Un par de hermanas compartiendo una rica polla
Comencemos por el principio, eramos una familia de las que se denominan nomales, madre, padre y dos hermanas, yo la mayor por dos años, clase media pero las raíces inmigrantes latinos y mis padres fanaticos católicos.
En casa nunca vimos desnudeces, mucho menos sexo, ni hablar de ello, es mas, recien bien mayorcita me entere de donde venia el pecado original , como si no fuésemos animales, tampoco de un huevo no somos ovíparos ni de una semilla no somos vegetales.
Había sido que coger para engendrarnos era pecado y para colmo lo heredábamos y al nacer; lo hacemos con el pecado original a cuestas, mejor no hacer comentarios.
Cuando nos desarrollamos, mama nos llevo a una doctora para que ella nos avive, claro ya sabiamos bastante por nuestras amigas, algún chico también había cooperado, figuras, fotos, y revistas todas reprohibidas.
Misa dominical con confesión y comunión.
Noviazgo desde los 15 a escondidas pero a los 18 lo blanqueamos, rápidamente hubo que comprometerse y que el novio buscase trabajo para poder casarnos. No fuese que no echásemos algún polvo prematuramente.
No obstante la vigilancia, la franela y la edad nos llevó bastante rapido a la mutua masturbación y mediante los consejos de una vecina mayor pero muy ubicada me recomendó mamarsela, un buen 69 y hasta ofrecerle mi ojete para seguir preservando mi puta virginidad.
Asi nos fuimos conformando hasta que llegó el dia del casamiento, por fin pudimos coger como se debe, antes solo habiamos llegado a la buena apoyada con friccion sobre los labios mayores con riesgosas acabadas entre las piernas.
Si, soy un bicho raro, me rompieron la noche de boda.
Recien antes de la fiesta mi madre me comentó azorada cual era mi deber como esposa, y me recomendó, recato y respeto, nada de cosas raras, lo que se haga será para conservar la especie. Mas boluda imposible.
Alquilamos un departamentito pequeño pero para ambos mas que suficiente.
Mi hermana sabia de mi sexualidad ya que las primeras pajas fueron juntas y luego seguimos satisfaciéndonos a escondidas.
Ella también tenia un noviecito, pero lo ocultó mientras pudo.
La muy boluda garchó sin forro, de movida y a los dos meses ya quedo embarazada.
Me contaba de su novio y la verdad la envidiaba, solo por lo que decía porque viendo al galan era una cagadita, no mas de 1,50, esmirriado, c etrino, pero según me decía calzaba un chipote tremendo.
Yo le había mostrado la foto de la de mi novio y ella me decía que era un chizito, sin embargo es bastante normal. La de su novio no la llegue ver.
Estuvo en mi casamiento, ya estaba de tres meses, al poco tiempo no lo pudo disimular mas y los viejos la echaron de casa, por meses vivió en un pension.
Su macho no bien se enteró que estaba llena, se rajo a Siria, de allí eran su parientes.
Nos veíamos muy seguido y no aguantaba mas allí pues no le alcanzaba su sueldo, los viejos la repudiaron y nosotros andábamos al dia, por eso le hablé a mi marido y la traje a vivir con nosotros.
Pensamos al menos hasta que tenga al crio y mejore su situación laboral.
Con un bombo de 7 meses y días, se instaló en un sofá en el comedor.
Con mi marido tratamos de cuidarnos un par de años hasta lograr un mejor estándar.
Claro está que era una época que cogíamos todos lo días como locos y ella escuchaba, jaja también nosotros luego de acabar podíamos sentir los gemidos de mi hermanita pajeandose.
Eso era un afrodisiaco para que mi macho reaccionara y me echase casi siempre un segundo bien abundante.
La cosa no me gustaba y la retaba por sus suspiros, mientras ella me recriminaba los que hacíamos nosotros al coger como marranos.
Luego vi como mi macho le miraba el bombo y el escote que iba creciendo con sus tetas, hasta que en una cena se me ocurre decirles, Carlos nunca cogiste a una mujer con un bombo como el de Irma?.
Se quedo perplejo y escucho un susurro con un: no.
