Esta historia me la cuenta unos amigos Paco y Tere, que nos lo encontramos ayer en un mercadillo con su hija

Esta historia me la cuenta unos amigos Paco y Tere, que nos lo encontramos ayer en un mercadillo con su hija mulata de 10 años,nosotros sabíamos que algo había pasado entre ellos hacia ya tiempo porque solo le conocíamos a su hijo Paco que un par de años mayor que nuestro hijo mayor.
Esta es la historia.

Hola me llamo Paco, os voy a contar lo que me ocurrió en un viaje que hice a Cuba, en concreto a Varadero, con mi mujer, hace ya unos años.

Teresa que así se llama mi mujer es una hembra normal pero tiene unas tetas que a mí en particular me excitan nada más verlas.

Que yo sepa me ha sido infiel una sola vez, pero eso sí muy bien aprovechada.

Era el segundo día de vacaciones en Varadero, Tere hizo amistad con uno de los camareros de la barra de la piscina, siempre le pedía las copas, y se reía mucho con las cosas que él le contaba. Yo estaba un poco mosqueado y así se lo decía a ella, pero siempre me contestaba que no pasaba nada que era un pobre chico, que no me preocupara.

Al cabo de unos días la amistad de mi mujer con el camarero iba en aumento, yo decidí hacer como si no pasara nada, pero me propuse vigilar sin que ella se diera cuenta.

Durante los próximos días la estuve observando, pero ella no hacía otra cosa que hablar y reírse, de hay no pasaba la cosa, aunque ahora no solo estaba el camarero, si no que le acompañaban otros dos compañeros más.

Un día, por la tarde , me desperté muy temprano, serían las cuatro de la madrugada, mi sorpresa fue cuando descubrí que mi mujer no estaba en la cama, me levanté, me puse un pantalón, y salí a la puerta de la cabaña, al fondo del jardín me pareció ver la figura de mi mujer, sin pensarlo salí detrás de ella pero con cuidado de no hacer ruido.

Tere, se metió en una cabaña cerca de la playa, yo me quedé mirando detrás de una palmera, a los cinco minutos aparecieron el camarero y sus dos amigos, los tres se metieron en la misma cabaña que mi mujer.

No sabia que hacer, mi mujer estaba con tres hombres en una cabaña a las cuatro de la mañana, y en teoría sin que yo lo supiera.

Decidí ver qué es lo que estaba sucediendo en el interior, me acerqué muy sigilosamente, una de las ventas de la parte de atrás, estaba abierta, desde esa posición podía ver todo lo que sucedía dentro.

Ella estaba de pie junto a su amigo el camarero los otros estaban sentados, después de un tiempo el camarero empezó a sobar a mi mujer y a besarla en la boca, ella le tocaba el culo y la espalda desnuda, poco a poco Tere se fue agachando hasta ponerse de rodillas delante del mulato, empezó a sobarle la polla por encima de los pantalones, le bajó la cremallera le metió la mano y le saco la polla, era la más grande que yo había visto, mediría 25 cm., mi mujer se la metió en la boca y empezó a chupársela como una loca mientras se la meneaba con buen ritmo.
Los dos amigos se masturbaban viendo como mi mujer se comía la polla de su amigo, sus pollas tampoco era pequeñas.
Tere hizo que el mulato se sentara junto a sus amigos, se puso delante de ellos y muy despacio se fue desnudando, se quitó la parte de arriba del bañador, y sin dejar de mirarlos se apretó las tetas, eso hizo que mi polla empezara a ponerse dura, después de un rato de juegos, se puso de rodillas y uno a uno les fue chupando la polla, cuando llego al mulato se puso de pie se dio la vuelta y abriendo mucho las piernas, el mulato cogió su polla con la mano y la puso en la entrada del chocho de mi mujer, que en ese momento ya estaba totalmente humedecido.

