Quiero que mi esposa me ponga los cuernos

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Animo a mi esposa a que me ponga cuernos

Soy gerente de una pequeña empresa de fabricación de piezas de electrodomésticos en el área de Atlanta, en Georgia, y ​​viajo fuera de la ciudad un día todas las semanas… Estos viajes me dan la oportunidad de cambiar de aires… El único problema es que mi esposa, July, y yo estamos acostumbrados a tener relaciones sexuales todos los días, a pesar de que tenemos dos hijos y ya con treinta y cuatro años.

Mi polla es pequeña, mide apenas 12 cm de largo cuando está tiesa, pero yo fui el primer y único hombre en follar a July, y ella nunca se ha quejado a pesar de que sabe que es pequeña… Siempre estoy sólo en la habitación del hotel, y generalmente miro los canales de porno suave para masturbarme y luego dormir.

En un viaje estuve en un hotel de Mississippi para una estancia de dos noches y al poner mi ropa en el cajón me encontré con un libro de bolsillo bastante estropeado de Penthouse… Contenía docenas de relatos que habían sido publicadas en esa revista, y no pude resistir la tentación de leerlo.

Muchas de las relatos eran sobre parejas de cornudos, y aunque sabía que era un cornudo, nunca supe realmente lo que significaba… Sabía que un cornudo es un hombre con una esposa infiel, pero las relatos ampliaron la definición a los hombres que participan activamente con sus esposas entregándolas a otros hombres para que se las follen, limpiando el semen de los coños de sus esposas cuando estos se corren en sus coños y volviéndose sumisos a la esposa y sus amantes.

Estuve despierto la mayor parte de la noche leyendo la mitad de ese libro y luego leí la otra mitad la noche siguiente… Me masturbaba dos veces cada noche solo de leer esos relatos.

Por primera vez en mi vida, la idea de otros hombres follando con July se estaba volviendo muy excitante para mí, pero sabía que esto nunca sucedería… Ella era virgen cuando nos casamos, y a pesar de la activa vida sexual que tenemos, nunca permite el sexo oral, ni usa malas palabras, ni mucho menos habla sobre follar con otros hombres.

Cuando llegué a casa busqué en Internet sitios de relatos porno que incluían el género cornudo… Encontré algunos y seleccioné los mejores relatos y los leí una y otra vez… Estaba buscando argumentos atractivos y realistas que me permitieran explorar mis fantasías sobre otros hombres follando con July.

Después de varios meses leyendo esos relatos, se me ocurrió intentar escribir algunos… Las dos primeros que escribí fueron muy flojos y recibí muchos comentarios críticos de lectores… Aprendí que a los lectores les gustaba mucho que les contase todo con detalle.

Seguí escribiendo y publicando relatos y me dí cuenta de lo difícil que era hacerlo de una manera que los lectores los pudieran encontrar excitantes.

Buscaba que al leerlos se calentasen, como yo, con los personajes en busca de tener relaciones sexuales con otros amantes y las situaciones más obscenas posibles en el que el marido cornudo (que fantaseaba ser yo) chupaba las pollas de los amantes de sus esposas, delante de ellas para mayor degradación.

July y yo seguíamos teniendo relaciones sexuales frecuentes y buenas, por eso a veces me siento como un verdadero pervertido por obtener un placer sexual adicional al escribir mis relatos.

Juzgo mis propias relatos por la facilidad con que me hacen correr, y casi siempre me masturbo al escribirlas… Ahora, me sentía bastante bien con mis relatos publicados… Y un día, sucedió algo que me hizo sentir aún más seguro de que mis relatos son eróticos y tentadores, al menos para algunos lectores, como les explico a continuación:

Un viernes por la tarde, July había llegado a casa un poco más tarde del trabajo, y yo también llegaba tarde… Los niños estaban viendo la televisión, así que subí a buscarla… Nuestra habitación tiene un pequeño hueco donde hemos puesto un escritorio que July usa como su oficina en casa… Noté que la pantalla de su ordenador estaba oscura pero encendida.

Caminé hacia allí y al mover el ratón, la pantalla se iluminó… Me sorprendió lo que vi… Ella estaba en uno de los sitios de relatos donde publico los míos y estaba leyendo precisamente uno de ellos… Era una historia sobre una esposa que es follada por el jefe negro de su esposo, un tema típico en la literatura cornuda.

