La historia de cómo me convertí en la putita de mi primo

Valorar

antes de empezr si quieres ver mi video en mi perfil sabras como.

soy una chica sencilla. En misaños de vida tuve 5 novios, hasta que un día sin querer terminé saliendo con mi primo. Como sucedió eso? Lo recuerdo perfectamente ya que ese momento fue justo cuando comenzó a cambiar mi vida en todos sentidos, tanto social como sexualmente. Ahora les cuento como pasó todo.

Era un día sábado, el cumpleaños de una amiga mía, yo estaba lista esperando a que pasen a buscarme, ansiosa miraba mi celular a cada rato, en una de esas vistas fugaces que hacía vi que justo me llegaba un whatsapp de una ex compañera. Lo abrí y leí que decía “amiga, hoy te presento a un pibe hermoso, divino, re lindo. nos vemos en el cumpleaños”. Ni siquiera tuve tiempo a reaccionar al mensaje porque en ese momento se escuchó el ruido de un auto afuera y casi al mismo instante un bocinazo. Salí corriendo luego de despedirme de mis padres.

Ya en la fiesta lo primero que hice fue buscar a mi ex compañera para que me presente a su “amigo”, ansiaba conocerlo, no porque necesitaba un novio urgente sino más por la curiosidad de ver si era cierto de que estaba tan bueno como mi amiga lo describió.

Cuando al fin encontré a mi ex compañera ella me agarró de la mano y me llevó al baño. Apenas entramos comenzó a hablarme:

_Escuchame, no sabés el pibe que conocí, ayer me habló y me dijo que le gustas un montón, que está enamorado desde hace unos años.

Obviamente me quedé más confundida que antes, tenía miles de preguntas para hacer, le hice algunas de las que tenía en mente. Mi ex compañera me respondió algunas como por ejemplo de como lo conoció, como era, de donde era, su edad, etc.

Lo único que se me quedó fue que tenía 19 años y que esta “re bueno” según mi ex compañera. Y confiaba en ella, porque eramos muy buenas amigas y porque teníamos los mismos gustos por los chicos. Aparte como me lo describió me gustó bastante, mis ansias por conocerlo aumentaron.

Mi ex compañera volvió a hablarme:

_Le dije que ibas a estar aquí en el baño, quedate aquí y yo lo llamo para que venga.

No pude ni siquiera responder o pensar bien porque ya mi amiga estaba afuera, solo escuché unos cuantos ruidos en el baño de hombres que estaba al lado. Me apoyé en la pared para intentar escuchar algo más pero de repente se abrió la puerta del baño. Me di la vuelta de prisa y ahí lo vi parado frente a mi a mi primo.

_Que hacés aquí? – comencé diciendo- te confundiste de baño (o al menos eso quería creer)

_No me confundí – fue lo que él dijo con evidencia de nerviosismo

Me quedé callada e inmóvil por unos segundos, intentando procesar mis pensamientos.

_No, no no, sos vos el chico lindo del que me habló mi amiga?

_Si

No supe que decir, mi primo estaba callado también, fueron segundos de silencio que parecieron años. Por suerte mi primo fue quien rompió el silencio

_Escuchame, lo siento mucho, siempre quise decírtelo pero no me animé nunca. Sos muy linda.

Le expliqué que no podíamos ser nada, solo primos como lo eramos.

A medida que pasaban los minutos era como si mi mente me dijera que le de una oportunidad, después de todo mi primo era lindo. Mis dudas era inmensas hasta que él me tomó de las manos y se acercó un poco, ahí en ese momento fue como un click porque de inmediato sentí el deseo. Y como si fuera poco de solo pensar en que era mi primo ahora ya no me parecía algo prohibido sino todo lo contrario, cada vez que por mi mente pasaba esa palabra mi deseo aumentaba. No dije nada, solo me dejé llevar. Que mi primo hiciera lo que sea.

Sentí su mano por debajo de mi boca, me agarro con mucha delicadeza del mentón y me dio un beso, fue corto. Luego otro más largo y con más deseo, yo seguía quieta inmóvil. Cuando reaccioné me dio vergüenza y salí corriendo del baño.

Afuera estaba mi amiga con un chico que le sobaba las tetas de manera descarada mientras la besaba. Continue caminando aturdida, de repente una mano sobre mi hombro hizo que me detuviera. Me di vuelta, era mi primo.

_lo siento–fue lo único que dije

_Está bien, vamos afuera, necesitamos hablar – dijo él

Ya fuera de la casa nos sentamos en las escaleras alejados de la puerta principal. Mi primo comenzó a hablar. Ni siquiera presté atención a lo que decía solo estaba confundida, y ese momento me decidí a que tenía que vivir y disfrutar la vida, como alguna vez mis padres me lo habían dicho. Levanté la cabeza, lo miré a mi primo a los ojos y lo callé de un beso. No lo solté por un buen tiempo. Recordé como aquel pibe le sobaba las tetas a mi amiga y no se porque pero le agarré una mano a mi primo y la llevé directamente a mis tetas, primero le ayudé a sobar una y luego lo solté en la otra para que él continuara. Fue esa noche que algo cambió en mi, yo no era ese tipo de mina que se descontrolaba a la hora del sexo o en un momento Hot, pero en ese instante estaba re caliente.

