Teniendo sexo con mi papá y con mi padrastro
El verano pasado fuimos a nuestra casa en Cuernavaca a pasar unos días de relajación. Para esa ocasión mi cuñada, la hermana mayor de mi esposa, nos acompañó porque tenía vacaciones esos días. Ella tiene un cuerpo muy deseable para cualquiera, le hace falta algo de culo pero lo compensa con un par de tetas tamaño D naturales, redondas e. increíblemente deliciosas, se parece a mi bellísima esposa solo que con unos años más.
Durante el trayecto platicamos muy a gusto de temas diversos. Cuando llegamos pase a comprar comida y cervezas para poder encerrarnos en la casa y no preocuparnos por salir.
Todo listo nos dirigimos directo a la alberca, mi esposa cara angelical ojos claros, cadera y culo de estrella porno, una cintura de avispa, con unas unas tetas B deliciosas y pezones redondos, enfundada en un traje de baño coqueto y conservador como le gusta usar. Mi cuñada de igual manera un traje de una pieza nada espectacular salvo que sus tetas enormes se desbordaban de este.
Siempre fantaseabamos con mi cuñada y llegábamos a imaginar sobre que haría yo con 5 minutos con esas cosas, pero solo era una fantasía lejana y nunca hubo algún tipo de intensión de cumplirla.
Pronto nos metimos los tres a la alberca y para mi sorpresa nuestra charla subió de tono tan rápido. Mi cuñada es divorciada y hacia bromas acerca de que tiene tanto tiempo sin coger que prácticamente es virgen nuevamente. Nos contó historias muy calientes de sus aventuras sexual, desde la vez que fue a un cine XXX a follar cual puta o de esa vez que mamo a un tipo tan rico y este se vino tanto que la batió por completo. Mi esposa y yo nos tocábamos «discretamente» mientras ella nos relataba todo. Yo estaba a mil y tocaba a mi esposa frente a mi cuñada pero ellas dijeron que era hora de comer y así de crueles cortaron el ambiente.
Despues de comer empezamos juegos de mesa mientras bebíamos cervezas, yo estaba triste y algo preocupado porque tal vez había excedido los limites, hasta que mi cuñada dijo «van a perder, yo jamás me emborracho, muchos lo han intentado y nada» por lo que mi esposa dijo hora de jugar strippoker, la regla extra es, si no quieres perder una prenda debes cambiarlo por un shot bomba que mi esposa prepara. Fue una dura batalla todos perdíamos por igual y estábamos muy borrachos y semidesnudos. Mi esposa fue la ultima en perder y dijo «ya no puedo con otro y no quiero desnudarme toda, déjame mamar a mi esposo a cambio hermana». Mi cuñada acepto y mi esposita me dio una increíble mamada frente a ella. Nos observó un rato pero después salio de la casa porque tenía que meterse a la alberca, mi mujer me dijo «vamos no se vaya a ahogar, ya esta muy peda» y salimos tras ella.
Se había metido a la alberca con lo último que le quedaba de ropa por lo que mi esposa me dijo que la ayudará a quitarse todo, inmediatamente me lance al agua con mi verga erecta por que sabía que venía.
Le quite el sostén a mi cuñadita y cuando fueron liberadas esas tetas todo se volvió en cámara lenta, baje sus tanga y la sorpresa que me preparo mi querida cuñada fue una depilación completa, yo con una cara de niño mire a mi mujer para pedir permiso y ella asintió con la cabeza mientras se tocaba.
Sin perder tiempo bese esas tetas que llevaba tanto tiempo deseando, un sueño de verdad. Frote mi verga como piedra contra su sexo y ella gemía de placer, pero se alejo de mi y le dijo a mi esposa «hermana, mira lo que me están haciendo» mi mujer le respondió que me ofrecía como regalo porque ella necesitaba de una verga. Con su permiso, mi cuñada se clavo en mi mientras nos abrazábamos y besábamos en el agua, ella se movía como una perra, me mordía mientras me decía al oído que mi verga estaba deliciosa.