Quise alejarme para que ella no supiera que vi lo que estaba leyendo, pero en esos momentos salió del baño y se dio cuenta de que estaba mirando su pantalla y me preguntó:

– “¿Qué estás haciendo ahí mirando mi ordenador?… Nunca quise que me vieras mirando esas porquerías… Lo siento mucho, cariño… Puedo explicártelo.»

July estaba creando todo un drama por su cuenta, porque yo no estaba molesto por eso… Rápidamente pensé en una forma de evitar su enfado y preocupación y le dije:

– “Accidentalmente golpeé el escritorio y la pantalla se iluminó, y sucedió antes de que salieras del baño… ¿Qué es lo que estás mirando que te tiene tan molesta?»

Corrió y apagó su ordenador… Se puso a sollozar y sus lágrimas fluían de sus ojos… Luego, un poco más calmada, me dijo:

– «Voy a enseñártelo en un minuto, pero primero déjame explicarte… Tuve que trabajar hasta un poco tarde en la oficina esta noche, y después de recoger para irme, me detuve en el escritorio de Norin para decirle ‘buenas noches’… Ella estaba sentada en su escritorio con su mano bajo la falda y parecía que se estaba masturbando… La sobresalté y ella se disculpó y me explicó que estaba leyendo algunos relatos de cornudos en uno de los sitios pornográficos que visita y la excitaron.»

July hizo una pausa para recuperar el aliento, enjugó algunas lágrimas, y continuó explicándome:

– «Nunca antes había oído hablar de lo que hace un cornudo, así que me senté a su lado y leí un poco de la historia, después de que ella sacó la mano de su falda… Perdóname, Tim, pero lo poco que leí me excitó un poco y memoricé el sitio web y el nombre del relato para poder leerlo en casa… No quería que Norin supiera que estaba leyendo esas cosas o que tenía algún interés en ellas… Acababa de leer un poco del relato cuando tuve que ir al baño… Cuando salí, te encontré parado aquí, y eso es todo… Lo siento mucho, cariño.»

La abracé con fuerza para calmarla y le dije:

– «No te enfades, cariño, no es el fin del mundo… Eres una mujer adulta y no tienes que avergonzarte de leer esas cosas… Y ahora también tengo un poco de curiosidad al respecto, así que podemos sentarnos y leer el relato juntos si es tan excitante como dices… Incluso podría ser un gran preludio de nuestro sexo esta noche.»

Parecía un poco aliviada, pero aún se sentía avergonzada por mi oferta… July ya estaba en ropa interior, así que me quité la camisa y los pantalones y acerqué otra silla a su ordenador… Yo también quería estar en ropa interior para que ella pudiera ver mi excitación al leer el relato y que estaba bien que nos calentáramos juntos de esta manera… Comenzamos a leer el relato y como yo lo había escrito, me dediqué a observar a July para ver qué la excitaba más.

El primer lugar donde se retorció en su silla excitada, fue durante la escena en la que el jefe y otros hombres negros bailaban con la esposa y le acariciaban el culo y las tetas mientras la besaban.

Esperé hasta que me miró y me apretó mi polla, que la tenía tiesa bajo mi ropa interior… A partir de ese momento, July se desbordó de lujuria, y cuando leímos la primera escena de sexo, describiendo al jefe follando a la esposa y estirando su coño blanco con su enorme polla negra, July comenzó a frotarse su coño.

Por lo general, nunca hacía eso frente a mí, así que sabía que estaba muy excitada… Ella me miró de nuevo y para entonces yo tenía mi mano bajo mi ropa interior, acariciándome lentamente mi polla, con una mancha húmeda de precum en mis calzoncillos.

Continuamos leyendo el relato donde el jefe le dijo al esposo que chupara la gran carga de esperma que había tirado dentro del coño de su esposa… En ese momento, July se estaba tocando abiertamente su propio coño, y cuando me miró vio que me había bajado mis calzoncillos.

Cuando me vio así, la escuché murmurar en voz baja:

– «Estoy muy caliente, Tim.»

Yo estaba a punto de eyacular pero me contuve porque quería follarla en la cama después de terminar de leer el relato… La última escena que leímos esa noche fue cuando el esposo luego chupó la gran polla negra del jefe y la limpia de su semen y los jugos de la esposa.

– «July, vamos a la cama ahora mismo», le dije excitado.

