Después de haberlo hecho con Don Manuel me di cuenta de que no había vuelta atrás, me transformé en una puta. Y al poco tiempo hice un trio, mi primera vez con dos machos

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Hola amigos y amigas soy yo Nicol jijiji, después de mi aventura con Don Samuel me di cuenta que ya no había vuelta atrás, me había transformado en un autentica putita sedienta y adicta al delicioso y caliente néctar de los hombres, ya no podía ni quería parar, necesitaba otra experiencia quería mas vergas gigantescas que me penetren por mis orificios y me bañen en leche caliente.

Unos días después de haber probado la verga de Don Samuel decidí salir de casería a una disco que estaba de moda y donde iban todos los que buscaban sexo ocasional.

Esta tarde estaba anormalmente caliente, mi conejito se mojaba de solo pensar que en unas horas más tendría una buena barra de carne metida entre las piernas.

Me di una muy rica ducha, prepare mi ropa mas sexy, un diminuto vestido con un gran escote muy apretadito que hacia saltar mis bellos senos, era tan corto que si me agachaba lo suficiente dejaba a la vista mi deliciosa vagina y eso me ponía muy caliente, el solo pensar que cualquiera que quisiera podría ver mi sexo y no solo verlo sino que también podía tocarlo y hacerlo suyo si lo deseaba.

Me coloque mi diminuto vestido y unas medias de portaligas pero sin braguitas ni sostén y unos zapatos de tacón fino, quería ser el centro de atención de todos allí.

Me maquille y me hice rulos, me coloque mi perfume preferido y salí del depa con un sola misión, “follarme una gran verga”.

Al salir del depa hice para un taxi, me di cuenta que ya era el centro de atención de todos en la calle, me subí y le dije al taxista la dirección.

El taxista era un hombre de unos 40 años muy delgado y muy desalineado, no dejaba de mirarme por el retrovisor yo me hacia como que no me daba cuenta y miraba mi celu.

En un momento cuando estaba mirándome decidí regalarle algo para que me recuerde, como estaba sentada justo en medio del asiento trasero abrí lentamente las piernas dejándole ver toda mi hermosa entrepierna para luego cruzarlas jijiji estoy segura que fueron los 5 segundos mas felices de su vida jijiji, su cara cambio y sus ojos se agrandaron como dos platos también vi como se relamía sus secos y gruesos labios.

Llegamos a la disco estaba llena, le pregunte cuanto era le pague y le acaricie la mano al pasarle el dinero le regale una sonrisa un gracias y un beso al aire, me baje estaba justo frente a la entrada, todos los hombres me miraban y supe que seria muy fácil encontrar quien me folle.

El guardia de la entrada me miro y quito la cuerda de contención.

– Hola guapa, pasa no necesitas estar en la fila.

– Uyyyy …. Gracias galán – al pasar a su lado le tome su cara y le di un beso en la mejilla.

Me sentía endemoniada, mi sexualidad estaba a flor de piel y todos lo notaban.

Entre estaba repleto de gente bailando, tomando, riendo y pasándola muy bien, di una vuelta por el lugar habían muchos hombres divinos no sabia a cual elegir, así que deje que ellos me eligieran jijiji.

Seguí dando una vuelta por el lugar pasaba por donde había mas gente quería jugar un poco, provocar, rozar a esos hombres y que ellos me rozaran me tocaran, que se aprovecharan de mi, estaba muy excitada, no tarde en sentir los primeros intrusos, sus manos apretaban descaradamente mis nalgas y uno mas intrépido logro acariciar mi vagina desde atrás y pude sentir su dedo entrar fugazmente en mi.

Eso me dio una pequeña descarga eléctrica y comencé a mojarme así que decidí ir a la barra a tomar algo, relajarme y probar suerte allí.

– Hola una cerveza por favor

– Una cerveza saliendo para la chica mas sexy de esta noche

– Jijiji gracias guapo

– De nada bella va por cuenta de la casa.

– Uyyyy muchas gracias, creo que vendré mas seguido

– Eso espero mamita.

Tome mi cerveza y me di vuelta para ver el ganado jijiji, a mi lado había un chico muy lindo pero estaba completamente ebrio y me hablaba pero no podía entender que decía, tampoco me importaba con lo ebrio que estaba ni se le pararía.

Pero frente a mi bailando había una pareja, ella muy bella el ufff… un bombón, lo miraba descaradamente y el se dio cuenta, cada vez bailaba mas sexy, la colocaba a ella de espaldas a el y frotaba su bulto en el trasero de ella.

