Mi querida amiga de la infancia

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Francamente no podría deducir mi nivel de confianza en la cocina, así que decidí tomar un curso ya que me acababa de independizar, todo era nuevo para mi, no sabía ni escoger un tómate fresco…

Llego mi tan esperado curso, entre en aquel salón lleno de mujeres de toda clase, una alta mujer se hizo a mi lado, preguntándome que si aún no empezaba la clase a lo que le respondí que no, mire aquella mujer la cuál me traía un aire de recuerdos pero no sabía de dónde, disculpa ser tan mal educada dijo estirando su cara y presentándose con una sonrisa, un gusto soy Kimberly pero puedes llamarme Kim, y tú?

Al ella decir aquel nombre el cuál no escuchaba en ocasiones más por personas fuera de mi entorno, recordé tener una amiga con aquel nombre, yo soy Fernanda el gusto ea mío, tuve una amiga con tú nombre es muy lindo, luego de culminar aquella clase, coincidimos para ir a tomar un café, entre charla y temas le pregunte, Kim tú no vivías en la calle de Buenos Aires con la avenida al sur?, a lo que ella respondía sí con una sonrisa y sus ojos se iluminaron acaso no eres Fershita, mi fershita a lo que sin duda me respondí que sí, ambas nos abrazamos y no podíamos creernos de que éramos aquellas niñas de la infancia que soñaban con ser grandes cantantes, decidimos continuar la charla en mi apartamento, a lo que le dije y pregunté, Kim cono ves soy ahora una mujer felizmente independiente y desde siempre soltera y tú?

Verás Fer el amor no a sido muy bien correspondido para mí, pero también vivo sola como tú, esperando a mi chica ideal – chica kim acaba de decir chica, es lesbiana pensé eso y no podía creerlo

Pasaron las horas y kim se tenía que ir por lo que la invité a pasar la noche, era hora de dormir y yo solo pensaba e imaginaba la manera en la que ella tenía relaciones con otras mujeres realmente sería como en los vídeos xxx entre en un estado de curiosidad y deseo por saberlo nunca me había sentido atraída por otras mujeres, pero el solo pensarlo inocentemente mi entrepierna se fue humedeciendo y fui sintiendo como mi ropa interior cada vez estaba mas empapada, me limité a voltarme dándole la espalda y sentí un frío en mi cuello y su aliento mientras susurraba en mi oído no puedes dormir mi fer, y su mano se deslizaba por mi cintura hasta abrazarme por el abdomen a lo que le respondí nervios por la situación no, no puedo dormir, se lo que quieres Fer pero realmente estás segura de que lo haga, no podía creer y solo respondí un sí volteandome al quedar cara a cara con ella, acercó sus labios a los míos uniéndonos en un tierno beso, el cuál tomaba mas fuerza y dejando entrar aquella lengua húmeda en mi boca a encontrarse con la ansiosa mía, ella deslizaba su manos por mi espalda hasta llegar a mis nalgas y agarrar apretandola sacando un leve quejido de mi ella sonrió con picardía, ella se sento en mi pelvis, deshaciendo mi blusa de pijama dejándome simplemente con un brassier de encaje, tomando mis pechos con lujuria y mirándome a los ojos me dice que me relaje y que no tema, hice todo para estar tranquila, ella me levantó y me abrazo mientras desabrochaba mi brassier, y hundía sus labios en mi cuello, haciéndome soltar un gemido al tener a su vista mis pechos comenzó a masajerlos aquella sensación me hizo estremecer, mi cuerpo sintió una corriente de escalofrío hasta mi entrepierna, tomo uno de mis pechos con su boca, deslizando su lengua por uno de mis pezones, mientras pellizcaba el otro, sentir su lengua en mí, era emocionante, ella comenzó a chupar ambos pechos continuamente como si de un bebé se tratará, lo hacía tan bien que yo solo quería retorceme de placer, quise deslizar mi mano hacía mi ropa interior a lo que ella detuvo y dijo déjalo a mi, déjame complacerte, con besos húmedos comenzó a bajar desde mi cuello hasta mi abdomen allí jugo con su lengua y deslizo el shorts de mi pijama, bajando con besos comenzó besar mi tanga, estos besos me estaban matando, y yo solo apretaba mis pechos, y ella quitandando con calma aquella prenda comenzó a olerla, yo moría ppr ser tocada y rapidez le dije, hazlo ya por favor, ella me miro e hizo que chupara dos de sus dedos, así llevándolos a tocarme, los deslizaba por mis labios, y tocaba tan delicioso mi clítoris en un baile que solo sus dedos entendían haciéndome mojar más de lo que ya estaba yo solo podía soltar gemidos, ella paro y cómodo su cabeza en mis muslos, llendolos de besos hasta llegar a mi ansiosa vagina, deslizó su lengua y solté un gemido uno tras otros, ella lamia fugazmente, chupaba con fuerza mi clítoris y comenzó una pelea entre su lengua y sus dedos yo no podía más, mis ojos se retorcieron en blanco mis piernas temblaban y mi nectar fue residido por su lengua, mi respiración comenzaba a calmarse y yo solo me lancé a besarla, mientras ella deslizaba sus dedos dentro de mi, yo me sentía en el paraíso y quería que ella también resiviera lo mismo, desnudandola, opte por hacer el famoso 69 quedando arriba de ella y sintiendo de nuevo su lengua en mi clítoris, comencé a lamer por primera vez una vagina, me gustaba su sabor, lo hice con más intensidad y escuche por fin aquellos delicios gemidos que ella producía, lamía y chupaba como ella en mi lo hacía, decidí masturbarla y ella solo me pedía que no parara, me baje y me acoste boca arriba lamiendo mejor y comencé a meter mis dedos, deslice uno más asi metiendo tres ella gemia mi nombre gritando que se iba a venir me senté a frotar con fuerza su clítoris y metiendo de nuevo mis dedos con intensidad resivi en mis pechos su orgasmo, un delicioso squirt nos besamos nuevamente y acostadas en un tierno abrazo quedando dormidas, solo sabía algo y era que esto lo quería repetir.

Fin