Sólo tardamos medio minuto en cerrar la puerta, quitarnos la ropa interior y meternos en la cama… Empujé mi polla dura como una roca en el coño muy húmedo de July, y ella envolvió sus piernas alrededor de mis muslos y las flexionó para que se la metiera bien profunda… July estaba gimiendo y palpitando con una pasión que nunca había visto antes, y sólo tardé un par de minutos en perder el control y disparar una gran cantidad de esperma en su coño, justo cuando ella también estaba teniendo un orgasmo.

July nunca había permitido el sexo oral, pero ahora sabía que era un momento y una situación perfectos para iniciarlo con ella… Entonces, después de que ella liberó sus piernas de alrededor de mis muslos, rápidamente me moví hacia abajo y cubrí sus labios vaginales peludos y empapados de semen, con mi boca antes de que pudiera detenerme.

Esa fue mi primera vez chupando su coño, y ella estaba rezumando mi gran carga de esperma en mi boca… Había escrito sobre chupar el coño así docenas de veces, pero el olor, el sabor y la textura de su coño mojado era mejor de lo que imaginaba.

Estaba hambriento chupando y lamiendo sus labios vaginales y al principio, ella, con sus manos, ofreció una resistencia simbólica… Pero luego las colocó detrás de mi cabeza y apretó mi boca contra su coño… Justo entonces la oí gemir en voz alta… Estaba teniendo otro orgasmo y sus jugos y mi semen inundaron otra vez mi boca.

Ella dijo sin aliento:

– «Joder, Tim, sigue chupando mi coño… Me gusta mucho… No puedo creer que nunca hayamos hecho esto antes… Y te estás comiendo tu semen… Que caliente me tienes.»

Luego nos abrazamos en la cama… Estaba apoyada en mi pecho mientras yo frotaba sus grandes tetas y ella acariciaba mi polla arrugada, todavía húmeda… Nunca antes había estado dispuesta a tocarme de esa manera hasta que me hubiera limpiado… Nos estábamos besando apasionadamente, y me di cuenta de que July todavía estaba excitada.

Rompimos el beso por un minuto y ella dijo:

– «Nunca hubiera imaginado lo estimulante que sería leer relatos como esos y sé que los dos nos dejamos llevar… Tienes un regusto de mis jugos y tu semen en tu boca y ni siquiera me importa besarte… Te vi muy excitado cuando el relato describió al esposo chupando el semen del jefe del coño de la esposa, y también cuando chupó esa gran polla hasta dejarla limpia… No tenía idea de que te excitarías imaginando algo así.”

Yo estaba muy feliz por el cambio de actitud de July con respecto al sexo… Quise hacer comentarios que alentaran su forma de pensar más liberal y por eso le dije:

– «No sé qué me pasó, cariño, pero tengo que admitir que realmente disfruté leyendo ese relato… Y disfruté mucho de chuparte el coño después de que follamos… Francamente, deseo hacerlo una y otra vez.»

– “Lo harás siempre que te apetezca”, me respondió July.

– «¿Y qué hay de ti, cariño?… Comenzaste a frotarte y tocarte el coño cuando la mujer estaba siendo follada por la enorme polla negra del jefe, y luego otra vez cuando el marido limpió su coño lleno de esperma con su boca… Puede ser difícil para que lo creas, pero cuando estaba chupando tu coño, casi sentí que era yo ese esposo en el relato.»

Entonces July dijo:

– «Me sorprende que te exciten cosas tan desagradables, pero a mí me pasó lo mismo… Me sumergí tanto en el personaje de la esposa en el relato que sentí que todas esas cosas me estaban sucediendo… Lo siento, cariño, pero sentí que esa gran polla negra estaba follando mi coño.»

Esa noche tuvimos sexo nuevamente y luego acordamos continuar leyendo las relatos todas las noches antes de dormir.

Durante las siguientes semanas leímos muchos de mis relatos, pero también seleccioné relatos de otros autores que sabía que eran igual o incluso más excitantes.

Nuestro sexo estaba mejorando cada vez más… Además de exigirme que siempre le chupara el coño, ella también comenzó a chuparme la polla, incluso después de que la follara y estaba mojada con nuestros fluidos.

Pero no importa cuán buenos sean los relatos del otros autores, July siempre me pidió que leyésemos mis relatos, sin tener idea de que yo era quien los había escrito… Creo que sentía cierta familiaridad entre el personaje de la esposa con ella misma tales como el color del pelo o de los ojos, su estatura y peso, sus pechos y coño… Y todo eso le facilitaba fantasear pensando que era ella la protagonista del relato.

