No puedo evitarlo, me vuelven loco las pollas
Desde hace un tiempo, soy miembro de una página de contactos sexuales y, tras muchos años de matrimonio, es lo mejor que me ha pasado en mi vida.
Soy bisexual, pasivo y algo sumiso, amante y adorador de pollas, me encantan en todos los tamaños y grosores, descapulladas o no, rasuradas o no, en definitiva me vuelven loco. Siento un inmenso placer mientras estoy haciendo una mamada, metiendo la polla bien dentro de mi garganta, mientras masajeo los huevos. Me gusta que me follen la boca, bien fuerte y profundo, hasta la arcada.
Desde que ingresé en esta página, he estado con seis tíos, a los que les he sacado la leche con mi boca. Ellos no me han hecho nada, simplemente se dejaban hacer la mamada, sintiendo el placer que soy capaz de proporcionar con mi boca.
Con uno de esos tíos, estuve chateando unos días. Me trataba con rudeza, mientras me llamaba putita, me decía que me daría pollazos en la cara, que castigaría mi culo con sus manos y que se correría en mi cara de puta, eso me ponía a mil y deseaba quedar con el lo antes posible.
Por fin llegó el día, quedamos en su casa. Me dijo que cuando llamara al telefonillo, le contestara que venía de Santa Lucia, para arreglar la tubería. La verdad es que esto me hizo gracia, pero cuando llamé, le contesté de esa manera, dando sintomas de que le obedecería en todo lo que quisiera. Entré en su casa, estaba vestido con pantalón, camisa y corbata.
.- Hola puta
.- Hola
.- Acompañame
Fui tras el, hasta el salón.
.- Date una vuelta, que te vea bien
Me giré despacio, para que viera mi cuerpo, aunque no soy nada del otro mundo.
.- Que culito tienes putita, me dijo mientras lo apretaba
.- Gracias
.- Ven, desnudame
Comencé a desnudarlo, quite su corbata y desabroche su camisa. Cuando agarré su cinturón, me dijo
.- De rodillas, puta, hazlo de rodillas
Me arrodillé ante el y desabroche el cinturón, baje la bragueta y los pantalones. Ante mi apareció el slip, bajo el cual se empezaba a dislumbrar el bulto de su polla.
.- Bésalo puta
Comencé a besar su polla, aún tapada por el slip. La pretaba con mis labios, notando su contorno y como este crecía poco a poco.
.- Chupalo, mojalo con tu lengua
Saqué la lengua y comencé a chupar. Me encantaba esa nueva sensación. Estuve un rato haciendolo, hasta que su slip quedó empapado de mis babas.
.- Venga zorra, ya puedes quitarme el slip
Bajé el slip y ante mi apareció una preciosa polla, rasurada y descapullada. No la medí, pero debía estar entre 18 y 21 cm, gruesa y con una impresionante y reluciente cabeza, que en ese momento desprendía gotas de un delicioso precum.
Sin decir nada, agarró mi cabeza con una mano, mientras con la otra cogía su polla y me acercó a ella. Abrí la boca y la introdujo dentro, apretando bien duerte, para hundirla en lo más profundo de mi garganta y la dejó así, enterrada por unos instantes.
.- Tienes buena boca zorra. desnudate
Rapidamente me desnudé, mientras el terminaba de quitarse la ropa. Una vez que estabamos desnudos, me hizo girar y mostrarle mi culo.
.- Mmmm que culo tienes zorra, decía mientras lo apretaba y golpeaba con las manos. Me dio seis o siete cachetadas, que si bien no fueron fuertes, me produjeron un dolor muy placentero.
.- Ponte de rodillas y chupamela
Volví a hincar las rodillas en el suelo y comencé a mamar esa preciosa polla. El sujetaba mi cabeza, llevando el ritmo de la mamada. A veces lo hacía lento y suave, otras muy rápido y fuerte, pero en todas las embestidas, lo hacía muy profundo, haciendo que mis babas empapasen su polla y huevos. Durante más de diez minutos, estuvo utilizando mi boca como si de un coño se tratara. Metía y sacaba la polla a su antojo, mientras no soltaba mi cabeza, de vez en cuando, la sacaba y daba pollazos en mi cara, haciendome notar lo dura que estaba. Notaba el calor de mis mejillas y comenzaba a dolerme la mandibula debido al esfuerzo.
Tras esos intensos minutos, decidió cambiar de postura. Se sentó en el sofá y me indicó que me pusiera sobre el, tumbado boca abajo sobre sus rodillas. Me coloqué como me indicó. Comenzó a acariciar mi culo y a darme azotes.
.- Me gusta tu culo puta, plas
.- Gracias
.- Coge mi polla, plas
Agarré su polla, mientras el seguía castigándome. Cada vez lo hacía un poco más fuerte, pero estaba empezando a gustarme esa nueva sensación.
.- Te gusta puta, te gusta que te pegue así
.- Si, me gusta mucho
.- Eres buena puta
.- Gracias, intento serlo
.- Te gusta complacer a los tíos, verdad puta
.- Si, me gusta mucho
.- Disfrutas con ellos, con su polla
.- Si, mucho
Mientras me hablaba, no dejaba de golpear mi culo. Notaba como el calor empezaba a asomar, los cachetes se debían estar poniendo rojos debido al castigo. De buenas a primeras, dejó de golpearme y acercó un dedo a mi boca.
.- Chupa zorra, chupalo bien
Chupe su dedo, cuando lo sacó de mi boca, lo dirigío directamente a mi ano y comenzó a meterlo. Lo hizo despacio, ya que sabía que yo era virgen. Su dedo entraba dentro de mi, por primera vez en muchos años, un tío metía algo dentro de mi y me estaba encantando.
.- Te gusta puta
.- Bufff, si me gusta
.- Pues más te va a gustar cuando tengas mi polla dentro
.- ¿Me vas a follar?
.- Claro puta, a que te crees que has venido. Tienes algún problema
.- No, no, ninguno, si quieres follarme, hazlo
.- Buena puta, así me gusta. Venga, ponte a cuatro patas en el sofá
Me levante de la posición en la que estaba, la verdad es que no era demasiado cómoda, y me coloqué a cuatro patas, ofreciendole mi culo.
El se dio la vuelta y me la metio en la boca de nuevo.
.- Vamos zorra, ponla bien dura
Su polla ganó dureza, cuando lo creyó conveniente, la sacó de mi boca y se colocó tras de mi.
.- Bueno puta, ha llegado el momento, dijo mientras se ponía un condón
.- Por favor, hazlo despacio, hace mucho que no me follan
.- Tranquila puta, lo haré despacio, pero solo al principio
Acercó su polla a mi ano y empujó
.- ahhhhhh
.- Shhhh calla zorra, que pueden oirnos
.- Me duele mucho
.- Solo será un poquito, ya verás
Siguió empujando, el dolor crecía por momentos
.- Diooooosssss me duele, sacala por favor, ahhhhhhh
.- Tranquila puta, si ya casi está, me mintió descaradamente
.- Sacala, no aguanto el dolor, ahhhhhhh
De un fuerte empujón, la hundió completamente. Un dolor desgarrador se apoderó de mi ano y un gran quejido salió de mi boca
.- Ahhhhhhhh, me duele cabrónb, sacala por favor
.- Shhhhhh calla puta, verás como te acostumbras a tenerla y se pasará, diciendo esto, tapó mi boca con su mano, al tiempo que se recostaba sobre mi, haciendo que su polla se enterrara un poco más, si es que eso podía ser.
Notaba sus huevos pegados ami culo, la tenía toda dentro, me había ensartado completamente. Durantes unos instantes, se quedó quieto, para que mi ano se acostumbrase a tener ese pedazo de carne dentro. Luego, poco a poco, comenzó a moverse despacio. El dolor inical fue convirtiendose en una agradable sensación. Poco a poco, este desaparecía , dando paso a un placer inigualable.
.- Mmmmmmm
.- Ves puta, ya ha dejado de doler, verdad
.- Si
.- Y ahora te gusta, verdad puta
.- Siiii, me encanta
Siempre que se dirigía a mi, lo hacía con esas palabras, puta o zorra, luego me contó que le gustaba llamar así a las tías y que a mi me trató como si fuera una puta más, lejos de enfadarme, me encantó que lo hiciera.
El ritmo de la follada se aceleraba poco a poco, su polla entraba y salía de mi culo con grandes y profundas embestidas. Lo que fué una agradable sensación, paso a ser un inmenso placer de ser follado, de sentir una polla entrando y saliendo de mi ano. Mi polla, que por cierto no había despertado en todo el rato, comenzó a soltar semen, sin tocarla, había conseguido que me corriera.
.- Te estás corriendo puta
.- Siiii, ahhhhhhh
.- Yo casi estoy
.- Siiiii, damelo todo, por favor
.- ¿Lo quieres puta?
.- Siiii, lo quiero
.- Pidemelo
.- Por favor, dame tu leche, quiero tu leche
Sacándo la polla de mi ano, se quitó el condón y me hizo girar
.- Vamos puta, abre la boca
Abrí la boca lo más que pude, mientras el se meneaba la polla.
.- Siiiii, toma zorra, toma mi leche
Comenzó a escupir semen, llenando mi boca, cara y pelo
.- Ahhh, siiiiiii, toma zorraaaaaaa
Cuando terminó de correrse, hizo que limpiara su polla, estrujándola dentro de mi boca, para que no quedara ni una sola gota. Luego calló derrumbado en el sofa.
.- Me ha gustado zorra
.- A mi tambien
Yo seguía con la cara llena de leche y con su sabor en mi boca.
.- Bueno puta, vistete, es hora de irte
Me vestí y me fuí de su casa. Nunca supe su nombre, ni el el mío, pero me gustó como me trató y a día de hoy, sigo masturbandome pensando en ese día.