Yo le sonreía me mordía los labios, me lo comía con los ojos.

En cierto momento ella se fue con una amiga (supongo que al baño) el se acerco a la barra justo a mi lado sin dejar de verme le pidió un trago al barman, me volvió a mirar y se acerco a mi oído.

– Hola primera vez por acá?

– Jijijiji Hola …. Si como sabes?

– Nunca te había visto por acá, estas sola?

– Si pero tu no por lo que vi.

– Jajajaja ella es una amiga nada mas, mi nombre es Pedro, quieres bailar?

– Mmmm…. soy Nicol, seguro que es una amiga solamente no quiero problemas

– Lo juro, vamos?

– Ok, vamos, veamos que tal te mueves jijiji-

Comenzamos a movernos con el ritmo de moda una canción que invita a frotarse y a calentar los cuerpos, se frotaba con descaro sobre mi trasero yo cerraba los ojos y me concentraba en sentir cada centímetro de este semental que estaba obviamente decidido a conquistarme.

Me di vuelta para ver su rostro y apretar mis senos sobre su pecho, el se movía deliciosamente bien, el aroma de su piel era increíble, colocaba su boca cerca de mi cuello y podía sentir su aliento agitado, sus manos comenzaban a tocarme primero mi espalda suavemente luego bajo y acariciaba mi cintura al ver que me gustaba aposto por bajar aun mas las manos y las coloco sobre mis nalgas, las acaricio y las apretó levemente.

– mmm …. Tranquilo, tan rápido quieres llegar al postre?

– Jajajaja – solo rió y siguió metiéndome mano.

Así estuvimos un par de canciones tocándonos frotándonos excitándonos, entonces me tomo de una mano y apresuradamente me llevo a un rincón donde comenzó a besarme apasionadamente, mi boca mi cuello, con una mano apretaba uno de mis senos con la otra acariciaba mi trasero por sobre el vestidito.

Yo lo abrazaba pero Moria de ganas de acariciar su verga, estaba por hacerlo cuando me dijo volvamos a bailar y sin mas me arrastro a la pista, una vez hay bailábamos mas pegados casi haciendo el amor nuestros movimientos ya eran evidentes de nuestra excitación.

De pronto escucho que lo saludan, al mirar veo a su amiga bailando con otro hombre que estaba increíble, que también era amigo de el, se saludaron y nos presento

– Nicol el es Cris, Cris ella es Nicol

– Hola mucho gusto Nicol, woow estas increíble, no puedo creer la suerte de este maldito, que pedazo de mujer.

– Jijiji muchas gracias tú no lo haces nada de mal bombón.

Seguimos bailando entre tragos y risas, en algunos momentos bailaba con Pedro y otras con Cris, que por cierto se notaba que estaba muy bien dotado, me lo dejo bien claro cuando me apoyaba cada vez que podía.

Cuando bailaba con Cris la ultima canción de la noche, se acerco a mi boca y me beso sin el mínimo de vergüenza, lo hizo tan deliciosamente que le correspondí, rodie su cuello con mis brazos y devore su boca, el 100% jugado con una de sus manos atrapo uno de mis pechos y lo comenzó a masajear buscando mi pezón para darle suaves pellizco.

De mi boca salían gemidos entre cortados por los besos de Cris y su lengua que entraba y salía de mi boca entrelazándose con mi lengua, lamia mis labios y también los mordía, pasaba su lengua por mi cuello y la llevaba hasta el escote lamiendo justo en medio de mis dos pechos que ya a esa altura estaban siendo manoseados por sus dos manos.

Estábamos en esa cuando siento que por detrás alguien toma mi cintura y me pega su bulto en medio de mis nalgas, giro mi cara asustada y con sorpresa para ver quien era y vi a Pedro sonriéndome, tomo mi rostro con una de sus manos y me beso hundiendo su lengua lo mas profundo que pudo.

Quede helada porque en ese momento descubrí cual era su plan, y la verdad me encanto.

Pedro apretó con fuerza una de mis nalgas y dijo :

– Creo que ya es hora de irnos a otro lado a seguir esta fiesta.

– Pues yo creo que es una magnifica idea que dices Nicol, quieres seguir la fiesta con nosotros dos?

– Mmmm …. Yo creo que esta fiesta recién esta comenzando.

Cris tomo una de mis manos y emprendió camino a la entrada Pedro iba detrás mío aun con una de sus manos apretando mi colita.

