Mi jefe me dio leche por todos lados y me rompió el culo

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Hola mi nombre es Ariadna soy una mujer de 35 años delgada, pechos pequeños y cadera pequeña, todo empezó cuando conocí a Mario un chico de Veracruz….

Cuanto comencé a trabajar en la compañía me asignaron a su departamento, ingresé y nos presentaron el seria mi jefe directo, al principio la verdad no me llamaba la atención, pero una tarde fuimos los últimos en salir pues el trabajo rebasaba la hora de salir y teníamos que entregar los reportes bimestrales.

Eran ya las 10 de la noche y me pregunto si tenía hambre que pediríamos algo de cenar para que no lo llevaran, cunado llego la cena nos fuimos a la salita que estaba en su oficina entablamos una conversación amena y entre risas y ya llevándonos mejor, al terminar el trabajo me dijo que si me llevaba a casa, en el camino me dijo que si quería una cerveza y compramos un six, empezamos a tomárnoslo en las camioneta y la platica se volvió mas intensa me pregunto que si tenia novio conteste que no y chala chala, cuando terminamos la cerveza me llevo a casa, desde ese dia empezó a surgir una atracción entre nosotros.

Un cierto día me invito a cenar, cenamos muy a gusto cuando salimos de restaurante llegando a la camioneta me beso frenéticamente con ese beso la verdad es que me prendio en automatico mi vagina empezó a lubricar y con un cosquille inmenso, la verdad es que el estacionamiento estaba casi vacio y en lugar donde estábamos nosotros no había nadie mas asi que empezamos a dar besos mas intenso y comenzar con un faje tremendo, me apretaba a el mientras me besaba y yo sentía como su verga iba creciendo mas pues podía sentir lo dura que se estaba poniendo y eso me calentaba de sobremanera, mi vagina estaba chorreando subio mi falda poco a poco y empezó acariciar mi puchita sobre mi tanga que para ese momento esta mojada el cuatro de tela cuando sintió lo mojado iniciamos una conversación algo picante

M-veo que quieres lo mismo que yo

– Ah si y que es lo que quiero

– Que te meta la verga, hasta que te llene esta cosita de mi leche (mientras me decía eso metio de chingadazo su dedo en mi puchita y solte un gemido riquisimo)

– Pues yo creo que ya sentiste como me tienes cabroncito

– Quiero metertela ya, en este estacionamiento

Me quede pasmada jamas lo había hecho en un lugar publico pero la verdad es que estaba como perra en celo deseando que me cogiera.

Abrió la puerta de la camioneta del lado del copiloto me voltio para darme la espalda y me subió la falda hasta la cintura me estaba besando el cuello y me punteaba la verga en las nalgas no saben los hombres que tan excitante es que hagan eso nos vuelve locas sentir como nos puntean las nalgas con la verga, mientras hacia eso me acariciaba el clítoris y yo volteaba para ver si no venia nadie pero ciertamente al grado que estaba ya me valia cuando senti me empujo un poco para delante y me la dejo ir toda hasta dentro su verga resbalo como cuchillo en mantequilla.

Lo que vino después no lo podía imaginar me empezó a decir groserías mientras me cogia algo que nunca nadie me había hecho y yo me ponía mas perra:

-estas bien mojadita putita, se ve que te encanta tragar verga

-si me gusta y como me la estas metiendo esta riquísima

-asi quiero darte toda la noche asi que prepárate por que llegaras mañana a la oficina toda llena de mi leche

-si dame me encanta como me estas cogiendo

Empezó a gemir tan rico mientras me la clavaba toda hasta el fondo, estaba llegando a un orgasmo riquisimo

-ay te estas viniendo putita me estas apretando la verga bien rico pendeja

-si siento tu verga riquisimo quiero toda tu leche, dame tu leche cabron

-aquí la tienes putita toda mi lechita- (solto un chorro encabronado de leche)

Jadeaba de placer con sus últimos chisguetes de leche….

Me acomode la tanga, me baje la falda el se acomodo el pantalón y nos fuimos, de camino a su departamento pasamos al Oxxo por alcohol, llegando ahí tomamos y empezamos a cachondearnos.

Estabamos en pleno faje y al sentir su verga, tome la iniciativa y la saque del pantalón para jalársela, poco a poco se me empezó a endurecer, bajaba todo su pellejito y cuando subia apenas y le rozaba el frenillo se noto que eso le gustaba por que le empezó a babear, cuando senti su babita mojar mis dedos me moria por probarla asi que sin mas me baje a darle una rica mamada, el se recostó en el sillon y me dispuse a empunarme frente a el para mamársela delicioso, el no dejaba decirme cosas:

– Mamas bien rico la verga pinche putita te gusta mamar vergas

– Si me encanta mamar vergas y dejarlas sin lechita

Asi estuvimos un buen tiempo nos pasamos a la cama y mientras mas le mamaba la reata mas perro se ponía, no aguanto mas y me desnudo como loco, me acosto boca arrib, alzo mis piernas y me la dejo ir de una, yo gritaba como loca del placer que sentía y escucharlo gemir mas loca me ponía.

Cambiamos de posiciones a diestra y sinietra cuando me puso de perrito sobo mi culo y me dijo este también se me antoja cuando dijo eso sentí un hormigueo en todo mi cuerpo jamás me imagine que alguien pudiera cogerme el culo.

Me tumbo boca abajo y me metio la verga duro yo gritaba gemia de placer le gritaba que me diera duro que no parara, y el bufaba de placer yo estaba que temblaba de caliente cuando senti que en unmete y saca, al volver a meter me la metio por el culo de un chingadazo, grite de dolor y el me presiono contra la cama y me metio la mano por abajo para sobarme el clítoris, por Dios yo quería safarme de dolor pero cada que me movia mas la clavaba y sentía como se le ponía mas dura, era un fierro metido en mi culo y esciche su voz

– Tienes tu culito bien apretadito no te resistas disfruta putita, siente como mi verga esta dentro de ti, me la estas apretando bien pinche rico perrita (mientras gemia)

Al escuchar eso me excite y el dolor fue sediendo, mi hoyo se estaba acostumbrando a su verga y el lo sentía pues mis sonidos de dolor empezar a cambiar a gemidos de placer

-te gusta putita, te gusta mi verga en tu culo

-si me esta gustando cabron, métela métela

-te lo estoy reventando bien chingon pendeja

-si cabron métela métela

-quieres tu lechita putita

-si. Por favor.

-pideme la leche pendeja, pideme que te de tu leche.

-dame tu leche, por favor lléname de leche quiero tu lechita ahhhhahhhhahhha

Emepezo a darme mas fuerte casi sacaba su verga de mi culo y me volvía a empalar, su verga esta durísima, gemia como endemoniado y eso me excitaba y esta por llegar a un orgasmo anal, mi culo virgen esta siendo reventado y de la manera mas excitante posible.

-dame duro cabron dame leche, lléname el culo de leche

-aquí esta tu leche pinche putita de mierda

Sentí como su leche me llenaba todas mis entrañas, terminamos los en un orgasmo fabuloso, esa noche me cogio por todos lados, y me lleno toda de leche toda la noche me estuvo cogiendo, por la vagina, el ano y la boca, me trage su leche en dos ocasiones mas justo antes de irnos a trabajar.

En otra historia les platicare como me llenaba la boca y el culo de leche en la oficina.

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