Mi mujer es demasiado zorra y con mi polla no le alcanza, así que disfruta cuando puede de la verga del jardinero y del vecino mientras yo busco coños por otros lados
Esta vez toca relato sexo con el jardinero de esta esposa muy puta, Esther Les cuento como siguió la historia después de hacer de puta con el Maestro de Obras
-Una hora más tarde el jardinero llegó y empezó por la parte de enfrente del jardin y me quede mirandolo. Se veía tan sexy sudando. Esperé a que terminara para pasarlo al patio, el empezó a hacer su trabajo y yo empezé a poner cosas en su lugar. Casualmente me mojé lla camisa que llevaba puesta y se notaban mis pechos ya que tampoco llevaba sujetador.
-Hize como que no me di cuenta de la transparencia y pasaba enfrente de él para que me viera. El seguía trabajando y yo entraba y salia de la casa haciendo que me viera las tetas y el culo cuando me agachaba por algo, le enseñaba el culo y el coño por detras con mi pelos. Después de un rato así,fui a sacar ropa de la lavadora para tenderla y cuando ya casi acababa escuché que apagó la podadora. Me desabotoné dos botones de la camisa y me empiné en la lavadora para sacar las últimas prendas que quedaban dentro.
-Cuando me enderezé lo tenia detrás de mi, pegó su cuerpo al mio. Me sujetó de las caderas pegando mi culo a su polla que la tenia durisima,Me dijo al oído: has estado provocandome todo este rato esta usted muy buena y creo que mal follada. Sus manos subieron a mis tetas los estrujó y tiró de la camisa y esta se abrió con facilidad.
-Con una mano manoseaba mis tetas y la otra la bajó hacia debajo para meterme los dejos. Mordió el lóbulo de mi oreja y me dijo voy a darte lo que quieres puta. No dije nada, solo asentí con la cabeza, la giré levemente y me hundí en sus labios mientras me dejaba hacer. Abrí más las piernas para que sus dedos entraran más profundo en mi coño y restregarle más el culo en la polla.
-Él pellizcaba mis pezones y yo gemia en sus labios, después me soltó bajo sus pantalones, me incó y me metió su polla en la boca. Yo iba a hacerlo con gusto pero él quería el control. Sujetó mi cabeza y movía sus caderas metiéndome toda su polla hasta la garganta. Me dieron algunas arcadas y ahora era él el que gemía. Nuevamente me levantó, me llevó y me recargó en una árbol. me apartó el hilo del tangas y, me dio una palmada en los cachetes, me metió los dedos en el coño comprobando lo empapada que estaba. Yo estaba mojadisima, que él me cojiera de esa manera respondiendo a mis provocaciones me había exitado mucho.
-Arqueé mi espalda esperando su entrada, no me hizo sufrir, me la metió toda. Yo me agarraba fuerte del árbol mientras el me follaba fuertemente y me pegaba en las nalgas dejándome la manos marcadas. Yo estaba gritando de placer, me ponía más cachonda pensar que alguien más me escuchaba.
-Esperó a que mi cuerpo explotarar en un orgasmo y salió de mí, me volvió a incar y me metió la polla en la boca nuevamente. Metió sus manos entre el pelo de mi sujetando muy bien mi cabeza. Separó un poco más las piernas y me empezó a follar la boca lo más rápido que podía hasta que sentí que su leche caliente inundaba mi boca. Me la comí toda, me sentía exhausta y me dolían los cachetes. Me cogió y me llevó a dentro de la casa, me recostó en el sillón y me dijo que ya se iba, y como el anterior tampoco me dejó pagarle.
-Solo volvió a pegarme en las nalgas antes de irse, me dormí un rato en el sofá. Al despertar me bañé, me puse un vestido corto para ir de compras, pero antes quería guardar en la despensa unas cosas que había comprado un día antes. Tuve que subirme a una silla y luego a la barrita para acomodar las cosas.
