Un perro Beagle me quita la virginidad

Mi amiga Jhoani me prestó este espacio para contarles lo que viví.

Desde chico he tenido la curiosidad de muchas cosas, entre ellas ser penetrado ya sea por algún perro o un hombre. Resulta qué pasó primero con un perro que tenía. Todo comenzó hace unos años, yo iba en primer semestre de prepa. En ese tiempo tenía un perro llamado jak, era un beagle que lo crios desde cachorro, nunca había tenido relaciones ni con un hombre ni con una mujer así que mis hormonas estaban por el cielo. Un día mis papás salieron a un viaje de negocios y tardarían un par de días en regresar por lo que me quede solo en la casa con mi perro, durante la tarde estaba aburrido y jugaba con mi perro, traia puesto un pans recuerdo bien, color azul, cuando el se acercó a mi y lo estuve acariciando, de pronto vi cómo su nariz estaba en mi entre pierna, la quería oler, al principio me pareció raro, crei que me quería morder pero después vi que lo hacía con sutileza, fue cuando se me ocurrió sacar el pene, el lo lamió de una manera muy frenética y rápidamente tuve una ereccion, pensé que eyacularia por lo que lo quite de mi y el se resistía a seguir lamiendo. Me excito tanto que empecé a tener pensamientos eroticos, lo lleve a su casita. Regrese, me quede pensando en qué pasaría si me lame el ano, ¿se sentira rico? Asi estuve meditando como una media hora, cuando decidí proba, me metí a bañar, tome un rastrillo y comencé a afeitar mis pierny mi culito, quitando los pocos bellos que tení, dentro de mi pensaba en ser una Diosa que se entregaría a su bestia por completo. Espere a que se anocheciera para que hubiese completo silencio, fui por el perro, lo traía de su correa y lo metí por una parte trasera de la casa, llegamos hasta la sala, puse una cobija para que pasara todo ahi, era mi primera vez y no sabía que hacer ni cómo lograr que me montara, comencé a desvestirme y el fue rápido a lamerme las bolas y mi pene, lo que hice después fue ponerme de perrito y enseñarle mi culo liso y depilado, el introdujo su lengua húmeda en mi, eso me excito bastante, me incline mas para abrir mis nalgas y pudiera llegar bien a mi ano, sentía su lengua pasar una y otra vez quise que me montara pero no pasaba nada, me volteé y comence a frotar su verga sintiendo como poco a poco Salía un capullo, pero no pasó nada y no logré que me montara esta noche, por lo que lo saque y me quede completamente excitado, después solo me masturbe.

Al otro día fui a la escuela y no pude dejar de pensar en cómo lograr que me montara mi perro, estaba ansioso de llegar e intentarlo de nuevo, se dio la hora de la salida y llegue lo más pronto posible a mi casa, dejé mis cosas y fui por mi perro quien estaba muy contento de verme, lo volví a meter por la puerta trasera. Pero esta vez no lo haríamos en la sala pues habia mucha luz, pensé en ponerme un poco de aceite de avellana para que el pero la lamiera y al mismo tiempo dilatar mi ano por si pasaba lo que quería, entonces me desvestí y así lo hice, puse una cobija en el suelo, tomé el frasco de aceite y lo empecé a poner dentro de mi culo, después me puse en posición y el perro corrió a lamer todo. Senti muy rico y movía mi colita de un lado a otro para incitarlo, enseguida me volteé para tocar su miembro y noté que ya estaba duro. Cuando de pronto se subió arriba de mí tomándome con sus patas delanteras fuertemente, pero solo fue un intento y no pasó nada, así pasaron como 5 veces y no pasaba nada, entonces pensé en por lo menos masturbarlo, le empece a frotar su pene rapida mente… cuando note unas gotas de un líquido transparente, y paso lo que no creí. Me tomo con violencia mi cintura y sentí como un pequeño cuerpo delgado se introdujo en mi ano, cuando lo sintió dentro comenzo afollarme muy rápido y duro, sentí como una bola de carne crecía más y más dentro de mi, sentí como algo caliente llenaba mis intestinos, hasta que se detuvo, quedamos pegados unos momentos, de pronto algo azoto la puerta de la casa, me alarme creyendo que alguien habia llegado entonces me jalé tratando de despegarme y el pero también cuando sentí un muy fuerte dolor seguido de un ruido de descompresión, seguido de eso yo grité y me toque el ano sintiendo un enorme boquete que había dejado ese animal, lo voltee a ver y vi que tenía una bola de unos 9-10 centímetros y la había forzado a salir bruscamente de mi ano Virgen, abajo de mí habia un charco de semen, corri al baño a limpiarme, no dejaba de salirme semen de perro por mi agujero noté un poquito de sangre, me asusté un poco pero el dolor fue disminuyendo junto con mi ereccion, devolvi al perrito a su casa y yo me quede dormido pensando en que mi perro me había desvirginado y que no había duda que quería volver a intentarlo…