Mi esposa se masturbaba frenéticamente pero notaba que su hermana se apenaba cuando estaba viéndola, así que fingía irse unos minutos y regresaba sin que lo notáramos para dar rienda suelta a la puta que tengo por cuñada. Gracias a esto mi cuñada completamente ebria me decía «Comete mis tetas, yo se que te mueres por ellas, mamí duro cabrón, más, más!!!. Necesito una verga venosa, por favor dame ya!!!» Mientras me paraba su culo para que la penetrara.
Cuando por fin le metí todo mi miembro estaba tan apretada que grito de placer y dolor por la embestida que le di. Movía sus caderas para clavarse lo más que podía mientras gemía que amaba mi verga. Por su parte mi esposa escondida nos veía coger mientras se masturbaba, yo cargue a mi cuñada en la orilla de la alberca y la empecé a penetrar tan fuerte que desgarraba su vagina húmeda y apretada, ella gritaba e placer hasta que mi esposa no pudo más y corrió a la alberca mientras se desnudaba, de un salto se metió y volteo a mi cuñada para mamar sus tetas con una desesperación que nunca antes vi. Mi cuñada solo gemía en voz baja «bizarros» mientras me masturbaba con su mano.
Mi mujer se convirtió en una perra sedienta de sexo que me dio una mamada submarina sublime, lamia todo mi pene mientras jugaba con mis testículos para después salir a tomar aire. Mi cuñada se salio de la alberca para acostarse boca abajo en la orilla, al ver esto me decidí a romperle el culo mientras pedía permiso a mi esposa. La sostuve fuertemente de la cadera y después de lamer su ano le metí mi verga sin piedad y ella gritaba de dolor pero aun así pedía mas, mi esposa me abrazo por la espalda mientras me empujaba para meterle toda mi verga. Mi adorable cuñada estaba siendo cogida y mi esposa me incitaba a darle más fuerte mientras la masturbaba con una mano mientras la otra estrujaba esas enormes tetas, una tarea de odisea.
Mi cuñada llego a un orgasmo con un grito que estoy seguro que despertó a medio vecindario, se retorcia mientras jalaba sus pezones y suplicaba su premio, pedia que la bañara con mi leche mientras su hermanita veía, obedecimos inmediatamente. Me dio una mamada espectacular, lamia todo mi pene con una gran pasión recorriendo cada vena, cada detalle, como una experta en el arte, cuando se dio cuenta que yo no podía más me masturbo más fuerte para que me corriera en sus tetas. Tal era mi excitación que me vine tan abundante que literalmente bañe a esa puta tetona, los chorros le caían en mi cuñada que los recibía y tomaba lo que podía, lo demás lo frotaba en sus gigantescos senos y mientras pellizcaba sus pezones.
Cuando termine las piernas me temblaban y ella con una cara de satisfacción se quedó recostada y completamente rendida en un camastro.
Pero aun mi labor no terminaba, mi esposa me tomo de la verga aun erecta y me dirigió al carro que estaba unos metros adelante, tomo mi hinchado pene como si estuviera compitiendo con su hermana y me dio una mamada digna de los Dioses mientras ella se masturbaba hasta que se vino en mi pie. Levante bruscamente a la puta y la castigue con unas nalgadas en ese culo delicioso, ella gemía de placer y sentía como empezaban a escurrir los jugos de su vagina. Pronto la penetre con furia mientras metía mis dedos en su boca para jalarla hacia mi. Los sonidos de mi esposa gimiendo, de su vagina a reventar mientras golpeaba sus redondas nalgas componían una escena insuperable, ya no pude mas y expote lo ultimo que tenia dentro de mi esposa, mi esposa se masturbo unos segundos y realizo una squirt para bañarme mientras gritaba de placer y perdía toda su fuerza en sus piernas.
Como pudimos nos fuimos los tres a las habitaciones mientras nos tambaleábamos, al recostar a mi cuñada una vez mas mame sus tetas y mi esposa se unió al festín, nuestra excitación creció tanto que mi esposa y yo nos dimos otra cogida espectacular para despuús caer rendidos en la cama.