Los tres callados un buen rato, mi hermana me miraba seria y se largó: si Perla no se enoja proba conmigo.
Mas silencio, y les digo: chicos si estamos los tres juntos estoy de acuerdo.
El no sabia que hacer, estaba livido.
Terminamos de cenar y ambas nos dedicamos a lavar los platos y acomodar todo, era sábado, mañana no había que trabajar asi que la cosa podría ser larga y placentera, supuse.
Carlos se va la baño a la ducha y luego en pelotas como acostumbraba se metió en la cama.
Luego nos vamos ambas a bañarnos y mi hermana aprovechó la intimidad para pajearnos como hacia tiempo no lo hacíamos.
Mi hermana es un poco mas menuda que yo, pero con ese bombo y esas ubres, con su redondo culo salido como todas las encintas, estaba mas que apetitosa.
Yo soy de gomas mas grandes que las de ella cuando esta normal, ahora no podía competir pues su pezones eran de un color y dimensión descomunal.
Por el resto creo que en culo ambas somos idénticas, claro yo estaba conservando mi cintura, ella no.
La cargaba, ahora te vas a comer el chizito vos que te pavoneabas con la gran poronga y reíamos juntas.
Ambas en pelotas, al avanzar hacia la cama pudimos advertir como Carlos estaba nervioso.
Nos acostamos una cada uno de sus lados, quitando la sabana que lo cubria y su pobre pija era un acordeon.
Entonces Irma se levanta y comienza a bailarle, abriéndose el ojete, ofreciendo sus limones y toqueteándolo yo por mi parte se lo chupo hasta que toma vida y se agarrota como nunca.
El boca arriba parecía que su poronga fuese mas grande de lo que era, bien babeada con la cabeza lustrosa por mi saliva, ella se sienta sobre él, mirándolo, ensartandosela hasta los huevos.
La cara de satisfacción de ambos era maravillosa, y el grito de ella agradeciéndome me conmovió.
Sus ubres fueron un manjar para mi pues con su bombo no podía llegar a la boca de él, ya destilaban lechita.
Yo aproveche para volcarme de manera que con su boca me chupase la concha hasta hacerme acabar y quedarme allí palpitando y chorreando flujo que el tragaba viendo como mi hermana recibia la leche de mi amor y le correspondia casi juntos con un largo y húmedo polvo.
Luego nos volcamos y besamos como si fuese la primera vez.
Ambos la tomamos a Irma y la lambeteamos tanto que rápidamente llegó a otro orgasmo, es que andaba tan necesitada la pobre.
Allí pude observar que su ojete tiene un agujero abierto de no menos de dos cm y pensé, debe ser cierto lo que me contaba del tamaño de su macho.
Fui a buscar una botella que tenia en el refrigerador y brindamos por el amor y por esta mini orgia familiar y que la nena que esta gestando nazca sanita y linda como la mama.
Seguimos hasta la madrugada, Carlos comentó que suave era el ojete de Irma bien abierto mientras que el mio le resultaba estrecho, allí ella contó sobre las dimensiones que estaba acostumbrada a digerir.
Desde ese dia dormimos juntitos los tres. Carlos quedaba bien vacio, yo temia por su salud.
Lo único que no habíamos previsto fue mi flamante embarazo, pues en el ardor de la fiesta no nos cuidamos, tampoco en las jornadas sucesivas, el pecado original fue practicado tan frecuentemente y frenéticamente que algún dia dio su resultado.
Asi es la cosa estamos esperando un varon, un nuevo chizito en la familia.
Irma tuvo en fecha una formidable niñita, rubiecita una belleza, por ahora duerme al lado de su madre en su cuna, la que ya planificamos heredará su primo y ella tendrá que hacernos compañía.
De esas preciosas y grandes tetas, Carlos se alimenta tanto como la niña y algo yo también, resulta un buen incentivo para para nuestros polvos diarios, mientras ella nos mira y se babea, pero nada mas, todavia no es tiempo y puede resultar contraproducente.
La nena tiene dos madres y un padre, lo mismo que ha de tener mi crio.
Somos una familia atípica pero inmensamente feliz.