! — Dijo Jessica contorneando su cuerpo cuando sintió al jorobado estirando la mano por debajo de su blusa y comenzar a bajarle las copas de su brasier.
Por primera vez el viejo jorobado vio aquellos rosados pezones totalmente duros de tanta excitación, instantáneamente su boca se llenó de babas y como un desesperado se puso a chupar y succionar aquellos pequeños pezones, antes de enterrar su rostro entre esas suaves tetas nuevamente babeando como un perro hambriento, mientras ella apretaba la cabeza del vejete con fuerza contra su pecho.
–uffff que ricas están tus ubres nenita, podría quedarme prendido de ellas hasta el amanecer
– ¡Ohhhhhh! ¡Oh, sí! ¡Oh, sí! ¡Siiiii! ¡son todos suyas! ¡succione más fuerte !¡Haga con ellas lo que quiera maldito viejo suertudo! — Le dijo en voz alta mientras sentía como sus senos eran juntados y ambos pezones eran succionados a la vez.
Mientras el horrible pero suertudo tipo pasaba su lengua por todos los rincones de los senos de Jessica como si no hubiera un mañana, la sexy jovencita se movía frenéticamente sobre esa palpitante verga, le encantaba frotarse contra ese mástil de carne y sentir que en cualquier momento la podría sentir dentro suyo si moviera tan solo un poco su ropa interior.
A pesar de su actitud extrovertida, Jessica no tenía mucha experiencia en el sexo. Los pocos afortunados que se pudieron acostar con ella, nunca la pudieron satisfacer, Ni una sola vez en todo ese tiempo se había corrido a través de la penetración, sobre todo porque su novio de turno nunca había durado más de unos pocos minutos. Ellos solo se limitaban a bombear dentro de ella lo más rápido que podían y luego se agotaban y se corrían antes de que Jessi tuviera tiempo de comenzar a divertirse.
“Ojalá esta vez sea diferente, ciertamente este horrible viejo tiene un pene más grande y grueso que mi último enamorado, además como ya es viejo se ha debido coger a muchas chicas en su juventud, por lo que debería tener más experiencia en estas cosas” — pensaba ella mientras jadeaba por los tremendos chupeteos y arremetidas que sentía en sus senos y en su zona intima.
La bella jovencita tenía que admitir que la idea de follar con un completo extraño a mitad de la nada en un coche viejo y no en una cama de algún buen hotel como estaba acostumbrada, era extrañamente emocionante, a estas alturas la calentura del ambiente y todas las sensaciones que estaba sintiendo hacían que Jessica ya se encontrara bastante mojada.
Luego de unos minutos de intensos manoseos y lamidas a sus provocativos pechos, la jovencita por fin decidió liberar al horrible vejete de su blusa, llevando su prenda hacia arriba y quitándosela por completo, para ver a ese horrible anciano todo sudado y jadeando con una sonrisa de oreja a oreja por todo lo que había experimentado.
–gracias nenita, fueron las tetas más ricas que he probado en toda mi vida
-jiji ya vi que le gustaron mucho, parecía un bebe que no las soltaba por nada del mundo, solo espero que no haya dejado ninguna marca.
Luego de su pequeño intercambio de palabras, la sensual jovencita empezó a moverse rítmicamente sobre la verga del horrible vejete, incrementando su intensidad con nada segundo que pasaba.
–yo…yo tengo una caja de condones en el asiento de atrás — dijo un viejo desesperado por meter de una vez su gruesa verga dentro de la hermosa jovencita antes de que pasara algo que arruine el momento.
-ufffff ahhhh no…no hace falta, hoy es un día seguro ahhhh — murmuraba la jovencita con una pesada voz mientras se seguía moviendo encima del viejo, como si se estuviera masturbando
–¿realmente te la puedo meter a pelo?
-siiiii ya se lo dije…ufff, Es bueno que pregunte y todo, pero realmente estás matando el ambiente ahhhhhh
El conserje como pudo se deshizo de su gastado pantalón tirándolo al asiento de atrás, su verga estaba lista para poseer a ese hermoso ángel caído del cielo, apunto su miembro hacia aquella mojada entrada mientras la noble muchacha llevaba sus manos para hacer a un lado su ropa interior pero justo cuando se iba a consumar el acto, el horrible pitido del celular del viejo jorobado empezó a sonar con un sonido tan fuerte que era imposible ignorarlo.
