Trio sexual en carnaval: yo me disfrace de alumna sexy. camisa blanca de botones, desabrochada

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Esta historia ocurrió el año pasado por carnaval, yo me disfrace de alumna sexy. camisa blanca de botones, desabrochada, dejando asomar el sujetador negro de encaje, falda corta de cuadros rojos y negros, medias de liga de red.

Tengo buen cuerpo y una melena rubia rizada hasta media espalda.

Esa noche salí con unas conocidas, no digo amigas, porque se pueden contar con los dedos de la mano y te sobrarían.

Salimos a divertirnos un poco, en un bar conocí a un chico moreno que iba disfrazado de policía nacional.

Era alto, moreno, con unos grandes ojos verdes, labios carnosos y por lo que se apreciaba un cuerpo de infarto.

Entablamos conversación, bailamos, situación que aproveche para insinuarme contoneando mi cuerpo contra el suyo, sacaba mi lengua para cazar la pajita del vaso.

El que no era tonto se arrimo a bailar, cogiéndome por la cintura, apretándome contra el al tiempo que me besaba el cuello y estiraba su mano metiendola por debajo de mi falda para tocar mis muslos.

Yo estaba como una moto, no tardo en decirme que fuéramos a dar un paseo juntos.

Hizo una llamada mientras paseábamos por un paseo marítimo muy solitario, luego me coloco contra la barandilla del paseo y comenzó a besarme apasionadamente.

Pasaba sus manos por mis pechos, besaba mi cuello apasionadamente, yo elevaba mi pierna, ocasión que aprovechaba para meter su mano debajo de mi falda.

En ese momento se acerco una grillera de antidisturbios, pensé que nos llamarían la atención, entonces otro chico salio de ella saludándolo y entregándole las llaves.

Me dijo si me apetecía probar allí dentro a lo que accedí muy gustosa, tenia unas ganas de follar tremendas, solo había una condición, su compañero solo miraba, en raras ocasiones participaba.

Me quede un poco sorprendida pero accedí a ese trio sexual tan extraño.

Nos metimos atrás, el comenzó a besarme, a echar mano a mis botones para quitarme la camisa, yo desabrochaba su camisa dejando asomar su bonito y musculado torso desnudo.

Me fui agachando mientras lo besaba hasta llegar a su cintura, luego mordisqueaba su dura polla por encima del pantalón, lo desabroche dejándola salir para comenzar a chupársela.

De repente note otras manos que agarraban mis pechos desde atrás.

Me deje llevar pero no fue mas allá, el me cogía los pechos mientras el otro los lamia, yo estaba muy excitada, tenia la polla de uno en la mano, masturbandolo sin parar, intente tocar el miembro del otro chico, pero no quería nada, solo mirar y tocarme de vez en cuando.

Deje de preocuparme por el, empezando a centrarme en el chico con el que había empezado todo.

Comenzamos a desvestirnos el uno al otro entre besos y abrazos, no me quito la falda, ni las medias, le ponía muchísimo.

Me tumbo en la parte de atrás, comenzando a bajar entre mis piernas, para lamer mi coño súper húmedo, cosa evidente, ya que el tanga estaba chorreando.

Me lo arranco de un tirón para comenzar a pasar su lengua por mi coño depilado, yo abría mis piernas para que lo hiciera mas a gusto, su amigo, ante nosotros miraba y no dejaba de menearsela, yo no dejaba de mirar a su amigo a los ojos, mientras sujetaba su cabeza entre mis piernas.

Cerré mis piernas para que parara, me coloque de rodillas, cogí su polla introduciendola en mi boca y comencé a chupar al tiempo que le masturbaba y con la otra mano le tocaba los testículos, el no dejaba de gemir, pidiéndome que no parara.

Luego se retiro para no correrse, diciéndome querer pedirme algo.

Me pidió exposarme de pies y manos, no me gustaba mucho la idea, pero estaba tan caliente que solo podía pensar en que me la metiera, a si que le dije que si.

Me esposo de piernas y brazos abiertos, se puso entre mis piernas y me la metio hasta el fondo, yo no podía hacer nada, estaba totalmente en sus manos.

Era muy excitante intentar moverte y no poder, ni abrazarle ni besarle, nada, solo si el quería.

Su amigo se puso en mi cabeza y mientras uno me la metía sin parar haciéndome arquear la espalda gritando y gimiendo de placer, el otro me chupaba los pechos, mientras se la machacaba, era tan excitante que no pude evitar correrme gimiendo como una perra.

Luego el que me estaba follando como un loco se corrió dentro de mi, mientras su amigo se corría en mis pechos, pense que todo había acabo, pero no fue así, comenzó a besar mis muslos hasta llegar a mi coño de nuevo.

Yo no podía moverme cuanto mas intentaba escapar y no podía mas excitada me sentía, lejos de parar siguió lamiéndolo, chupando mi clítoris, metiendo su lengua hasta el fondo para luego sacarla chupando mi clítoris con mucho ritmo.

No tardo en llegar mi segundo orgasmo, estaba poseída, pidiéndole mas, que me lo comiera todo que no parara, fue increíble, súper intenso y maravilloso.

Luego solto las esposas, nos colocamos la ropa y me acercaron a casa.

No iban de carnaval, eran policías de verdad.

Me resulto extraño lo del otro chico, pero no pregunte nada, me dejaron en casa y se fueron, nunca mas los he visto, pero fue increíble e inolvidable ese trio sexual.

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