Mi hermana y sus ideas demasiado calientes ¡Me tienen loco!
No me he fijado nunca en mi hermana. Nuestra relación ha sido normal, nada extraño en una relación familiar típica. Es 3 años menor, muy joven aún para pensar que tuviera necesidad de auto satisfacerse, pero pensándolo bien, tampoco es algo que se haga solo por ausencia de relaciones.
Pero en mi mente no había ese concepto de ella. No podía imaginarme que en la intimidad pudiera ser tan cerdilla, a niveles muy superiores a los míos.
Y todo fue casual, un accidente tonto derivado de un cúmulo de coincidencias.
Llegue a casa un día que se suponía que estaba fuera, un día que mis padres tampoco estaban. Mi hermana se había quedado sola y como broma mis padres le habían advertido que no podía traer chicos a casa. Quizás no sabían que la pequeña de la casa, no necesitaba novios para sus fantasías.
Entre sin avisar. No soy precisamente escandaloso, ni doy gritos para advertir que he llegado. Sentí la casa muy silenciosa, y me imaginé que mi hermana había salido. En silencio, repasé rápidamente si podía tener aquella tarde para mi. La puerta de la habitación de mi hermana estaba medio abierta, entre sin pensármelo. No estaba.
Pero algo me llamó la atención. Aunque decir que me llamó la atención es decirlo suavemente. En realidad fue una hostia en la cara. Encima de la rosa colcha de la cama de mi hermana, todo un surtido de juguetes. Un pequeño vibrador, cremas lubricantes y una polla blanca de goma que tenia un tamaño realista. Sin saber porque, la cogí. Era de un tamaño muy natural, nada extremo, podía ser una reproducción de mi propia polla perfectamente.
Era algo perverso ver entre peluches y personajes de anime, aquellos juguetes sobre la cama. Mi hermana se lo había pasado bien a solas.
Intenté salir de allí, mi hermana estaba en casa y la situación era muy comprometida. Pero en ese momento la escuché en el pasillo. Claramente se escuchó como cerraba una puerta caminaba con paso suave y cerraba la puerta de la calle con llave.
– Mierda! – Dije casi en voz alta.
Me daba cuenta que venia del lavabo de mis padres. Y que el rato de diversión comenzaba ahora. Era imposible salir de allí. Y si me pillaba todo iba a ser muy comprometido.
Ni me lo pensé, me me ti bajo la cama de mi hermana.
Pronto vi que fue un error. Un error extraño y excitante.
Vi entrar a mi hermana por la puerta, enrollada con una toalla. No podía verla entera, solo hasta la cintura, y en cuanto se acercó, solo pude ver sus pies. Por suerte, el cuarto de mi hermana es grande, y la cama también. Había dejado la puerta abierta, y si por alguna razón daba la espalda a la entrada de la habitación, podría salir de allí sin generar una situación embarazosa.
Pero en el momento clave, justo cuando podía irme, algo me hizo quedarme.
Mi hermana tiene un ordenador de sobremesa enorme, una pantalla de gran tamaño con la manzanita abajo, fruto de sus buenas notas en estudios de diseño. Estaba encendido, y en la pantalla se pudo ver claramente como dejaba caer la toalla. La cam estaba encendida. Solo deseaba que no estuviera grabando. Puso la imagen a pantalla completa, y tomo la cam con sus manos. Me fui hasta el otro extremo de la cama para que no pudiera verme en la pantalla.
Pero claro, no pude evitar buscar una posición en la que pudiera mirar la pantalla. Aquel espectáculo me llamaba mucho la atención.
Debia haber puesto la cam en la cama, pues se la veía muy cerca, desde la nariz, hasta la cintura. Se le veían los pequeños pechos al aire, y las braguitas grises. En la mano la polla de goma con la que jugaba.
La iluminación era perfecta, entraba por la ventana una luz blanca tamizada que hacia que su piel resaltara, y unido a la calidad de la pantalla, tenia una vista previligiada de lo que hacia.
– Te gustaria que te la chupara?- Dijo mi hermana mientras se llevaba la punta del juguete a la boca.
A otro quizas le sorprendería oirla decir eso, pero yo estaba acostumbrado.Evidentemente no a escucharla decir que quiere comerse una polla, pero si a escucharla decir en voz alta lo que piensa, lo que va hacer, o lo que le diria a otro. Hablaba sola como los niños pequeños cuando juegan. Desde bien pequeña. Así que no solo iba a verla, iba a escuchar todo el concierto de su fantasía sexual.
Se puso a cuatro patas acercando su cara a la cámara, mientras chupaba la polla, hasta el punto de que solo se veia la boca y la polla entrando y saliendo.