Una noche después de terminar de follar, ella me dijo:

– «Tim, me gustaría hablar algo contigo y, por favor, no te enojes… Sabes que en algunos de los relatos las parejas fantasean durante el sexo, y el esposo hace el papel de un amigo o jefe bien dotado, y la esposa imagina que está follando a ese otro hombre… Me gustaría que lo hagamos si no le importa.»

Hacia tiempo que estaba esperando que July me dijera esto y estaba eufórico por ello… Antes de responder pensé en cómo podría mostrar un poco de resistencia, al mismo tiempo que sembraba la semilla para un futuro encuentro cornudo.

Entonces le dije:

– “¿Estás segura de esto, cariño?… Me encantaría interpretar un papel así contigo y sería muy divertido… Pero podría llevarnos a querer más, al igual que en las relatos… ¿Estás dispuesta a correr ese riesgo?… ¿Ya tienes a alguien en mente?

Ella respondió:

– «No seas tonto, Tim… Podremos controlar nuestras emociones y simplemente disfrutar del sexo entre nosotros… Podemos elegir nombres de hombres que ambos conozcamos para que sea más emocionante, y debes saber que no tengo intenciones de realmente follar a otros hombres… Sólo fantasear para calentarnos mucho.»

Incorporamos estas fantasías y tuvimos sesiones fantásticas de folleo… Siempre comenzamos leyendo un relato de cornudos juntos… Seleccionamos muchos nombres de hombres diferentes que ambos conocemos, incluidos mis buenos amigos, los esposos de sus amigas, algunos de nuestros compañeros de trabajo e incluso hombres casados ​​del vecindario y de nuestra iglesia.

July se metió en esto y pronto comenzó a pronunciar sus nombres cuando estaba teniendo sus orgasmos y hablando de forma más obscena y explícita de lo que nunca pensé que lo haría.

Después de experimentar esas sesiones de fantasía muy eróticas durante varios meses, July comenzó a limitar la lista de nombres de hombres que imaginamos que se la follaban, a un par de mis amigos, un hombre mayor guapo de la iglesia y su nuevo jefe de trabajo.

Esa fue una señal para mí de que estaba mucho más involucrada en su personaje en el juego y estaba restringiendo sus fantasías a hombres que realmente le gustaría que se la follasen… También me dijo que estaba leyendo relatos en el trabajo durante la hora del almuerzo y se estaba masturbando.

Sabía que las fantasías de July comenzaban a superarla cuando agregó por primera vez a su nuevo jefe, casado, Jason, a la lista.

Ella lo agregó en las últimas dos semanas debido a los rumores que escuchó sobre él en el trabajo… Jason es un hombre guapo, de cuarenta y cinco años, de tez oscura y de estatura y peso proporcionado… Su compañera de trabajo, Norin, le dijo que escuchó que él hizo proposiciones sexuales a varias mujeres casadas en la oficina y que ya se había follado a dos de ellas.

Incluso escuchó que él tiene una polla negra muy grande y que a esas mujeres les encantaba… Ellas le dijeron que le gustaba ser autoritario, dominar y controlar a todos sus empleados, pero además, hacer que tanto las esposas que se follaba, como sus esposos, se sometieran a él.

Después de otro mes de nuestro juego durante el sexo, July estaba usando casi exclusivamente a Jason como fantasía.. Aparentemente la cautivó la novedad de tener un encuentro interracial con un hombre de piel oscura, y por lo que escuchó sobre su gran polla negra… Yo tenía aún más curiosidad porque ella llegaba a casa un poco tarde varias noches cada semana.

Una noche, cuando nos abrazábamos después de follar, le pregunté:

– «July, me ha quedado claro que has estado centrando nuestras fantasías en Jason, casi hasta el punto de una obsesión… ¿Hay algo que quieres contarme y no te atreves hacerlo?

Parecía tener miedo de contarme al respecto, pero finalmente dijo:

– «Lamento mucho no haberte dicho esto antes, Tim, pero temía que reaccionaras de forma violenta… Jason me ha asignado tareas que me han llevado a trabajar hasta tarde y sola con él, durante las últimas semanas… Me ha estado tocando y proponiéndome que tenga relaciones sexuales con él.»

– ¿De verdad?, preguntó Tim.