Sentia como mi primo me manoseaba los pechos y me gustaba. Lo dejé de besar, lo miré a los ojos y de inmediato ambos supimos lo que queríamos. Lo tomé de la mano y juntos nos fuimos de nuevo al baño en donde nos besamos por primera vez esa noche, mi amiga continuaba a los beso al costado de la puerta pero con otro chico diferente.

Nos metimos al baño y continuamos con los besos, ya no hizo falta ayudarlo a que me toque las tetas, pero no solo eso me tocó sino que también me acarició un par de veces la entrepierna. Eso me encendió al máximo como nunca antes con mis otros novios. Me quité la remera y el sostén en cuestión de segundos, él hizo lo mismo, me ayudó a desabrocharme el pantalón y cuando levantó la cabeza se quedó paralizado.

_Que sucede? – le pregunté

_Sos hermosa – me dijo – me acarició los pechos, intentó acercar su rostro y retrocedió.

Me acomodé el pelo hacia atrás y le invité a que hiciera lo que él deseaba hacer, después de todo yo también lo deseaba, quería que me chupe todas las tetas. Abrió su boca y comenzó despacio a darme unos besos por encima de los peones, luego me lamio desde la base de mis pechos hasta mis pedo es, allí se detenia y me lamia con más ganas, luego me los chupaba y al final me los mordía con mucha delicadeza, cosa que me provocaba mucha excitacion. Vi que en sus manos tenía un paquete de condones, abrió uno y se bajó los pantalones.

_No – le dije – así nomas

Volvió a guardarlos en su pantalón mientras yo me quitaba el mio, estabamos desnudos.

Me di vuelta, apoye mis manos en la pared y al instante el supo lo que tenía que hacer. Al princio su pija (de tamaño normal digamos) rozaba mi culo y mi vagina, luego de a poco comenzó a penetrar centímetro a centímetro, lentamente hasta que sentí su cuerpo pegado junto al mío, yo intentaba no gemir pero la excitacion y el placer eran tan grandes que era imposible, incluso mi primo gemia más fuerte que yo. Eso me calentó, se notaba que a él le excitaba muchísimo estar conmigo y a mi me excitaba el hecho de que yo le provocaba tanta excitacion.

Me penetraba lentamente, fueron como 5 minutos de eso y luego aceleró al igual que sus gémidos subían de tono, fueron otros cinco minutos hasta que sentí como algo tibio caía sobre mi espalda cerca de mis hombros y en mis caderas, luego las manos de mis primos acariciando me esos lugares.

Me agarró de las tetas y me ayudó a ponerme de pie hasta me abrazó por la espalda, me besó. Me di vuelta y vi que su pija estaba mojada, con algo de semen. Te viniste? Le pregunté

_no pude aguantar – dijo él

Nos miramos, en sus ojos vi que aún deseaba más de mi, y creo que él se dio cuenta de que yo también deseaba más de él. Se sentó sobre el inodoro y yo me senté frente a él, su pija estaba re dura, me penetro con la misma delicadeza del comienzo hasta que tomamos ritmo y me movía con ayuda de sus manos apoyadas en mi cadera.

Mi primo se acercó a mi, me dio un beso y se dirigió a mis tetas, me las lamia, en un momento justo cuando estuve por tener un orgasmo él dejó de lamerme las tetas, agarré sus manos de inmediato y las apoyé sobre mis tetas. _chupalas – le dije

El no lo dudo, me devoraba las tetas y se saboreaba con mis pezones. Me vine, fue un orgasmo hermoso, mi primo continuaba cogiendome sin parar, pero solo fueron unos cuantos segundos después de mi orgasmo que él sacó su pija y me acabó en el ombligo prácticamente, un solo chorro saltó hasta mi pecho,cerca de un pezón.

Lo abracé, nos quedamos unos minutos así, agitados, cansados físicamente pero no cansados de sexo. Luego sin hablarnos nos cambiamos, vi su pija por última vez antes de que se perdiera por debajo de su bóxer, la notaba algo dura aún. La deseaba en mi boca y que se sentiría, jamás había chupado una pija, tal vez la de mi primo sería la primera pensé…

Me acomodé un poco el cabello mientras aún pensaba en la pija de mi primo, abrí la puerta, asomé la cabeza un poco, no había nadie cerca. Miré hacia atrás, mi primo se abrochaba la camisa, en eso agarré su celular que se había caído al suelo y le agendé mi número. _Llamame – le dije

_Nos volveremos a ver? – preguntó él mientras su ojos miraban mis pechos.

_Sólo fue algo rápido y casual lo de hoy… – le dije, sus gestos fueron de resignación -… Pero aún hay mucho por conocernos.

Me fui directamente a mi casa, con el vivo recuerdo de su pija metiéndose debajo de su bóxer. Tenía unas ganas todavía de chuparle la pija pero sabía que ya era demasiado por esa noche. Me acosté y me quedé dormida.

Esa noche soñé algo que unos días después se haría realidad.

Si les gustó por favor les pido que me lo hagan saber así publico lo que pasó unos días después y muchas cosas más que viví tanto yo como mis amigas…

Deja una respuesta 0

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *