Trío con dos chicas de 18 con culos muy firmes y coños muy húmedos
Acudí a una casa donde estaría bien acompañado por alguna mujer. Era grande con un estilo años 70. Mi sorpresa fue, al conversar con el anfitrión, que había 2 jovencitas de 18 años en la casa dispuestas a todo. Entendí que estaría con una de ellas. Pero mi sorpresa fue en aumento al presentarse y decirme las dos que haríamos un trío, después de comer.
Las sorpresas seguían en aumento. Nadie me dijo que también almorzaría con ellas. No me disgusto. No me gusta sexo sin mas. Los mejores momentos de sexo en mi vida siempre fueron de forma relajada, con un poco de Ron y conversación.
Enfrente de mi, sentada, estaba Cárol con sus 18 añitos. Una cara de indígena peciosa. Delgada, con dos pechos firmes y pequeños que caben en una mano. Con una camiseta ajustada, me sonreía mientras comía. Su amiga, Elena, tenia unos pechos duros un poco mas grandes. Tenía las facciones grandes, como una modelo de revista. Pero su estatura seria de 1,65 de alto. Pelo largo y liso.
Durante la comida, Cárol, se levantó y se acercó para plantarme un beso con lengua que me puso a 100. Estaba claro que terminaría en la cama con las dos. Elena era la mas habladora. Me contó con todo tipo de detalles de forma muy morbosa todo lo que me iban a hacer las dos cuando pasáramos al dormitorio.
Al terminar, Elena se sentó en mis piernas y me morreo metiéndome su lengua hasta la garganta. Palpe una piel dura, joven, con horas de gym. Hacia tiempo que no tenía una jovencita entre mis brazos. Fue mas excitante pensar en la diferencia de edad, unos 20 años. Y mas morboso al sentir los besos por el cuello de su amiga mientras me besaba con pasión.
Nos dirigimos al dormitorio. Una cama grande nos esperaba. Entre besos y caricias nos desvestimos. Fuimos al cuarto de baño y entramos en una ducha moderna con sitio para 6 personas. Mientras me enjabonaban, las besaba con pasión. Elena se agacho y me hizo una mamada tremenda. Se metía mis 19 cms hasta la garganta. Aguantaba unos segundos y despacio movía su cabeza hacia atrás recorriendo con sus labios carnosos mi polla, y sin despegarse volvía a introducirla hasta la garganta, con un ritmo lento, y volvía a mantener unos segundos la polla dentro de su boca mientras Cárol me besaba y me enjabonaba.
Ahora fui yo el que la empecé a enjabonar recorriendo todo su cuerpo. Una piel dura, joven y tonificada. Su entrepierna se notaba húmeda y a punto para meter mi polla. Pero se agachó y en ese momento se levantó su amiga para besarme. Era otra forma de mamar. Otra forma de hacerme gozar mientras acariciaba a su amiga y la besaba con pasión.
Nos dirigimos a la cama y me hicieron tumbar para poderlas ver como se besaban entre ellas con pasión. Dos cuerpos jóvenes y bien trabajados. Con piel firme. Culos duros y dos coños para mi. Mientras se besaban, Elena empezó a masturbarme. Fueron unos minutos bárbaros. Se agacho y empezó a mamar con intensidad. Su amiga me beso y se incorporo poniendo su coño en mi boca. Estaba en la gloria.
Es una sensación fabulosa que te la chupen mientras tu comes un coño depilado, pequeño, de una jovencita de 18 años. En ese momento, Cárol empezó a correrse en mi boca. La agarraba su culo duro mientras mas la metía la lengua en su coño. La levanté un poco para chupar su ano. Olía a una fragancia de perfume caro. Al pasarle la lengua por toda su raja me embriagaba. Le introduje un dedo por el culo y mi sorpresa es que no lo rechazó. Estaba claro que iba a follarla por sus dos agujeros. En un momento se giró y seguí en mi empeño de que se corriera por segunda vez, notando como sus bocas se entrelazaban con pasión.
Me habían contado en la comida, que eran bisexuales desde hacia un año. Pero que las dos seguían disfrutando con una buena polla, grande y dura…. De una forma muy excitante, saco Elena la polla de su coño con un movimiento muy sensual, mientras Cárol esperaba su turno a un lado de rodillas y mi dedo dentro de su coño.
Cárol se giró, sacándose mis dedos del coño y se sentó de espaldas a mi. Empezó un mete y saca lento, sensual. Elena me dejaba acariciarla su coño mirándome con una sonrisa tierna. Se sentó encima de mi boca y me restregó su coño por mi boca. Tenía un aroma al mismo perfume caro que tenia Cárol. Y su culo era duro y respingón. Una cintura de infarto. que delicia ver que también se dejaba penetrar con el dedo por mi dedo.
Estaba tan excitado que me corrí dentro de Cárol. Fue maravilloso llenarla y chupar el coño de Elena mientras la agarraba con fuerza ese culo duro. Elena también se corrío con mi lengua. Y Cárol empezó a convulsionarse mientras la llenaba. Apretó su coño con mi polla dentro y me la terminó de exprimir. Unos gemidos fuertes nos indicaron su corrida final.
Carol se fue a lavar y a por una botella de Ron al comedor. Me quede unos minutos con Elena besándola. Que experiencia. Y esto iba para rato. Puedo correrme dos veces sin que se me baje el empalme de la polla. Y Elena estaba alucinada. De vez en cuando me limpiaba la polla con una mamada de campeonato.
Cuando llegó Cárol con el Ron, bebimos besándonos y con miradas cómplices de que lo mejor estaba por venir. Levanté a Elena por la cintura a cuatro patas y le prepare su coño con mi lengua. Cuando se la metí despacio, arqueo la espalda y me miro con una cara de viciosa que me enamoró. Cárol se puso a mi lado besándome y tenia una mano en el culo de ella y la otra mano en el culo de Elena.
Siempre disfruto follándome a dos mujeres, una a cuatro patas y la otra a mi lado besando esperando su turno…. pero estas dos bellezas me tenían mas sorpresas. En una de esas envestidas, Cárol metió su mano cogiéndome la polla y obligándome a sacarla del coño de su amiga. Se agachó y me chupo la polla despacio, ensalivándola hasta la empuñadura.
Cuando la tenia chorreando de saliva, la dirigío hasta el agujero de su amiga y entro con facilidad hasta dentro. Lo notaba caliente y apretado. Era maravilloso bombear en el culo de Elena. Agarre su culo duro y firme, y aumenté la velocidad de embestida. Cárol se metío debajo de Elena y me empezó a comer los huevos mientras me follaba ese culo joven. Y Elena la comía su coño hasta que se corrieron las dos dando gemidos de perras en celo.
Saqué mi mástil de Elena y volteé a Cárol para dejarla a cuatro patas. Ahora fue el turno de Elena de ensalivarme la polla. Lo alternaba con al culo de su amiga. Cuando la empalé el culo me quedé un rato con la polla dentro sin moverme y besando a Elena. La agarre el culo con fuerza y la metí un dedo por el coño que estaba chorreando.
Cuando empecé a bombear el culo de Cárol, la agarre con las dos manos de las caderas. Era una cintura fina, de piel firme. Elena le dio a comer su coño y tarde poco en correrme dentro de ella. Ya eran dos corridas en los dos agujeros de Carol. No sabia si podría mantener la erección una tercera vez. Pero entre unos tragos de Ron y las caricias y besos de estas dos jovencitas mantuve la polla bien alta para un tercer enviste.
Pero esta vez fue muy especial. Las dos me tumbaron boca arriba y se besaron antes de empezar a comerme la polla a duo. Mientras una lamia el capullo la otra me lamia los huevos. había momentos que pegaban sus labios a la polla por cada lateral y bajaban y subían al unisono sin perder el ritmo. Estuvieron así unos 15 minutos, alternándose la polla o mamándomela a duo. Se encontraban sus lenguas a lo largo de mi polla o en los huevos. Competían por ver quien aguantaba mas tiempo con la polla hasta la empuñadura. Fueron unos minutos de vicio. Y esta vez, cuando me corrí, fue Elena la que se trago todo mi semen relamiéndose. Cárol la besó con pasión y luego compartieron conmigo un beso a tres para terminar este día de sexo con jovencitas.