Viviendo nuevas experiencias con mi mujer. El placer de descubrir cosas nuevas

Durante mucho tiempo he soñado con ciertas experiencias sexuales con mi mujer. Somos una pareja estable de muchos años de relación y nuestra vida sexual ha sido siempre satisfactoria pero normal hasta un día que María me confesó que le gustaría tener alguna experiencia con otro hombre ya que sólo ha estado conmigo. Aunque puede resultar bastante violento, me lo tomé con naturalidad ya que es lógico que quiera a sus 40 años tener alguna experiencia más y claro, a mi eso me da morbo aunque no se lo confesara en ese momento. Lo único que le dije es que no me gustaría que me fuese infiel, que quería estar delante.

Pasó un tiempo y no volvimos a hablar del tema pero a mi me exitaba sólo de pensarlo. Poco a poco, el tema fue surgiendo cuando follabamos y notaba como se ponía muy cachonda cuando le decía cosas al oido. Muchas veces ponía peliculas porno dónde en la escena se veía una mujer con dos hombres y se masturbaba con un vibrador mientras me practicaba sexo oral. Eso la ponía a mil y facilitaba por su estado de exitación el posterior sexo anal.

Una noche salimos a cenar y luego a una discoteca a tomarnos una copa como sóliamos hacer de vez en cuando. En un momento que fuí a pedir una copa vi como un chico estaba cerca de ella y le dijo algo al oido. Fue una escena de lo más normal pero me recordó lo que mi mujer deseaba y aproveché para dejárselo caer.

– Cari, he visto que el chico que está a tu lado te miraba bastante. ¿Te gustaría que fuese con el?.

Asombrada porque no esperaba en ese momento mi comentario…

– !Qué dices! ¿en serío?

– Te lo digo en serio. La verdad es que no sé a que estamos esperando.

– Carlos me gustaría hacerlo pero no creo que sea tan sencillo.

Al momento y tras darle un beso para marcar territorio me acerqué al chico.

– Hola me llamo Carlos, espero que no te moleste lo que te voy a comentar pero si mi mujer te atrae nos gustaría que follaras con ella delante mia.

– Molestarme no me molesta pero me parece muy fuerte. ¿En serio buscas que se follen a tu mujer?

– Si, es algo que nos gustaría experimentar. Te interesa.

– Claro que sí, y más viendola que está bastante buena y para querer esto tiene que ser una zorra. Pero primero hacemos una cosa que luego pasan de mi y me quedo tirado. Vamos al baño y que me de una mamada delante tuya. Así estaré seguro que no es una broma lo que me pides.

– Me parece bien, se lo digo y vamos.

En ese momento comencé a ponerme muy cachondo y nervioso.

– María, el chico quiere venirse con con nosotros pero antes quiere que hagas una cosa.

– ¿El qué?

– Que le des una mamada en el baño.

– Jajajaja estas loco Carlos, pero bueno… si tu lo ves bien a mi no me importa.

Le hice una señal al chico y nos fuimos camino al servicio y vi como nos acompañaba. Al entrar en el baño de hombres Ana entro un poco cortada porque habían más chicos pero como suele ser algo típico cuando el baño de mujeres está llego no se le dió más importancia. El chico le dió un beso a María y le tocó las tetas delante de mi. Fué una sitiuación bastante desconcertante pero me exitaba mucho ver cómo se dejaba manosear en mi presencia.

En ese momento, el chico le dijo al resto de hombres que había en el baño.

– Señores miren lo que va a pasar aquí, el tipo este quiere que me folle a su mujer y la muy zorra viene al baño a darme una mamada.

Al instante todo el mundo se quedó callado y vi como uno de los que estaba cerca de la puerta se puso detras para que nadie entrara. Yo me aparté un poco al ver a María ponerse de rodillas y abrirle el pantalón. Poco a poco sacó su polla la cual todavía no estaba tiesa pero se notaba bastante gruesa.

Ver a mi mujer comenzar a chuparle la polla a otro hombre delante mia me provocó muchas sensaciones. algunas muy humillantes pero el nivel de exitación que tenía era tal que no me importaba.

Entre risas, los otros chicos decían que mi mujer es muy puta y yo un cornudo mientras yo miraba la escena.

Al poco, el chico se corrió totalmente en la boca de María. Se la guardó y con una palmadita en mi espalda me dijo que me esperaba fuera si quería seguir con el acuerdo.

Maria con cara de viciosa me dijo al oido que estaba súper cachonda y que fue una de las mejores experiencia que ha tenido. Que desea seguir un poco más. Me besó delante del resto de chicos con toda la boca llena de semen cosa que me gustó bastante.

– ¿Te has sentido bien? me preguntó María.

– Si, si, sin problema. ¿Te gustó lo que hiciste?

– Me ha dado mucho morbo y me ha gustado mucho. verte así mirando me ponía muy cachonda y ahora al besarte me ha encantado. Tengo ganas de follar y me gustaría que me lo chuparas despues de que me lo follaran. ¿ lo harías?

– María, lo que me pidas…