«Si… Me sigue felicitando por mi bonito pelo y ojos azules… También me habla de lo fantásticas que son mis grandes tetas, y ha aparecido detrás de mí en varias ocasiones para frotarme los costados de mis pechos antes de que yo pueda evitarlo.»

Estaba muy excitado de escuchar los avances de Jason sobre mi esposa… Disimulando intenté consolarla diciendo:

– «Bueno, July, eso no suena tan mal, especialmente porque eres capaz de resistirte a él… ¿Pero hay algo más que no me has dicho?»

– “Sí, hay más, y esta es la peor parte… Recientemente me ha estado contando lo grande que es su polla y cómo a muchas mujeres blancas les encanta chuparla y ser folladas por ella… Me dijo que le encanta el contraste del color de la piel cuando su gruesa polla negra se desliza dentro de un coño blanco.»

– “Eso te ha dicho”, le pregunté.

– «Si… Incluso me describió con detalle como era su polla y sus bolas y me ofreció dejarme mirarlas y acariciarlas… Por supuesto que me negué, pero luego me sorprendió… Estaba en mi escritorio concentrada en mi trabajo, cuando sentí su mano sobre mi pecho derecho… Me volví para decirle que me dejara y lo encontré parado allí con sus pantalones y ropa interior alrededor de sus tobillos… No sé cómo pudo acercarse sigilosamente a mí en silencio.»

Ese fue el momento que había estado esperando y le dije:

– “Maldita sea, July, eso suena como algunas de nuestras fantasías… Eres una mujer casada, y él te estaba mostrando su gran polla… Dime, cariño, ¿qué hiciste?”

– «No me gustó la idea de que él me estuviera forzando de esa manera, pero por otro lado esto era la realización de muchas de las fantasías que hemos compartido juntos… Observé su polla y sus bolas durante mucho tiempo y no me podía creer lo grande que era… Su polla negra, no circuncidada, colgaba unos 20 cm, con un prepucio grueso que goteaba precum… Sus bolas son del tamaño de ciruelas y cuelgan tanto como su polla en su peludo escroto negro… Mientras miraba sus genitales, pensé en lo excitado que te pones durante la lectura de las relatos donde los esposos cornudos chupan las pollas del amante.»

Mi pene estaba duro y con ganas de saber más cosas… Le dije:

– «Admito que ese tipo de relatos me excitan, pero por favor dime qué hiciste.»

July continuó:

– “Después de mirarlo durante al menos un minuto, levanté la vista y vi a Jason sonriéndome… Levantó su polla hacia mi boca con una mano mientras colocaba la otra detrás de mi cabeza y me pilló con mi boca abierta sobre su polla… Lo siento, cariño, pero no pude resistir su fuerza e ​​insistencia… Tengo que admitir que quería chupársela.»

– “¿Y qué pasó?, le pregunté.

– «Que su polla se endureció casi de inmediato cuando me la metí en la boca y pronto se puso completamente tiesa… Era muy gruesa… Su prepucio y su enorme cabeza las sentía muy bien en mi boca, y su precum sabía un poco más fuerte que el tuyo.

– ¿De verdad?, seguí preguntándole.

– Si… Y mientras él me sujetaba y comenzaba a follarme la boca, sus grandes y peludas bolas se balanceaban libremente y golpeaban mi barbilla y mi garganta… Debió de estar muy excitado porque en sólo otro minuto su gran polla comenzó a palpitar y soltó su espeso semen en mi boca… Tragué tan rápido como pude, pero parte de su semen se me salió por la boca.»

Estaba muy excitado por lo que me decía y yo le comente:

– “Joder, July, chupaste su gran polla y te tragaste su semen… Cariño, estoy muy feliz de que hayas tenido esa experiencia.»

July continuó:

– “Después de tragar su semen, seguí chupando su polla mientras se ablandaba, y luego levantó sus bolas hacia mi boca para que se las chupara… Tú y yo nunca hemos hecho eso… Me encantó el sabor y la sensación de sus enormes bolas y su escroto en mi boca… Jason tuvo el control total sobre mí y me gustó sentir su fuerza y su audacia… Antes de irse, me dijo lo mucho que le gustaba tener zorras blancas como yo chupando su gran polla y que estaba ansioso por follarme.»

– ¿Y sólo fue esa vez que se la mamaste?, le pregunté excitado.