-oigaaa apague su celular
El viejo inmediatamente tomo el celular y colgó la llamada, pero otra vez volvió a sonar
– jummmm ¿quién es tan insistente? — renegaba la muchacha ya que el terrible sonido estaba matando el momento de calentura
–es…es mi mujer
– ¿usted tiene esposa?, Yo pensaba que era un viejo solitario
A pesar de las palabras hirientes, al jorobado poco le importo, ahora solo pensaba en que decirle a su terrible esposa controladora
–pues solo soy yo y mi esposa en un cuartito alquilado en una zona humilde de la ciudad.
-vaya, realmente no me imagine esto, en todo caso usted es un maldito desgraciado por estar acá, mientras su esposa lo está esperando en casa — dijo la indignada muchacha intentado bajarse del regazo del viejo ya que el ambiente se había arruinado con esta última revelación.
–noooo nenita tu no entiendes, ella es una bruja controladora y problemática, se gasta el poco dinero que llevo en cosas banales y me pone los cuernos con los vecinos cada vez que puede
– ¿y usted piensa que me voy a tragar eso?, esto fue un error, deme mi ropa y váyase con su esposa, yo tomare un taxi
Antes de que Jessi se quitara del regazo del viejo, este la tomo del brazo firmemente y la miro con unos ojos suplicantes.
–eres lo mejor que me ha pasado en años nenita, no quiero que esto se termine así
-usted es casado, por favor no insista o le daré una cachetada tan fuerte como la que le di en los vestuarios — le dijo molesta, mientras se bajaba del regazo del viejo y se sentaba en el asiento del copiloto buscando su jean para ponérselo
–toda mi vida he sido miserable al lado de esa mujer y no puedo hacer nada ya que es una de esas viejas achoradas callejoneras, si llegara a recriminarle algo, seguramente me molería a golpes y si por alguna razón le respondo, toda su familia que está lleno de delincuentes, me golpearían hasta el cansancio — dijo un desesperado viejo, el cual no estaba diciendo ninguna mentira, realmente su vida era una pesadilla y solo le quedaba ser un saco largo con aquella bruja ya que él no servía como delincuente.
Jessica lo miro a los ojos, realmente parecía que no mentía, su molestia de hace unos momentos se estaba desvaneciendo, luego de analizarlo por unos segundos se le ocurrió algo para verificar si lo que decía el abrumado viejo era verdad.
-contéstele la llamada
–pe…pero no quiero escucharla ahora, si hago eso ahora seguramente empezara a gritar y desahogarse conmigo.
-solo hágalo, será la única forma de comprobar si lo que usted me dice es cierto o no
El viejo con un temor evidente contesto la llamada, a Jessica solo le basto escuchar las primeras palabras de aquella rabiosa mujer para corroborar que lo que decía el pobre jorobado era verdad.
—oyeeeeeee, infeliz inútil ¡¿por qué te demoras tanto en contestar?! ¡¡¿dónde mierdas estas?!! — hablo una ronca voz femenina típica de los barrios mas peligrosos de la ciudad
–ho…hola querida, tuve un altercado con unos pandilleros y tuve que regresar a la piscina por el botiquín de primeros auxilios para atenderme.
— vaya y ¿cuál es la novedad?, si siempre te paran pegando, me da vergüenza ajena lo poco hombre que eres… y ¿solo por eso me colgaste la llamada la primera vez que te llame pedazo de bestia?
–no…es que yo me confundí al momento de contestar y…
—yaya cállate mejor, Eres un bueno para nada, por eso te paran golpeando y bien merecido te lo tienes…
Jessica estaba completamente convencida de lo peligrosa que podría ser esa horrible mujer, empezó a sentir lastima por el viejo jorobado, no entendía cómo se pudo juntar con una mujer como esa, así que mientras Don Manuel seguía recibiendo el sermón de su mujer, Jessi algo apenada por lo que le había hecho hacer, se apegó juguetonamente a él y empezó a llenarlo de besos por todo ese rasposo rostro, el viejo por su parte, primero se mostró sorprendido y hasta algo asustado si que su mujer los escuchara, pero luego correspondió los suaves besos cada vez que la sexy nena acercaba sus suaves labio.
—¿oye inútil me estas escuchando?, ya que aun estas afuera, aprovecha para comprar…
La problemática mujer no se imaginaba que mientras ella le gritaba a su horrible marido, este se la estaba pasando de lo lindo con una jovencita de tan solo 20 añitos, que tranquilamente podría pasar como una extranjera si pasara por el barrio humilde donde vivían ellos.