Fuimos al estacionamiento y antes de que me abrieran la puerta del auto Pedro se abalanzó sobre mi y comenzó a besarme yo lo besaba y como podía apretaba su verga por sobre el pantalón se notaba que estaba muy excitado, cuando el dejo de besarme Cris se acerco y comenzó a besarme igual pero no solo me besaba sino que metió una mano bajo mi vestidito llevándose una sorpresa al darse cuenta que no llevaba nada.

– Heyy pero bueno mira Pedro nos sacamos la lotería con esta hembra – levanto mi vestido dejando mi hermosa vagina al aire.

– Wooow jajajaja ya venias preparada, pues hoy tendrás todo el sexo que puedas soportar.

– Enserio? … me lo prometen?

– Es una promesa.

Abrieron la puerta entre y conmigo entro Pedro, Cris fue al volante y encendió el motor, Pedro estaba ultra caliente y yo mas aun nos besábamos y nos tocábamos, Cris nos miraba por el retrovisor y reía – jajajaja dejen algo para después.

Pedro tomo mi vestido y lo levanto hasta mi cintura, como pudo se agacho y comenzó a comerme mi vagina, lo hacia increíble yo gemía y con mis manos apretaba el asiento lo mas que podía, mordía mis labios, gemía, gritaba era genial, luego coloco dos dedos dentro y presionaba hacia arriba mientras con la otra mano frotaba rápidamente mi clítoris, solo basto unos segundos y acabe, tuve un fuerte squirt y mis jugos vaginales llegaron al tablero y el parabrisas, mi cuerpo temblaba y no podía parar de gemir ellos se miraban y se reían.

Estuve con la respiración entre cortada y gimiendo por unos tres minutos cuando pude recuperarme Pedro volvió a la carga esta vez metió tres dedos dentro de mi vagina y uno en mi culito y no solo eso sino que también pasaba su lengua logrando que volviera a tener otro orgasmo.

Lo que quedaba de camino, Pedro me fue masturbando tuve al menos tres orgasmos solo en el trayecto al motel aun no probaba una sola verga y ya me tenían en las nubes, sentía mis piernas tembrar y el interior de mis muslos muy mojados tanto que el asiento estaba completamente humedecido debajo de mi trasero.

Estacionamos y entramos los tres a la habitación, Pedro dejo el dinero en el compartimento y Cris comenzó a besarme Pedro se coloco por detrás levanto mi vestido y manoseaba mi vagina, Cris bajo la parte de arriba del vestido dejando mis pechos a su disposición los que no tardo en comenzar a besarlos y chuparlos, yo tomaba su cabeza y lo presionaba ligeramente para re devorara mis pezones, con mi otra mano tomaba la nuca de Pedro para que se acercara a mi boca y así poder besarlo mezclando nuestras lenguas y nuestras salivas.

Yo ya no podía mas necesitaba tener esas vergas en mi boca, coloque una mano en el pecho de Cris y otra en el pecho de Pedro y los empuje suavemente.

– bueno chicos ahora quiero ver esas vergas que me han estado frotando toda la noche.

Tome una almohada la coloque en el suelo y me arrodille desde esa posición no me perdí detalle viendo como quitaban sus cinturones y desabrochaban sus pantalones para liberar esas dos increíbles barras de carne dura.

Mi corazón se acelero al ver aquel delicioso buffet que comería esa noche. Pedro le tenia larga pero Cris la tenia no solo grande sino que ancha, no perdí mas tiempo y comencé a acariciarlas eran dos hermosas vergas perfectamente depiladas duras con sus cabezas brillantes por la humedad que ya tenían, mi boca se hacia agua y comencé a probarlas lamia la cabeza tratando de cubrirla con la mayor cantidad de saliva que pudiese mientras a la otra la masturbaba suavemente casi torturando a su dueño.

Sus gemidos se mezclaban con los sonidos que hacia mi garganta al tratar de comerme semejante pedazo de carne, mis chupadas se fueron turnando de una verga a otra tratando de dar el máximo placer posible a mis dos machos.

Cuando mi boca ya no podía mas me levante y tomándolos de las bolas los lleve a la cama, subí gateando sobre el colchón como una gata en celo y dándoles la espalda me puse en cuatro.

– Quien va hacer el primero en darme verga?

Con mi vista hacia atrás los vi a ambos abalanzarse sobre la cama, pero Pedro fue más rápido y tomo mi cintura con sus manos.

Cris solo rió y dijo – vale ganaste esta pero, pero el culo se hago yo.

