Disimuladamente me asomo por encima de la alambrada y veo a dos chicas en bikini tomando el Sol

El lunes pasado estaba en mi jardín tomando una cerveza mientras que me preparaba unas hamburguesas de carne de retinto cuando escucho ruido en el jardín de al lado.

Disimuladamente me asomo por encima de la alambrada y veo a dos chicas en bikini tomando el Sol, las dos chicas estaban buenísimas al cual mas buena. Ella me descubrieron mirando y se sobresaltaron.

– Hola, buenas tardes, vecinas . – les dije para salir del paso.

– Hola.- respondieron ellas algo sobresaltadas aún.

A esas chicas no las conocía eran las nuevas inquilinas del chalet junto al mío,

– Que paseis buena mañana,. les dije antes de desaparecer detrás de mi muro.

– Gracias .- dijeron las dos al unísono.

Continúe preparando mi barbacoa, era mi día libre y estaba preparandome para ver el partido de España contra República Checa, mi cerveza fresca, mi hamburguesa y mi futbol, cuando escucho una voz en la valla.

– Hola vecino.

– Hola?

Me levanté de mi silla y ví a las dos chicas mirando por encima del muro.

– Hola vecinas, ¿qué ocurre?.- le dije enfrente  de ellas.

– Estamos aquí oliendo tu barbacoa y se nos está haciendo la boca agua.

– Además hemos visto tu piscina y con el calor que hace, y solo tenemos la manguera para refrescarnos.

– Ja ja ja ja ja, ¿ estáis vosotras solas?

– Si nos hemos venido las dos a la aventura.

– Pues anda dar la vuelta y veniros  que hay carne de sobra y piscina.- les dije.

Pensé que iban a entrar en la casa y iban a entrar por la puerta pero no, una de las chicas ayudó a la otra a saltarse el muro y luego la una ayudó a la otra.

– Yo soy Porco.

– Yo me llamo Silvia.

– Y yo Mar

Nos dimos los besos protocolarios y les saqué dos cervezas y una para mí.

– Poneros cómodas mientras que termino de hacer las hamburguesas.

Las dos chicas se tumbaron en las hamacas de mi patio quitándose los pareos que llevaban cosa que me permitió verlas mejor.. Silvia era morena delgadita con el pelo muy largo, su estatura medía un 1,60 tenía un culo muy delgado, Mar sin embargo era rubia algo más rellenita que hacía que sus pechos fueran más grandes que los de su amiga. su estatua era algo más alta que la de su amiga.

Llevabamos varias cervezas cuando las dos amigas  se pusieron tiernas. primero empezaron a untar crema la una a la otra, yo hacía como el que no miraba pero los ojos se me escapaban, ellas me miraban de reojo y se reían. Al momento las dos golfas comenzaron a  darse unos buenos morreos y seguían tocándose. Yo no me lo pensé más y con mi polla medio morcillona me acerqué a ellas

– Ya está lista la salchicha,

Ellas se rieron y posaron su manos sobre mi polla haciendo que creciera más bajo mis calzonas

– Además es de las gordas.- Dijo Mar.

Las  dos cachondas se arrodillaron frente a mí  y comenzaron  a comerme mi  pollón a dos bocas, me estaban haciendo un fantástica mamada a dos bocas mientras una se metía la polla en la boca la otra me chupaba los huevos, yo tiré de la parte de arriba de sus bikinis desanudando y ellas terminaban la faena quitandoselos.

me estaba poniendo muy cachondo y aunque mis vecinas estaban comiéndome la polla mis otros vecinos podían vernos así que las tomé de la mano y las llevé dentro de la casa.

Luego  dentro de la  casa la más zorra de ellas, Silvia me tumbó sobre la cama y  se montó encima mía sintiendo como mi polla le  taladra el coño al mismo tiempo Mar se sentaba en una silla y se trabaja el clítoris, tras varias entadas en el coño de Silvia, tiré sobre la cama y comencé a follarmela de forma más bruta

No tengo que decir que se pasarón mas tiempo en mi casa que en la suya, follando como locos.