– No… Desde entonces, le he mamado su gran polla unas diez veces y cada vez me gusta más tragar su espeso semen… Joder, Tim, ahora que sé cómo se siente y cómo sabe una polla tan grande, tengo ganas que entre en mi coño… Lo siento, cariño… Sé que me advertiste que esto podría suceder, pero yo sólo tengo ganas sentir su gran polla dentro de mí.»

– ¿Estás segura de ello, July?, le pregunte de nuevo.

– «Si, estoy segura… Incluso me dijo que quería decirte a tí cómo cualquier hombre con una gran polla podría satisfacerme a mí.”

Luego le recordé a July uno de los pasajes en las relatos diciendo:

– «Si tienes en mente follar con Jason, tal vez podamos hablar cómo hacerlo a partir de los relatos que hemos leído… Podrías invitarlo a cenar a nuestra casa una noche en que nuestros hijos estén en casa de sus amigos… Podría venir temprano para que su esposa no tenga que involucrarse o sospechar.”

– “Lo que tú quieres, cariño”, me dijo July.

– Claro… Dejaremos que las cosas sigan su curso natural… Estoy seguro de que Jason aceptará la invitación, y pronto tendrás esa gran polla en tu coño, y tal vez incluso en mi boca.»

July habló con Jason al día siguiente en el trabajo y lo invitó a cenar el viernes, cuando los niños estaban durmiendo en las casas de sus amigos.

Ella no le contó nuestras intenciones o que yo sabía que ella ya le había chupado su gran polla… Queríamos ver cómo evolucionaría la noche y no teníamos ningún plan para hacerle saber que nos parecía bien que se la follase… Jason aceptó la invitación y comenzamos a hacer planes para la noche.

July se marchó del trabajo el viernes temprano, para poder preparar la cena y yo llegué a casa a las 18 h., media hora antes de que Jason tuviera previsto llegar.

Jason llegó justo a la hora acordada y trajo una botella de vino tinto que complementaba perfectamente la carne que July nos preparó.

Fue un caballero perfecto en la cena, y no vi nada del comportamiento agresivo que July dijo que lo caracterizaba en la oficina… Terminamos la botella de vino cuando July sirvió el postre, y luego dejamos todos los platos en la mesa y fuimos a la sala de estar con nuestras bebidas mixtas.

Todos estábamos relajados y seguimos hablando de nuestros hijos, la oficina y otras cosas, hasta que Jason movió ‘ficha’ y dijo:

– “Tim, eres un hombre muy afortunado de tener una esposa tan bella e inteligente como July… Ella es muy valiosa para mí en la oficina, y quiero hablar algo importante con vosotros dos… Sé que la lealtad de los empleados es un rasgo apreciado en las empresas y reciben por ello una compensación económica que le daré a July… Luego, si queréis más compensación económica ya tenemos que hablar de algo íntimo.

Nuestros objetivos eran los mismos, pero no quería ceder a sus deseos fácilmente… Entonces, interrumpí sus comentarios para decir:

– «Estoy un poco confundido, Jason… No sé a qué te refieres con esa segunda compensación económica que para recibirla debe conseguirla de manera íntima, y ​​que yo sepa, July no ha tenido un aumento o bonificación en dos años… ¿De qué estás hablando?”

Jason sonrió y continuó:

– «He estado esperando una reunión como esta con vosotros dos para deciros que estoy preparado para ofrecerle a July un cheque en efectivo de diez mil dólares si ambos estáis de acuerdo con mi propuesta… Todos en la oficina sabrán de este cheque y los motivos por los cuales los cobras, aunque ninguno de nosotros lo digamos.»

– “Comprendemos eso por ser una cantidad elevada que llama la atención de todos los que se enteren”, le respondí.

– «Y la parte sobre la intimidad no debería ser una gran sorpresa, al menos no para July… Mi informático me informó que July está yendo a sitios pornográficos en su hora de almuerzo y leyendo relatos de cornudos… Eso me dice que ella tiene interés en follar con otros hombres… Y, Tim, July probablemente no te ha dicho esto, pero ella ya me chupó la polla y se tragó mi semen en la oficina, muchas veces… Mi propuesta incluye que seas un participante dispuesto como un marido cornudo y todo lo que eso implica.»

Estaba saltando de alegría por dentro, pero aún no quería parecer demasiado ansioso, porque esperaba obtener al menos quince mil dólares de Jason… Decidí estar molesto con la propuesta y también hacer que July se comprometiera con la decisión que tomase.