Al escuchar eso un escalofrío recorrió mi espalda y no porque nunca me lo hayan hecho por detrás sino por el tamaño que tenía Cris.

Se sentó en un sillón que estaba al costado de la cama y se masturbaba lentamente, mientras tanto Pedro con su herramienta en mano pincelaba la entrada a mi vagina cada vez mas fuerte hasta que se detuvo, la coloco justo en la entrada y comenzó a presionar lenta y suavemente, al entrar su cabeza una electricidad invadió mi espina, empujo un poco mas y ya tenia media verga adentro a esa altura yo ya mordía las sabanas hundiendo mi cabeza en la cama un empujón mas y la clavo entera dentro de mi, un grito de placer inundo la habitación acompañado por un sonoro nalgazo que me hizo voltear para solo ver la cara de placer de Pedro que ya comenzaba con un ritmo frenético.

– SIIIII SSSSIIIII….. DAAA..MM..EEE FUERRR…TEEEEE….MMMMHHHHH….

– Así te gusta asiiii

– Siiiii hazme acabar otra vez, dame mas nalgazos, quiero ser su putita esta noche.

– Serás nuestra puta esta noche y todas las que queramos.

– Sii lo que quieran solo demen toda su leche.

Me tomaba de las caderas clavándome sus manos cada embestida era como una tonelada golpeando dentro de mi podía sentir como llegaba hasta el fondo de mi sexo y las paredes de mi vagina abrazaban esa verga formidable.

Miraba como Cris seguía masturbándose frente a nosotros y estirando una mano lo invite a follar mi boca, se paro camino con esa bestia entre sus manos, golpeo mi rostro con ella, la coloco entre mis labios y tomando mis cabellos entre sus manos haciendo un rodete comenzó a meter y sacar su verga de mi boca, la metía tan adentro como podía casi provocándome arcadas, con una mano le acariciaba las bolas, las tenia suaves y cubiertas de mi saliva.

Pedro se detuvo saco su verga de mi provocándome una sensación de vacío, tomo mis piernas y haciendo un movimiento me giro quedando boca arriba, ahora colocaba mis piernas sobre sus hombros y me penetraba sin delicadeza, Cris tomo mi cabeza con sus manos y también comenzó a penetrarme la boca esta vez la metía tan adentro que sus bolas golpeaban mi nariz y mis ojos se llenaban de lagrimas producto de que a duras penas lograba respirar, pero me encantaba de hecho apretaba su culo con mis manos para que la metiera mas adentro.

podía sentir como Pedro gemía cada vez mas rápido, resentía que acabaría pronto, pero se detuvo y la saco.

– AAAHHHH… aun no quiero acabar, te toca compañero.

Saliendo de entre mis piernas y dándome una fuerte palmada en mi trasero le cedió el lugar a Cris que rápidamente se acostó boca arriba y me ordeno sentarme sobre el.

Me incorpore pase una pierna sobre su cuerpo tome esa bella verga y la acomode sentándome despacio sintiendo cada centímetro entrar, era definitivamente mas ancha estaba abriéndose camino dentro de mi, comencé a temblar sabia que estaba por tener otro orgasmo y así fue cuando me senté por completo sobre el y sus bolas tocaron mi trasero estaba tan llena que no resistí y gimiendo con descontrol acabe, sin darme tiempo a nada me inclino hacia el recostándome sobre su pecho, para comenzar a taladrarme sin compasión, mi respiración entrecortada mis ojos casi en blanco mis manos apretando las sabanas decían que estaba en la gloria, Pedro al verme con la boca abierta y sumida en el éxtasis no dudo en comenzar a follar mi boca.

No se cuanto tiempo estuvimos así solo se que me moje tanto que en cada embestida su cadera chapoteaba en mis jugos produciendo un ruido tal como su aplaudiesen.

Cris se detuvo y dijo – es hora de probar ese culito.

Me hizo dar vuelta y sentarme nuevamente sobre el pero en esta ocasión su verga se abriría paso en mi apretado ano, estaba tan mojada y excitada que no era necesario ni  lubricarme ni estimular mi culito, así que acomode esa enorme cabeza en mi colita y empecé a sentarme, dude en seguir cuando su cabeza iba entrando, un fuerte dolor mezclado con placer me hacia quejarme, a cada centímetro necesitaba descansar un poco cuando la punta entro solo fue cuestión de darme valor y sentarme del todo.

Cuando lo tenia todo dentro me eché hacia atrás colocando mi espalda sobre su pecho, dejando mis piernas abiertas para que Pedro estimulara mi clítoris.