Por su parte Jessi empezaba a sentir un terrible morbo al estar besuqueándose con tal horrible viejo mientras la esposa le hablaba y aunque ella odiaba las infidelidades, esta era una ocasión especial ya que aquella mujer era un ogro y solo hacia esto para darle un poco de alegría al feo jorobadito, así que sintiéndose más juguetona, volvió a subirse en el regazo del viejo , le quito el celular y lo puso a un lado, tomo las callosas manos del hombre y las puso en su trasero para que este la tocara a su gusto, mientras ellos se seguían besando sin hacer mucho ruido para que la vieja de la mujer no sospeche
—¡¡carajo contesta cuando te hablo mierda!!
El horrible jorobadito salió un momento del trance del besuqueo que se estaba dando con la jovencita para responderle y decirle que se estaba acomodando la gasa donde estaba la herida y el chichón que tenía producto del golpe que le dieron esos borrachos, por su parte a Jessi no le gustaba que esa vieja la interrumpiera su rico momento a cada rato, sentía ganas de ella misma mandarla al diablo y colgarle el teléfono, pero sabía que eso solo empeoraría las cosas para el viejo más adelante, así que en un impulso de calentura, se bajó una copa de su brasier y le ofreció uno de sus rosados pezones al hambriento viejo que no tardo en llenar toda su boca con esa suave carne y chuparlo como un becerro hambriento y solo se desprendía de aquel delicioso manjar cuando le tenía que contestar algo a su mujer.
Satisfecha de su malvado juego, la nena mordiéndose su labio inferior, pasaba ambos pechos por toda la horrible cara del viejo, mientras que aquellas callosas manos que poseían su firme trasero, ya se querían meter dentro de sus bragas, Jessi sentía que ya era hora del plato principal, así que, haciéndole señas a su viejo amante, le dijo que ya era hora de que pusiera dentro de ella esa gruesa y venosa verga
“¡Oh, mierda, esto iba a pasar!” — pensó el viejo conserje, mientras veía como la misma Jessi tiraba hacia un lado sus finas bragas negras de algodón para dirigir dentro suyo esa venosa herramienta, el viejo por su parte saboreo brevemente la vista del fino vello púbico que poseía la muchacha.
La punta de esa gruesa verga ya se encontraba en contacto directo con la húmeda zona de Jessi que se había mojado mucho más luego de todas las cosas pervertidas que hacían mientras la mujer del viejo le hablaba, haciendo que se retorciera de la emoción
Muy lentamente, el jorobado empezó a empujar y observó con incredulidad cómo los labios vaginales de Jessi se abrían alrededor de su verga, como los pétalos de una flor exótica.
– ¡OHHHHHHHHH!, Es demasiado grande, mmmfff no creo que la aguante — dijo la tierna jovencita al oído del viejo, que por un momento se asustó un poco cuando sintió que su coño se ensanchaba más que nunca, para acomodar la circunferencia del viejo, era una sensación nueva y extraña para ella.
El conserje por un momento pensó en preguntarle si estaba bien que continuara empujando, pero recordó que la jovencita le dijo que no debía malograr el momento así que la tomó por las caderas y empujó unos centímetros más en esa increíblemente apretada vagina
– ¡OH DIOS MÍO! ¡AHHHHHHHHHHHHHHHH! ¡OH, MIERDA! — murmuraba Jessica mordiéndole el hombro, Podía sentir cada contorno de esa gruesa verga frotándose contra las paredes de su pequeño y hambriento coño. Fue tan duro y caliente, se sentía como si sus entrañas estuvieran siendo examinadas por una barra caliente, puso todo su peso sobre sus rodillas para evitar deslizarse más hacia abajo hasta que se pueda acostumbrar a la verga del jorobado.
Los segundos pasaron mientras Jessi se ajustaba al ancho de la gruesa verga que la estaba llenando completamente, al menos así era como se sentía, sabía que tenía que aguantar y no hacer ruido
Ver la cara de la jovencita sufriendo por adaptarse a su verga era algo glorioso para el jorobado que sentía como abría el coño más apretado que jamás había experimentado y esta lentamente engullía más y más su pene, por mientras el la llenaba de besos, besos de los más morbosos y sucios que solo una pareja de recién casados se daría.
