Le dejé una sorpresa en el baño a mi hermano

Me metí a bañar dejando la puerta entre abierta del baño y todos quisieron entrar para hacer sus necesidades al despertarse, me moría de ganas de ver a todos y que me vieran desnuda pero el que más me interesaba en estos momentos era mi hermano, el solo escuchar su chorro de orina al entrar a la taza de baño me calentó muchísimo que me puse a enjabonar mis tetas, mis piernas y mi culo, cada vez que lavaba una parte de mi cuerpo me ponía de frente a la cortina para que mi hermano pudiera ver un poco más de mí.

Como no quería que mi tanga se mojara la deje sobre mi toalla, pero mi hermano no la vio o no le hizo mucho caso pensando en que era una tanga limpia.

Cuando salí de bañarme deje mi tanga sucia en las llaves de la regadera y me fui a mi cuarto a cambiarme, cuál fue mi sorpresa que en mi ropa sucia vi una de mis tangas en el piso y al agacharme por ella note que tenía semen en ella pero mi hermano había salido y mi papá estaba en el pasillo. No le di mucha importancia y aun así lo la mí y chupe con muchas ganas, me vestí lo más provocativa que pude me puse unos cacheteros blancos que se pierden un poco entre la mis nalgas, no me puse brasier, use una playera pegada de cuello en V para que mis pechos se pudieran realzar un poco y un mallon negro para que mi cachetero blanco se notara más fácil.

En la tarde después de comer recordé mi tanga en el baño, fui por ella ya no estaba en la regadera, así que supuse que mi hermano por fin la tomo.

Más tarde me cambie para hacer ejercicio me puse un brasier deportivo y un short negro sin ropa inter debajo de ella me fui al cuarto donde tenemos un mini gym, y mi hermano estaba en el cuarto, estaba sin playera levantando pesas.

El simple hecho de pensar en lo que podría pasar hizo que mis pezones se pusieran duros de la emoción, él estaba por terminar y cuando yo entre me puse hacer estiramientos delante de el para que viera mi culo frente a él.

Antes de irse le dije que si me ayudaba a estirar mis piernas me tumbe en la alfombra y alce mis piernas, mi vagina se marcaba tan rico ya que no traía ropa interior abajo así que el olor que se presentía en el cuarto era de mi vagina húmeda, note como a mi hermano se le ponía dura su verga y eso hacía que mis pezones se pusieran más duros, mi short más húmedo que nada él lo noto y me dijo que si mañana le podría volver hacer unos hotdogs, yo le sonreí y recordé algunos consejos que me dieron en los correos.

Me levante del suelo y le dije solo te gustaría unos hotdogs acercándome a él, se puso muy rojo y me dijo si pues que más me puedes dar.

En eso no me aguante más y le toque su verga dura y le dije, tu dime que te gustaría que te dé porque yo veo algo que a mí me gustaría recibir.

El – No me toques ahí, somos hermanos y nos pueden ver.

Yo – Tranquilo estamos hasta abajo y si vienen se escuchara.

El – Pero somos hermanos esto no está bien Karen.

Yo – Entonces no te gusta esto, porque veo que abajo se te puso muy feliz de esto que está pasando.

El – Pero veo que tus pezones no están tan tristes al contrario o tienes frio.

Yo – Cual frio si estoy más caliente que nunca.

Nos comenzamos a besar como dos novios con ganas de coger, metí mi mano a su pantalón y la suya la metí en mi short para que notara que no traía nada abajo, nos comenzamos a masturbar mutuamente y provoco que me llegara un orgasmo increíble, más que los que logro yo sola.

No deje que me dijera nada y lo volví a besar, poco a poco me baje y tire de su pantalón para mamarle por fin su verga que ya estaba muy dura y caliente, valla que es más grande de lo que yo pensaba, no me cabía toda en la boca pero se la mamaba con ganas de arrancársela.

Pase mi lengua por toda su verga erecta y me metía sus huevos en la boca uno por uno, le daba un lavado de verga impresionante, el solo gemía de placer, solo pudo decir me la mamas mejor que mi novia (a la que también le traigo ganas).

Me levante mi brasier y puse su verga entre mis tetas para hacerle una rusa, apreté su verga entre mis pezones y de lo grande que es le daba besos en su cabecita y pasaba mi lengua haciendo círculos en ella seguía masturbándolo con mis tetas hasta que me dijo que quería terminar en mi boca.

Tome su verga con mis manos para darle besos a su huevos me los metía en la boca lo más que podía, hasta que me metí toda su verga en la boca, las lágrimas me salían y la baba se me escurría por los lados de mis labios me sentía súper caliente, hasta que por fin termino llenándome se semen la boca el cual no pude contener y se derramo a mis tetas.

Escuchamos que mi mama le gritaba y me dijo que si podíamos repetirlo, le dije que en otra ocasión haríamos más que una simple chupada de verga, limpie su verga que aun tenia semen en ella y lo bese, mientras recordé que mi tanga del baño ya no estaba, me acerque a su oído para decirle quédate con mi tanga, para que nunca olvides mi olor y me dediques todas las que quieras.

Me respondió ahorita que suba paso a tu cuarto por ella, me dio una nalgada en mi culo y se fue.

Eso me dejo muy pensativa porque él se refería a la tanga de mi cuarto entonces…

¿Dónde está mi tanga del baño?

Me puse mi brasier y me fui a mi cuarto a cambiarme para regresar hacer ejercicio.