Ella se fue sentando muy despacio, hasta que se metió la polla entera, movía el culo en círculos y con las manos le masajeaba los huevos sin hacerle daño, poco a poco fue aumentando el ritmo de sus metidas, el mulato gritaba de placer mientras sus amigos seguían meneándosela, uno de ellos se levantó cogió la cabeza de mi mujer y la empuja hacia su polla que estaba a punto de estallar, ella se la comió entera, el mulato se levantó con la polla metida dentro de ella, la escena la verdad es que era de lo más cachonda, mi mujer a cuatro patas chupandosela a uno, el mulato bombeando por detrás sin parar, y el otro hombre meneándosela como un poseso. En esos momentos me percate que tenia mi polla en la mano y me estaba masturbando.

El mulato no aguanto más, le hundió la polla en el chocho de mi mujer, y un chorro de leche caliente le llegó hasta la entrañas,no entendía cómo mi mujer no se protegía desde que tuvo a mi hijo porque quiso tener otro lo que pasa es que no vino conmigo no hizo que se pusiera un condón porque podía quedar preñada aunque yo no pude despues ella tenía sus reglas normales y al ver la cantidad de leche que le salía por su coño, me imagine que sucedería lo que sucedió. El que estaba meneándosela se fue con rapidez hacia ella y sin dudarlo le metió la polla en el culo, después de bombearla cuatro o cinco veces soltó un suspiro de placer y se corrió dentro de ella, nunca lo había oído pero Tere dejo de chupar y grito como una loca mientras se apretaba las tetas, siempre lo hacía cuando se corría, y ahora se estaba corriendo como nunca, agarro la polla con su mano y empezó a meneársela al único que todavía no se había corrido, no tardó mucho, otro chorro de leche la estalló en la cara, pero mi mujer no se inmuto, al revés cuando termino de correrse se la metió en la boca y con la lengua se la limpió no dejando ni una sola gota de leche en su polla.

Mientras miraba a mi mujer follando con otros no deje de meneármela, de pronto sentí un calor en mi capullo y a continuación una gran cantidad de leche salió de mi polla empapando la pared de la choza, nunca había tenido una corrida tan grande, fue impresionante.
Después siguieron,hablando los mulatos y mi mujer descansando.
Ellos seguían acariciando sus pollas mientras bebían, ella se puso de pie y yo veía cómo le salía del coño y culo la leche, al que se la había chupado ya estaba empalmado otra vez y se puso detrás,y a follarsela otra vez, mi mujer decía ” venga mi mulatos que vamos a estar follando hasta que amanezca todos a vaciarse en mi coño a ver si conseguir lo que el cornudo lleva años queriendo dejarme preñada ahí que gusto me muero vega correte tú ya tambien y asi lo hizo el que la estaba follandole pego un empujón y empezó a soltar leche también llenandole hasta la matriz

No se el tiempo que transcurrirá desde que mi mujer entró en la cabaña, lo cierto es que se la follarón en todas la posturas incluso en una que la tenían insertada uno por el coño y otro por el culo, el que se la estaba follando por el coño se corrió antes y se la saco, aprovechando el del culo a metersela por el coño y correrse él también dentro del coño, tenía ya tanta cantidad de leche que parecía una vaca, estaba seguro que si de esta no estaba preñada sería un milagro
El sol ya empezaba a mostrar sus primeros rayos, antes de que nadie me viera me fui sin hacer ruido, a mi habitación me metí en la cama y espere. Al poco tiempo llegó ella, se metió en la ducha para quitarse toda la leche que traía dentro y luego se metió en la cama y se durmió.

Nunca se lo he contado, prefiero recordarlo como una fantasía, pero no me importaría volver a repetirla, el resultado fué Lorena la cual acepte como mi hija dándole mi apellidos, no hubo mosqueo por el color tostadito de su piel, porque la familia de ella son muy morenos agitanados, ni Tere sabe que vi todo lo que ocurrio en aquella cabaña de Cuba.