Me calientan los tíos más chicos que yo ¡Me dicen la nalgona!

Son la una de la mañana y sigo despierta pensando en que deseo que alguien me toque, que me acaricie, que me haga vibrar. Estoy tan caliente que ya no se ni qué hacer…

Por más que me masturbo no quedo satisfecha; a pesar de ver esos vídeos caseros del Twitter que anteriormente hacian que me mojara ¡no es suficiente!

Necesito una rica penetración, de repente al buscar por la internet veo una página que dice «busco mujeres para encuentro, no importa la edad ni el físico», en ese momento mi cerebro reacciona y en lo primero que se me vino a la mente fue ¡ya encontré con quién coger! A pesar de la pena, el miedo y sin pensarlo envie un mensaje a un perfil desconocido. al ver que me contestó rápidamente me emocione, y como niña precoz sentí como mi cuerpo empezó a descontrolarse y con lo excitada a lo desconocido sentí como mi vagina se empezó a mojar rápidamente.

Desconocido:

-hola, que tal!

Gatita 69:

– ¿qué buscas?

Desconocido:

– diversión, megustan todas las mujeres no

importa ni edad ni fisico.

Garita 69:

-Es mi primera vez en esta página, busco diversión

y discreción.

De inmediato le di mi número pensando que en ese mismo momento pasara lo deseado, que me penetrara sin importar la distancia que nos separaba. Intercambiamos fotos de todo tipo y me gusto, no aguante las ganas y me masturbe pensando en ese grande y hermoso pene.

Al siguiente día no dejaba de pensar en como me cogería y pensando si en verdad sería como se describió…. fue muy placentero.

Platicando con él me decidi a llamarle una vez más, no entiendo por que pero cada que escuchaba su voz mi vagina se mojaba, empezamos a hablar de sexo lo que yo quería que me hiciera y lo que a él le gustaba. Era demasiado exitante, deseaba tanto que ya me cogiera y por fin acordamos una fecha, hora y lugar.

Ese día tenía muchos nervios, me daba miedo el pensar que no le agradará en persona. Nos quedamos de ver en un bar de ambiente tranquilo,

esperaba nerviosa pensando no que no llegaría, me decidí a pedir una margarita y por fin él llegó, lo mire y dije con mi cara de asombro «cosita hermosa», el era un hombre delgado atractivo y dije en mi mente ¡oh por dios!… ¿de verdad me hara todo lo que dijo?.

Esperando lo inesperado exclamó: ¿te gustaría ir a un lugar más privado? Claro que sí, en ese preciso momento nos dirigimos al hotel y estando ahí se desvisto y yo solo lo miraba, me pasme tanto que casi olvidaba que llevaba un obsequio para él, era una tanga color azul turquesa de inmediatamente se la puso lo mire y no podía creer lo rico que se veia ese pene tan hermoso que una vez vi por fotografía. No podía esperar más, deseaba que me penetra y con los nervios no podía ni desvestirme (no quería que notara mis alocadas ganas que sentia), posteriormente me empezó a tocar, a besar y acariciar; en ese momento estabamos empezando y sentía como escurría de excitada mi vagina. Cuando por fin me penetro me dolió un poco, era muy grande su miembro pero se sentía riquismo el tenerlo dentro de mi (lo disfrutaba tanto que gemia y gemía de placer) tenía ganas de que me pusiera ese hermoso miembro en la boca y que me echará su semen llenandome toda la boca. Después de menterlo a mi vagina me puso de muchas posiciones y solo sentía lo rico que entraba en mi vagina una y otra vez «yo ya me había venido más de una vez». Después de saciar nuestras ganas entro a la ducha y se dió un baño, salió y me empezó a meterme una vez más su verga y dije: ¡guauuu! ¿de verdad lo disfrutara? En un momento de descuido empezó a tocar lentamente mi ano después sentí como empezó a penetrar mi pequeño y delicado agujerito; fue un dolor muy fuerte pero después lo disfruté tanto que no quería que parará, quería que me cogiera por mi ano muchas veces más, por mi mente pasaba las ganas de sentir su lechita dentro de mí y que me destrozará una y otra vez con ese gran pene.

Por fin saciamos por completo nuestras ganas… fue el mejor sexo de mi vida, me sentí en un cuento de hadas que nunca quisiera que terminara, solemnte fue … el ¡mejor sexo en mi vida!