Una tarde sola en la oficina termina con una follada sorpresiva

TARDE CALIENTE EN EL TRABAJO

Me encontraba sentada frente al computador intentando adelantar un trabajo que tenía retrasado desde hace varios días, pero mi mente se elevaba a ratos quedando en blanco, otras pensando que este pintaba ser un día muy pero muy aburridor.

Empecé a ojear algunas páginas de internet y deje de lado por completo el trabajo, leí la prensa, pensé en jugar un rato pero al final me encontré leyendo un relato erótico, el cual venía acompañado de unas imágenes bastante sugestivas y provocadoras, tanto así que al avanzar con la lectura y observar los supuestos cuerpos de los protagonistas desnudos, entrelazándose, hicieron aflorar mi naturaleza, debo aceptar que soy un poco cachonda, no había pasado mucho tiempo cuando note que mi mano ya estaba tocando mi seno, frotando el pezón con una delicadeza pero muy ágilmente logrando que este estuviera completamente duro, definitivamente tenía ganas de sexo y no había ninguna posibilidad de tener lo que quería en esos momentos, que no era más que una buena clavada.

Pensé “me tocara hacerme una pajita para apaciguar las ganas” me encontraba sola así que no vi ningún inconveniente en desabrochar mi jean, bajar mi corredera y bajar mi mano hasta mi sexo no sin antes pasar del relato a un corto pero muy buen video, comencé a frotar mi clítoris con gran proeza, sin dejar de agarrar mi seno con la otra mano comencé a moverme en esa silla mmmmmmm y a gemir despacio pero al ritmo de la culiada que imaginaba en ese momento me daban, tarde solo unos minuticos en venirme coincidiendo con la corrida de la chica del video. Me encanta así, estaba muy pero muy arrecha, estaba aun viniéndome cuando escuche un ruido en la puerta, voltee sin pensar y quede atónita, un completo extraño entraba a la oficina y cerraba la puerta tras de él, al parecer estaba espiando hacia un buen rato yo no podía pronunciar palabras, continuaba con mis tetas al aire mientras el tipo se acercaba rápidamente hacia mí. Quería sacarlo decirle que se fuera pero mis ojos no se despegaban del gran bulto que se veía en su pantaloneta, me percate allí que tenía que ser uno de los muchachos que practicaban en la cancha, transcurrieron segundos y ya tenía su verga frente a mi cara, estaba de pie frente a mí, sosteniéndola con su mano, y que verga mmmm era totalmente irresistible de un solo golpe tomo mi cabeza y me metió su verga en mi boca, intente resistirme pero muy débilmente a quien quería engañar en ese momento no había nada que deseara más que esa verga erecta y de dimensiones que no había visto antes en verdad la veía inmensa tal vez por el susto que me lleve el asunto es que el movía mi cabeza y era quien me embestía brutalmente por la boca, poco a poco me fue soltando y yo era quien seguía chupándosela con unas ganas incontrolables estuvimos así unos minutos estaba muy excitado y yo no tengo ni que decirlo estaba completamente arrecha mi coño estaba deseoso de sentir esa verga, me levanto de la silla volteo sobre el escritorio bajo mi pantalón me aparto el hilo y coloco esa enorme verga al borde de mi coño mmmmm sentí como corría mi leche aun antes de metérmela me estaba viniendo a cantaros, me la metió sin miramientos de un solo golpe, me agarraba con una mano la cadera y con la otra tomaba mi cabello y me daba tan fuerte y tan rápido que yo trataba de agarrarme con una mano bien fuerte al escritorio y con la otra taparme la boca para que no se escucharan mis gemidos y gritos ahogados, me clavaba tan rico que me olvide casi por completo en donde estaba pude sentir su leche inundarme aún más y por sus movimientos confirme que había acabado dentro de mí. Se subió la pantaloneta y se fue tal como llego sin mediar palabra.

Como puede me acomode y Salí al baño que está en el pasillo a limpiarme entre a uno de los baños me limpie y estaba en el lavabo, lavándome las manos cuando entro de nuevo el mismo tipo pero esta vez no venía solo, llego acompañado me imagino con uno de sus compañeros de practica era de su misma talla y al parecer en los pocos minutos que habían pasado ya lo había enterado de todo, este nuevo visitante se acercó a mí me dijo “mi amigo me dice que eres toda una zorra y que quedaste con ganas de más” de inmediato me arrecosto a la pared y empezó a manosearme todo el cuerpo por encima de la ropa, el otro se quedó cerca de la puerta la cual le coloco el seguro, yo sabía exactamente lo que me esperaba y ya a estas alturas y con la calentura que tenía solo pensaba en que quería tener esas dos vergas para mí. El tipo siguió tocándome subiéndome la blusa y agarrando mis tetas sobre el bra con fuerza y recostándome su verga al máximo haciéndome sentirla en toda su extensión, la tenía durísimaa y me encantaba. Me susurraba al oído “ me llamo Samuel, dime métemela Samuel, dame tu verga” y no lo hice esperar estaba deseando me llenaran de verga y entre gemidos solo atinaba a pedirle que me diera verga , “Samuel métemela, métemela yaaa” empezó a bajar mi cremallera y con mi ayuda esta vez nos deshicimos del jean y del hilo que yo traía puesto quede a su entera disposición él se quitó la pantaloneta y el bóxer y así recostada a la pared me metió su verga hasta el fondo, esta era un poco más corta que la del otro pero más gruesa, mientras me tenía así clavada podía ver al otro, del cual nunca supe el nombre como ya se había quitado todo y estaba masturbándose mientras observaba la escena, no me concentre mucho tiempo en él, como iba a hacerlo si en ese momento solo sentía una verga entrando y saliendo de mi coño, levante una pierna y la acomode sobre el lavabo para sentir mejor las arremetidas tan brutales que me daba Samuel así estuvimos varios minutos mi coño estaba dilatado, húmedo y caliente como nunca antes, me bajo la pierna y dio la vuelta con rapidez quedando el ahora contra la pared, de frente a mí, pero sin sacarme su verga ni un segundo, yo estaba como loca, estaba prácticamente en cuclillas para poder moverme con propiedad, no podía dejar de moverme ahora yo lo culiaba a él, ambos nos movíamos con desespero yo solo pronunciaba entre gemidos y gritos “ dale, dale más duro” de repente sentí como otro cuerpo se acercaba al mío por detrás , parece que nuestro espectador no pudo quedarse por más tiempo sin participar palpe de inmediato su miembro duro y perfecto con mis nalgas pero sentí casi de inmediato su dedo entrando en mi culo y moviéndose al ritmo que nos culiabamos Samuel y yo, casi de inmediato saco el dedo y acomodo su verga en mi culo y sin más preámbulos la inserto en hasta la mitad y empezó a culiarme por detrás no hacia reparo alguno, quería destrozarme el culo y Samuel el coño y yo deseaba que me destrozaran por completo, prácticamente quede colgando entre ellos, se escuchaban los gemidos de los dos extraños y mis gritos de siiiiiii asiii dale, así seguimos un rato hasta que los dos se corrieron dentro de mí y yo por supuesto exhausta pero satisfecha y feliz.