– Te vas a correr? No aguantas?eh!!!!- Decia en voy muy sensual y baja.- Te gustaría verdad?
Se aparto de golpe y se giró, poniendo su trasero en posición de recibir un buen anal. empezó a jugar con sus glúteos y separarlos. Apartó las braguitas y pude ver claramente su ano blanco.
– A no!!! tu eres más perverso… Tu quieres meter por aquí.
Empezó a jugar con su dedo en el ano. Tomó el lubricante y se metió un poco en el dedo, para luego meter la punta de la polla de goma.
– Diós!!! que cachonda estoy… ufff, pero esto tendrá que esperar, aún soy virgen ahí.
Donde habia aprendido mi hermana a poner esas voces de actiz porno 5 extrellas? si me iba a poner cachondo solo de oirla.
Se dió la vuelta y boca arriba se quitó las braguitas y hacercó mucho la cam a su coño. Eso era lo que tenia que haber estado haciendo en el baño…. tenia el coño recien depilado, se veia aun ligeramente sonrosado.
Lo siguiente, fue todo un recital de exploraciñon vaginal. Pude ver por la pantalla, todas las direcciones y aperturas del coño de mi hermana. Ya se lo habia visto mejor en 5 minutos a ella, que a cualquiera de mis novias.
Ahora se estaba machacando de lo lindo con dos dedos, jugando con su enorme clitoris con la otra mano.
– Joder…. como estoy? lo has visto?
Se sacó dos dedos de dentro de su coño y los acerco a la cam. Estaban brillantes, humedos y al separarlos se podia ver claramente que el flujo corriaentre ellos.
– Ven, veras…..
Cogió la cam, y se la acercó a la cara, y chupó sus dedos humedos…..
– Estaria bien que en lugar de mi corrida fuera la tuya…. te gustaría, verdad?
Joder…. era imposible no correrse con una hica así.
Volvio a dejar la cam en su sitio, pero esta vez un poco más alejada, ahora podia verla casi completa, con las piernas suspendidas en el aire y la polla de goma empezando a entrar.
Escucharla gemir, fue una autentica tortura. Increible la forma en la que gritaba, se contorsionaba y se machacaba el coño con la polla. Podia ver claramente como los fluidos de su interior impregnaban la polla. La habitación olia a coño, a sexo, a orgasmo. Mientras se metia la polla bien a dentro, ella hundio la cabeza en la cama, tapandose la cabeza con una almohada y gritando como una desesperada. Era mi momento, tenia que salir de allí.
Pero la visión de las excenas desde la pantalla, me tenia confundido, y cuando salí lo hice encontrandome frente a sus coño abierto. No pude evitar pararme y observar aquella excena en directo. Los fluidos de su coño recorrian todo el trayecto hasta su ano. La cama estaba manchada, y el sonido de la polla entrando, era directamente el de un chapoteo. Era la misma sensación que cuando habia tenido yo sexo y habia continuado follando despues de correrme dentro de alguna chica.
Mi hermana se agitaba violentamente, culpa del orgasmo, la camara se destabilizó y calló rodando de costado sobre la cama. Me giré y vi mi cara tonta viendo como mi hermana terminaba de correrse…. Era el momento de huir.
No pude evitar pararme en el pasillo. De lejos, escondido, podia aún ver la pantalla, pero no a ella. Ella ya estaba relajada, y metía la polla poco a poco. Pude ver como se la sacaba y como enseñaba su coño habierto a la camara.
– No has podio evitar correrte dentro eh!!! mira como sale…. Ufff… esta todo peridodo.
Metio un dedo suyo y los fluidos empezaron a salir…. Habia tenido mas que suficiente. Tenia que conseguir bajar mi polla que estaba como nunca habia estado. Me meti en mi habitación intentando dejar la puerta como estaba, pillé la PS, los auriculares y me undí en el puff de espaldas a la puerta intentando que no se me viera mucho. Los siguientes minutos los dedique en cuerpo y alma a jugar freneticamente y a quitarme de la cabeza aquel coño corriendose de forma tan excandalosa.
– Cuando has llegado?
Mi hermana estaba detrás mio y me había tocado para llamarme la atención. No escuchaba nada.
– Como? – disimulé.
Frente a mí, mi hermana estaba en pantalones cortos y sujetador. Algo normal. Que tuviera las mejillas encendidas y una medio sonrisa tonta en la cara.
– Te vas a quedar sordo…. ¿que cuando has llegado? ¿no te he oído?
– Pues eso te iba a preguntar.- hice cálculos rápidamente.- Llevare como 30min y no había nadie en casa.
– ah ya….- y se fue.
Seguramente alguno se preguntará si estaba grabando un video. Si, era un video, aunque nunca supe con que intención… y sí me pilló…. pero eso ya es otra historia.