Traté de actuar enfadado y dije:

– «July, nunca me dijiste que Jason te metió su polla en tu boca de puta en la oficina… Y, ¿leyendo relatos de cornudos en el trabajo?… No estoy seguro de conocerte bien después de vivir juntos tanto tiempo y no sé cómo te sientes acerca de su oferta. Ni siquiera sé cuál sería mi papel, pero no estoy dispuesto a dejar que te prostituyas a Jason por menos de veinte mil dólares.»

Le guiñé un ojo a July cuando Jason miró hacia otro lado, para que supiera que solo estaba negociando con él… Ella me dijo sollozando:

– «Lo siento mucho, cariño, pero estábamos en la oficina esa noche y sucedió… Jason puso su polla justo a mi lado, y es muy grande, gruesa y negra… Tu polla y tus bolas no son tan grandes como las de él y quise probarla… Después mamársela y de tragar su semen, me dijo que también quería follarme, pero me opuse… Leí los relatos porque quise saber cuál sería su papel y el nuestro si esos relatos se convirtiesen en realidad… Entiendo que quiera darme dinero porque cree que lo necesitamos… Y yo quiero que me folle.»

Jason estaba mirando al suelo por unos momentos pensando, y luego levantó la vista y dijo:

– «July, eres una mujer hermosa y sexy, y estoy dispuesto a subir hasta quince mil dólares para sellar esto y poder follarte cuando me apetezca… Y tú, Tim, creo que disfrutarás siendo un marido cornudo con July y harás todo lo que yo te pida por muy desagradable que te parezca, que para eso pago muy bien.”

“Estamos de acuerdo en el precio y las condiciones”, le respondí.

– «July debe encontrar falta de algo en su vida sexual que hace que lea esos relatos y le gusten las pollas grandes como la mía… A tí, Tim, te garantizo que disfrutarás de tu papel de marido cornudo de July, porque yo soy el que la folla.»

July me miró y sonrió… Sin decir una palabra, se levantó y cogió a Jason de la mano… Lo condujo por las escaleras hasta nuestra habitación mientras yo los seguía… Luego se quitó la blusa, la falda y la ropa interior, mientras Jason se quitaba toda su ropa.

July tenía razón cuando me habló sobre su enorme polla y yo, ahora que la veía, apenas podía creer lo larga, gruesa y negra que era… Mi polla está circuncidada, la suya, no… Yo nunca había visto una tan grande y sin cortar como la que tiene… Su prepucio es grueso y ya estaba goteando precum.

– «Estoy muy feliz de que hayáis aceptado mi oferta y quiero que Tim disfrute de cerca de su primera experiencia de cornudo… Sube a la cama, Tim, y ponte debajo de July en la posición sesenta y nueve… Yo me follaré su apretado coño por detrás… De esa manera, tendrás tu cara justo donde podrás ver mi gruesa polla negra estirando el coño de tu esposa y viendo como entra y sale cuando me la follo… Debes también desnudarte para que yo pueda ver la polla con la que July ha estado jodiendo todos estos años… Y tú, July, no quiero que le chupes la polla porque quiero besarte más tarde esta noche y no lo haré si se la has chupado», nos dijo Jason.

Nos pusimos en la posición indicada y miré hacia atrás viendo a Jason frotarse su gran polla, agarrar el culo de July y mover su polla por su coño… El prepucio mojado goteó en mi cara y vi como presionó la cabeza de su gran polla entre los labios vaginales de July… Su escroto, negro y grande, me cubrió la frente y se apoyó contra mi boca.

Instintivamente comencé a chupar sus bolas mientras él presionaba lentamente su gruesa polla contra el coño de July… El contraste en el color de la piel era muy erótico, ya que su polla negra desaparecía, poco a poco, entre sus cremosos labios blancos.

July estaba luchando por amoldarse a esa gran polla gruesa… Jason seguía presionando y, centímetro a centímetro, su polla se deslizaba hacia dentro de su coño, muy húmedo.

Me sorprendió que él fuera tan gentil con ella, y pronto me di cuenta de que su gran polla estaba presionando contra su cuello uterino y aún le quedaban siete centímetros más por meter… Por eso le dijo:

– «Relájate, July… Voy a seguir haciendo presión hasta que haya metido toda mi polla… Tu útero se moverá hacia arriba con la presión, y tendré la alegría de tener toda mi polla en tu apretado y blanco coño de mujer casada.»