Lentamente comencé a subir y bajar acostumbrándome poco a poco a ese intruso en mi trasero, intruso que muy rápido me estaba causando placer.

Pedro frotaba majestuosamente mi botoncito que estaba hinchadito y delicado de tanto placer, pasado unos minutos mis movimientos ya eran cada vez más rápidos y podía sacar casi por completo esa verga de mi culito para luego de una sola sentada clavarla hasta el fondo.

Pedro colocándose entre mis piernas frotaba su verga sobre mi clítoris, yo ya adivinaba cual era su intención, mirándolo a los ojos hice un gesto como autorizándolo a que me penetrara por delante mientras su amigo me la clavaba por detrás.

Con un poco de esfuerzo logro entrar, no podía creer que tenia esas dos enormes vergas dentro de mi, ya mis gemidos eran de una autentica perra en celo, solo gritaba que me dieran duro, que quería terminar bañada en la caliente leche de sus vergas, SOYY SU PUTAAAA ¡¡¡¡¡  gritaba, mi descontrol era algo irreal toda esa situación era irreal, esas dos enormes barras de gruesas carne, con gruesas venas y enormes bolas estaban dentro de mi moviéndose juntas, llenándome como jamás lo había estado, el aroma a sexo en el ambiente era algo embriagador, el perfume de esos dos machos me ponían loca.

Tuve dos orgasmos mas mientras me penetraban los dos a la vez, ya mi cuerpo no daba mas, me sentía sin fuerzas, mi garganta se sentía raspar cada vez que gemía, mis piernas temblaban, mis manos ya casi no apretaban, era mucho el agotamiento que me provoco cada orgasmo, necesitaba para y descansar, pero mis dos machos estaban lejos de cansarse, por suerte para mi estaban apunto de acabar.

Primero Pedro se levanto y con su verga en mano me tomo de mis cabellos y me hizo chuparsela, lo hice casi como devorando el bocado mas delicioso del mundo, estaba en ello cuando Cris me dice que me quite que quería llenarme la boca con su leche.

Mmmm …. Leche caliente, decía dentro de mi ya quería saborear esa exquisitez.

Ambos se pararon sobre la cama y yo arrodillada con la boca abierta esperando el primero en darme mi premio.

Como la mejor escena de una pelicula porno, el primer lechazo fue a dar en mi boca seguido de otro a la altura de mi mejilla, otro en mi frente, otro sobre la nariz ya con menos fuerza en mi cuello y para terminar sobre mis pechos, la cantidad era obscena, parecía como si aquel hombre no hubiese tenido sexo en un largo tiempo, ese fue Pedro, Cris que aguardo su turno no fue muy diferente en cuanto a la cantidad eso si casi todos los chorros de leche dieron en mi cara, dejándola completamente cubierta de una espesa y caliente capa de semen, semen que rápidamente comencé a recolectar con mis dedos para llevármelos todos  a la boca, juntando una gran bocarada, la que les mostraba haciendo gárgaras, ellos reían y lo celebraban, mientras con mis manos seguía masturbándolos, me trague toda aquella leche y fue deliciosamente increíble, después de tragar comencé a chuparsela a Pedro para sacarle hasta la ultima gota lo mismo a Cris.

Les deje sus vergas limpiecitas, relucientes, cayeron sobre la cama elogiándome por lo buena putita que era, yo solo reía y les decía gracias, estaba completamente extasiada pero mi colita y mi vagina estaban un poco adoloridas, necesitaba descansar.

Y así lo hicimos por un momento descansamos pedimos unos tragos al cuarto fumamos unos cigarros y mis machos ya estaban listos para otro round, y yo jijiji yo quería mas leche.

Esa noche se turnaron para darme por el culo, a veces lo hacia con un solo macho a la vez, acababa y enseguida el otro ocupaba su lugar pero varias veces me follaron entre los dos, me lo hicieron en la cama, contra la pared, en la ducha, en el sillón, en todos los rincones de esa habitación, había sido una de mis mejores noches hasta el momento.

De regreso a casa nos fuimos riendo y hablando de lo bien que lo pasamos, me dejaron en mi depa los bese apasionadamente les acaricie sus vergas y me despedí.

Apenas llegue a mi cama ni me saque la ropa estaba exhausta, creo que me dormí con una enorme sonrisa en mis labios.

Esa fue mi primera vez con más de un hombre y no seria la ultima ya que Don Samuel me tenía una gran y deliciosa sorpresa.

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