– ¡AHHHHHHHHHHHHHHHHHH auuuuuuuuuyyyyyyy dueleeee!, paremos acá, deme un respiro, ¡deje de empujar y sáquela maldito pervertido ¡— se quejó Jessi cuando sintió como ese grueso miembro seguía abriéndose paso dentro de ella.
–uffff que estrechita que son las muchachas de ahora, parece que fueras virgen nenita
– ¡SAQUELAAAAA! o… ¡gritare y lo escuchara su mujer!
-shhhh solo déjate llevar mamacita, veras como en un ratito tu hoyito se acostumbrará a las dimensiones de mi verga
bruscamente la cabeza la nena cayó hacia adelante sobre el hombro de Manuel, mientras su mente comenzaba a dar vueltas. Le tomó un tiempo reponerse, mientras gemía en una combinación de dolor y placer contra la camisa del feo sujeto
El feo jorobado no podía creer que esto realmente estaba sucediendo. Un hombre que pronto llegaría a los 60, con pocas cualidades, especialmente en la parte de la apariencia, con un miserable sueldo y un carro que parecía una antigüedad, clavándole su gruesa verga a una chica de 20 años que tranquilamente podría ser modelo en cualquier lugar del planeta, todo lo que quería hacer ahora era follarla con todo lo que tenía.
La agarró por las caderas de nuevo, acariciando su piel suave como la seda, mientras comenzaba a mecerla en su regazo, permitiendo que solo un par de centímetros se deslizaran hacia adelante y hacia atrás en un ardiente y apasionante mete y saca.
–¡Oh, carajo, esto se siente bien!, siento que me estoy cogiendo a una virgen.
-ahhhhh ahhh despacito, hágalo despacito que aun no me acostumbro a su enorme verga señor Manu….AHHHHHHHHHHHH
Las suplicas de la caliente jovencita, hacían que el viejo se pusiera más y más animal y recordando esa fuerte cachetada que le había dado hace unas horas, decidió vengarse, así que de un solo empujón le termino de meter la totalidad de su verga, haciendo que la nena lance un fuerte grito
-NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO AAAAUUUUUCH
–shhh ya entro, te la estas comiendo toda, con esa metida me vas a recordar siempre, ya verás.
-ahhhhhh ufffff usted es un bruto, le dije que lo haga con cuidado maldito pervertido degenerado, juro que lo golpeare después, ufffffff — protesto la nena gimiendo suavemente mientras se recomponía de la tremenda estocada que había recibido.
Luego de unos segundos, el jorobado deslizó sus manos alrededor de ella y agarró ese firme culo magníficamente redondo y suculento. Agarro aquellas firmes nalgas llevándolas hacia él con más firmeza mientras sus instintos animales comenzaban a tomar el control.
-«¡Ah! ¡Huh! ¡ah! No puedo … no puedo creer que … realmente entrara todo. — dijo Jessi ya recuperándose del primer impacto que había recibido.
Con el dolor ya casi desvanecido, la sensual jovencita cerró los ojos y comenzó a entregarse al momento, enfocándose en todas las intensas y nuevas sensaciones que su cuerpo estaba experimentando por primera vez. Comenzó a darse cuenta de por qué sus amigas estaban tan obsesionadas con hablar de sexo todo el tiempo.
El momento que habían experimentado ambos había sido tan único que no se habían dado cuenta que la vieja mujer del jorobado ya había cortado la llamada, seguramente porque este no le contestaba a lo que ella decía o tal vez por que escucho algo raro, no estaban seguros en que momento había cortado pero esperaban que fuera antes de que ambos perdieran el control y se pusieran a gritar del placer que estaban sintiendo, increíblemente las consecuencias poco le interesaban al conserje en ese momento, ahora solo quería sentir todos los rincones de la hermosa musa a la que le había metido la totalidad de su verga.
Don Manuel poco a poco agarraba ritmo y ahora con toda su verga dentro de ella, la estaba levantando y haciéndola rebotar poco a poco, La jovencita respondió con una sucesión de gemidos agudos cada vez que su coño estaba lleno hasta el borde por esa herramienta palpitante, en un momento puso sus manos en el respaldo del asiento del jorobado para estabilizarse mientras una ola de euforia la recorría y sus pechos bamboleaban orgullosamente enfrente de la cara del viejo que abría su boca lo más que podía para intentar atrapar uno y chuparlo con bastante énfasis.
–¡Ah, nenaaaaa ¡asiiii! ¡Monta mi verga! Síiiii muévete asi, eres es una buena chica — decía el horrible jorobado mientras empezaba a nalguearla.