Fue muy agradable chupar las bolas de Jason cuando su gran polla se deslizó por entero en el coño de July, y luego comenzó a darle golpes fuertes y suaves… Lamí sus bolas en cada golpe, e incluso me incliné y lamí la base de su polla cada vez que se detenía metida hasta el fondo del coño de July… Me sentía muy sumiso con Jason y mi esposa, tal como había escrito muchas veces.

July comenzó a respirar con dificultad y jadeó, añadiendo a mi degradación por lo que estaba haciendo, al escucharla decir:

– «Oh, Jason, puedo sentir tu prepucio deslizándose en mí coño y también cada vena de tu polla… Nunca me di cuenta de lo que me faltaba con la pequeña polla de Tim… Fóllame y hazme tu puta… Me gusta mucho ver a Tim chupar tu gran polla.

Jason continuó follando a mi esposa durante otros diez minutos, y luego vi la base de su polla flexionándose y supe que estaba eyaculando mientras la tenía toda metida y presionaba contra el cuello uterino de July.

Su polla estuvo palpitando durante casi un minuto, y sabía que debía estar disparando una gran carga de su semen dentro del coño de July.

Luego dijo:

– “Joder, que bien que estuvo… Siempre tengo ganas de follarme un nuevo coño blanco por primera vez, y el apretado y pequeño coño rubio de July todavía me está agarrando la polla… Tu coño vale el dinero que pago… Y la siguiente parte también será excitante… July, cuando salga de ti, quiero que te sientes en la cara de Tim y le des mi gran carga de semen para que se la trague… Quiero que muestre su sumisión tragando mi esperma… La mayoría de maridos cornudos blancos, adoran la idea de tragarse toda mi esperma.”

Jason sacó su polla y retrocedió un poco para ver cómo July se sentaba y cubría su coño lleno de esperma con mi boca… Sus fluidos fluían hacia mi boca mientras yo chupaba sus labios hinchados.

El sabor y el espesor de su semen era lo que esperaba, y la degradación de tragarme el semen de otro hombre del coño de mi esposa adúltera se sumó a mis sentimientos de sumisión.

Después de limpiar su coño, rodó hacia un lado y Jason volvió a subir y presionó su polla contra mis labios… Cuando abrí la boca para chuparle la polla, me miró y sonrió diciéndome:

– «Eso es, chupapollas… Limpia mi polla y chúpamela… Esto le mostrará a July cuánto disfrutan los hombres de polla pequeña, como tú, adorando a una gran polla.»

De inmediato, sentí su gruesa cabeza de polla deslizándose dentro de mi boca, y empujé mi lengua contra el grueso prepucio que aún rezumaba con el jugo de la follada que contenía por todos lados.

Vi a July sonriéndome cuando la polla de Jason se movió en mi boca y supe que nuestra relación había cambiado para siempre… Sabía, o al menos esperaba, que todavía me amase, pero estaba claro que nunca volvería a mirarme igual.

A pesar de que July estaba ansiosa por volver a que Jason la volviera a follar su gran polla, todavía soy su esposo, y sabe que voluntariamente le entregué su cuerpo, nos sentamos y nos relajamos un rato después de esta primera follada a July.

Durante todo este tiempo de descanso para ellos, Jason me tuvo entre sus piernas chupando sus bolas, mientras July me miraba sonriente y complacida y lo besaba con lujuria.

Luego la jodió de nuevo, y limpié su semen de su coño y le chupé la polla como lo había hecho la primera vez.

Ese fue el comienzo de una larga relación de cornudo con Jason, y yo acepté voluntariamente mi papel como el marido cornudo de July.

Después de un tiempo July, por mandato de Jason, pasó a ser follada por otras grandes pollas y así comenzó a follar con algunos amigos de Jason y clientes, con algunos de mis amigos y con otros hombres que conocemos de la iglesia… Esto nos hizo ser cada vez más viciosos.

Para mí, fue vergonzoso la primera vez que folló con mis amigos, pero luego superé la humillación y disfruté de sus grandes pollas y semen, como lo disfruto con Jason y otros folladores de July, cuando vienen a casa… Está claro que Jason ya se cansó de nosotros y tiene parejas nuevas, pero haber pagado tanto hace que no nos deje y viene a follar a July cuando le apetece.

Con todo esto estoy experimentando muchas situaciones nuevas sobre las que voy a escribir en mis relatos.

F I N