-Estaba en eso cuando escucho que tocan mi puerta, era mi vecino preguntando si podía entrar. Le dije que si, definitivamente era mi día. Hace tiempo que quería una oportunidad con el vecino y al parecer la iba a tener, entró y me vio de espaldas. Fingí estirarme por algo antes de voltear a verlo para que se me levantara más la camisa y me viera las nalgas, el culo y coño.
-Volteé y le pregunté que queria, se quedó callado pensando que responder. Traía una taza en la mano, y me dijo que si tenía un poco de azúcar. Le dije claro que sí y volví a voltearme a “buscar” el azúcar. Sabía que no estaba allí pero quería que me viera nuevamente. Fingí buscarla un poco mientras le decía “creía que tu no tomabas café” y me contestó que no era para él si no para su novia que estaba en su casa.
-La ventana de su cocina estaba frente a la mía, me emocionó pensar que si pasaba algo su novia pudiera vernos por la ventana. Bajé de la barra y le dije que el azúcar estaba abajo. Cuando bajé de la silla pasé cerca de él para que mi mano le rozara la polla accidentalmente y fui a por la azúcar y nuevamente me empiné. Lo escuché acercarse un poco pero se detuvo como arrepintiendose, pero sin darse cuenta se acorraló recargandose en la mesa y conmigo enfrente de él. Le vacié azúcar en la taza y me dio las gracias, pero estaba acorralado, no sabia como irse. Así que tomé la taza de azúcar, la puse por un lado y me le lanzé a la boca a besarlo, no dudó en responder mis besos y me tomó en sus brazos recorriendome todo el cuerpo.
-Mis manos viajaron rápido a su pantalón para desabrocharlo, mientras sus manos me bajarón el tanga, hasta quitarmelo, se bajó los pantalones, me recostó en la mesa, me abrió las piernas, me empezó a besar el coño me lo mojó toda con su saliva, empujaba su lengua hacia lo más hondo de mi coño mientras estiraba sus manos para apretarme las tetas. Me estaba volviendo loca su lengua, yo quería más, lo apreté hacia mi, puso la punta de su polla en mi coño y la metió lentamente, y con movimientos suaves y despacio me metía y me sacaba la polla mientras me besaba.
-Después aumentó su ritmo, y luego lo hacía despacio de nuevo y rápido otra vez. Me encantaba, yo gemía, y él me callaba con besos, pero yo gemia cada vez más, quería que me escucharan,. El solo reía, y me decía, se lo que haces, yo solo reía, se salió de mi, me bajó me voltió y me empinó.
-Me la volvió a meter mientras me abría el culo con los dedos y me decía quieres que te escuche verdad, te exita que nos vea? Pues ahora te voy a hacer gritar, y si, más me metio la polla en el culo, me dolió y grité muy fuerte, pero rápidamente empezó a bombear su polla dentro de mi y el dolor se fue, ya estaba mi culo acostumbrado a otras pollas y mas gordas como sabeis.
Empezé a sentir rico como su polla muy dura en el culo, me sujetaba fuerte de las caderas y hundía su polla en mi lo más que podía. Logré correrme con su polla en el culo y sus dedos en mi clitoris. Yo no dejaba de gemir y él también empezó a hacerlo, de pronto sentí su leche inundar mi culo y sus manos se aferraron a mis caderas hasta que terminó llanandome todo el culo. Nos repusimos, tomó la taza, me dio un beso y me dijo que volvería pronto y se marchó.
Tuve que volver a bañarme pero no me importaba. Salí a hacer mis compras, escogí unas prendas rápidamente porque la tienda estaba por cerrar, ya toda la gente estaba en la caja y yo apenas me iba a probar la ropa. En el probador había un chico a cargo, revisó las prendas, entre ellas un tanga la cual me dijo que no se podían probar, pero que a mí me dejaría pobarmela. Me entregó un número y me dijo que pasara,el coño me volvió a palpitar.
-Me he vuelto una ninfomana total solo quiero follar,veo un macho y se me pone el coño empapado.