-ufffff Señor Manuel, no pensé que fuera tan dotado ahí abajo, siento como me llena toda, jamás me había sentido asi, usted es todo un mach… ahhhh
Jessi podía sentir el comienzo de un orgasmo en su interior. Puede que nunca antes hubiera logrado uno durante el sexo, pero se las había arreglado para consentirse muchas veces, por lo que conocía los sentimientos de la inminente llegada de uno. Sin embargo, esto era diferente, de alguna manera era más profundo y había un hormigueo constante, casi una sensación palpitante dentro de ella.
Ella se hundió en el regazo del viejo y se mantuvo allí por un tiempo para intentar mantener el control y no perder la cabeza.
Hacía mucho calor dentro del coche bastante estrecho. Todas las ventanas se habían empañado, por lo que el viejo abrió la ventana un poco, para permitir que entrara algo de aire fresco. También se aflojó su camisa abriendo algunos de los botones mostrando su fofa y velluda barriga, ya que había comenzado a sudar como cerdo, hizo todo esto sin dejar de bombear a la sexy jovencita
– ¡ah! ¡ah! ¡ah!, siii siga empujando ¡ah! así…ahhhhhh … ¡¿cómo es que un sucio viejo como usted puede lograr esto?! ¡ah! ¡ah! — decía la jadeante jovencita mientras sentía como esos enormes y arrugados testículos golpeaban su trasero, para llevar su estado al máximo, llevo una de sus manos a la parte alta de su zona intima para tocarse mientras las seguían embistiendo, La combinación de la estimulación del clítoris, combinada con la curva de la gruesa polla del jorobado, estaban enviando a la dulce jovencita a su primer frenesí sexual, perdiéndose por completo en el momento y dejando que los instintos de su cuerpo se apoderaran de ella
-¡Ah, ah, ah, ah, AH! ¡AH! ¡AAAAAH! ¡Oh Dios mío! ¡QUE GRUESA LA TIENE! ¡ME GUSTA! ¡UNGH! ¡UNGH! ¡UNGH! ¡AAAAAH!
Ella se lanzó hacia adelante, presionando su cuerpo con fuerza contra el de él. Su rostro se hundió en su cuello, mientras sus manos arañaban la parte posterior de su cabeza., estaba jadeando pesadamente, mientras sus gemidos se volvieron aún más erráticos.
– ¡AH! ¡AH! ¡AH! ¡AH! ¡AH! ¡RICO! ¡RICOOOOO! ¡SI! ¡SI! ¡SI! ¡SI! ¡SI! ¡SI! ¡SI! ¡siga empujando! ¡SIGAAAA!
Las caderas de Jessi golpeaban contra él fofo cuerpo del hombre en un furioso mete y saca, sus gemidos se hicieron más agudos, el conserje podía sentir que ella estaba comenzando a temblar. Sus manos estaban arañando su espalda como si tuvieran sus propias contracciones, el viejo al notar esto, envolvió sus brazos alrededor de ese cuerpo joven y la abrazó con fuerza.
–vamos nenita córrete, córrete como la zorrita calienta vergas que eres
-¡OOHHHH! ¡OOOOHHHHH! ¡SIIIIIIIIIII¡ ¡SIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII!
Sus ojos se cerraron de golpe cuando una serie de profundos gemidos escaparon de sus labios. Luego, una poderosa oleada de euforia atravesó su cuerpo como un rayo. Sus músculos, incluidos los que rodeaban su coño, se contraían incontrolablemente mientras una serie de olas de placer igualmente intensas la recorrían. Jessica se perdió por completo en el torrente de éxtasis que barrió su mente por completo.
Estos tremendos aullidos fueron demasiado para que el jorobado lo manejara. Estaba más allá del punto sin retorno. Sostuvo a su musa aún más fuerte que cuando ella se sacudió salvajemente contra él y sus bolas finalmente estallaron.
-ohhhh zorrita yo también me corro uffffff , ¿quieres sentir toda mi leche dentro tuyo?
–Siiiiii HAGALOOO, lléneme toda, córrase dentro de mi maldito viejo degenerado, nunca volverá a tener a una mujer como yo asi que disfrute lo más que puedaaa AHHHHHHHHH
– ¡AGGGGGG! ¡UHHHHH! ¡AHIIII VIENEEEE! ¡eres una zorra engreída, TE LLENARE Y TE DEJARE PREÑADA PARA QUE APRENDAS A RESPETARME AHHHHHHH
El viejo enterró su rostro en los suaves pechos de la joven, llenándose la boca con uno de ellos mordiéndola mientras se corría dentro de la mujer mas guapa que había conocido.
Su polla estalló como un cohete, disparando su aun fértil carga, profundamente dentro del pequeño y estrecho agujero de la muchacha llenándola por completo con toda su semilla.
La sensación de ese pegajoso liquido llenando sus entrañas, hizo que su orgasmo durara aún más. Ella continuó cabalgando sobre él todo el tiempo que pudo, sin querer que estas nuevas sensaciones encontradas se desvanecieran.
Luego de la explosión, ambos se mantuvieron quietos intentando tomar algo de aire
–Eso fue… asombroso. — susurró ella sin abrir aun sus ojos
La verga del viejo todavía estaba enterrada profundamente dentro de ella, no quería que esta experiencia terminara nunca. Iba a necesitar algo de tiempo para recuperarse, pero afortunadamente ver ese joven cuerpo desnudo encima de el haría que su verga pronto empezara a reaccionar.
Luego de un rato de solo jadeos para recuperar el aliento, el viejo conserje abrió un poco más la ventana, acción que no le gusto a Jessica
-oiga no la abra tanto, alguien podría ver — habló aun con una voz baja
— tranquila, nadie más aparte de mi te vera ese rico cuerpito tuyo, créeme, no hay nadie más alrededor.
-bueno está bien…entonces… ¿qué fue lo último que me dijo cuando lo estábamos haciendo? ¿Algo como que me iba a embarazar?
–con un cuerpito tan rico como el tuyo, cualquier hombre pensaría en hacerte suya y preñarte apenas tuviera la oportunidad
-jaja que tal palabrita usa usted para referirse a embarazar a otra persona, pero no se emocione mucho señor, esto solo es una ocasión especial, ni loca quisiera embarazarme aun y menos que el papa sea alguien como usted — Jessica era sincera, pero no se daba cuenta que aquellas palabras dolían bastante.
“ya lo veremos putita creída, ya lo veremos” —pensaba dentro suyo el viejo conserje, dándole otra ojeada al monumento de mujer que se había comido
–vaya, solo mírate, has sido realmente bendecida.
El viejo conserje podía sentir como su verga comenzaba a cobrar vida una vez más. Se acerco lentamente hacia la exhausta jovencita y empezó a besar todo su cuerpo, dándole un trato especial a los adoloridos pezones de la nena que ya se encontraban duros de nuevo producto de las fuertes estimulaciones que recibían, poco a poco el viejo siguió bajando hasta el tonificado abdomen de la nena.
Jessica sabía que un segundo round era inevitable por lo que quería experimentarlo con otro tipo de poses, asi que le dijo al viejo conserje para pasarse a los asientos traseros y estar más cómodos, cosa que el viejo acepto gustosamente
–primero las damas preciosas
La jovencita no quería salir por la puerta del copiloto por el tremendo frio que seguramente haría, asi que con dificultad trato de pasarse al asiento trasero desde su asiento, dando una gran vista de su trasero al hambriento viejo que no perdía detalle de ese culito apenas cubierto por esas pequeñas bragas negras, antes de que pasara al otro lugar, el horrible conserje no se resistió y con una sonora nalgada hizo que la nena pasara rápido al asiento trasero
-oooooooiga ¡pervertido!
–uyuyuy mamita tienes un culito tan rico, esta vez también te dejare mi semilla bien adentro de tu chiquito para que me recuerdes jeje
– vaya parece que ya se soltó, hasta hace poco era un viejo tan callado
–tú me pones asi ricura, nadie puede mantener la compostura al lado tuyo y menos si me muestras tu rico culo tan cerca de mí.
Mientras la caliente pareja se acomodaba en el asiento trasero del auto para un segundo e intenso round, no muy lejos de ahí un par de viejos vagabundos ebrios hasta la medula, habían escuchado los últimos dulces y fuertes gemidos de la jovencita claramente, al principio pensaron que solo era otra pareja de maleantes teniendo sexo ya que el auto viejo asi les daba a entender, pero cuando el conserje bajo la ventana para que entrara el aire, vieron un hermoso rostro sudoroso, lo cual llamo la atención de ambos que poco a poco se acercaban a la carcocha para tener una mejor visión de la hermosa jovencita que se preparaba para una segunda ronda que seria inolvidable
continuara…