El día que mi prima se aprovechó de mi

Mis padres se iban a trabajar todo el día, ambos se iban desde las 7:00 am incluso mucho antes; mi madre solía regresar como a las 18:00 horas, más o menos, y mi padre muchísimo más tarde, o había noches en las cuales ni llegaba a dormir.

Como ellos se iban todo el día yo pasaba en la escuela o me dejaban al cuidado de mis abuelos paternos; me gustaba estar con ellos, pero, llegó un momento en el cual sentía que me estaban sobreprotegiendo y ya no me gustaba tanto quedarme con ellos.

Así que hablé con mis padres y ellos hablaron con una prima mía (ella es 8 años mayor) que vivía en la casa de mis abuelos, para que me cuidará antes o después de yo ir a la escuela hasta que alguno de ellos regresará.

Mi prima aceptó, me estuvo cuidando por un tiempo y a los días llego el día que nunca olvidaré.

No recuerdo la fecha exacta, pero la hora en la que sucedió todo fue entre las 8:30 y 9:20 am. Mi prima había llegado a mi casa, por lo que, decidí irme a bañar.

En ese tiempo tenía y todavía tengo la costumbre de salir en bóxer y ponerme la demás ropa en mi cuarto.

Ese día no fue la excepción, salí con un bóxer color azul o celeste (no recuerdo bien) mientras caminaba hacia mí cuarto, pude notar que mi prima estaba acostada en la cama de mis padres usando su celular pero, volvió a verme y noté que estaba viendo mi bóxer, no le di importancia le sonreí y seguí rumbo a mí habitación. Terminé de vestirme y observé que mi prima estaba recostada en el marco de la puerta de mi habitación y le digo:

Hola Priscilla, ya me bañé y estoy listo para ir a desayunar con los abuelos.

Hola Felipe ya lo noté pero, aún no te has echado colonia déjame buscarla, te echas y nos vamos a desayunar.
Está bien Pri, creo que mi colonia esta junto a las colonias de mí padre.
Sí, Felipe ahí está, pero, quiero que me ayudes con algo, es un juego. Me ayudas y después te doy la colonia para irnos.
Donde dijo la palabra, juego, acepté inmediatamente.

Bueno, pero, antes de jugarlo, tienes que prometerme que no le contarás a nadie, será nuestro pequeño secreto, nadie tiene que darse cuenta de este juego ¿Esta bien?

Esta bien Pri, no le contaré a nadie.

Ella me ordenó que fuera a mi cama, me acostará en medio boca arriba.

Cuando terminé de acomodarme, mi prima se paró frente a mí, se volvió dándome la espalda, se dio una nalgada y me dijo:

¿Qué te parecen mis nalgas?

(Recuerdo que esa vez, Priscilla estaba vistiendo un short de mezclilla, con el cual se le marcaban unas grandes y hermosas nalgas redondas, usaba una blusa blanca y en el medio había unas líneas color doradas formando un corazón, además, la blusa transparentaba un poco, por lo que podía notar, el color del brasier que llevaba puesto, el cual era de color negro).

Están bien, no las tienes deformes.

En ese momento ella se puso a reír, yo no entendía porque se estaba riendo y me dijo todavía estás pequeño y sin perverción, que delicia y se volvió dándome el frente del cuerpo de ella, se desabotonó el short, se lo bajo y me lo tiró a la cara, y me dice:

¿Qué le parece mi calzón? ¿Te gusta?

Me quité el short de mí cara y le pude ver ese hermoso calzón color rosa, con bastantes corazones con tonalidades del color rojo, a lo que yo le respondí:

Esta muy bonito, me gusta.

Ella me agarró de la pantaloneta y me la quitó, quedando en bóxer.

Ella se subió a la cama para luego colocarse encima de mis piernas, se acostó en mi cuerpo y me dijo al oído:

Sé lo que usted y Fabiola hacen en el escritorio del corredor de la casa de nuestros abuelos.

(Fabiola era una vecina del barrio, ambos somos del 2002, así que solíamos jugar y estar juntos todo el día, una vez, no recuerdo quién tuvo la idea, pero, jugando se nos ocurrió quitarnos la ropa de la cintura para abajo y lamer nuestras partes íntimas, ninguno de los dos lo veíamos de forma morbosa ni sabíamos el significa real de lo que hacíamos, solo lo veíamos como un juego prohibido, ya que nadie debía darse cuenta, lo repetimos muchas veces hasta que ella se mudó como a los 2 años de empezar a realizar este “juego” y nunca más la volví a ver, incluso a día de hoy, no sé dónde se encuentre).

Siguiendo con lo de mí prima, ella después de decirme lo de Fabiola me dijo:

Quiero que veas, sientas y toques el cuerpo de una mujer de verdad, no el de una niña de tu edad.

Se sentó encima mío, me agarró de las manos y me las llevó hasta sus tetas por encima de su ropa que ella tenía y empezó a mover sus caderas de arriba-abajo, rosando su calzón contra mí bóxer, al cabo de 1 o 2 minutos, se bajó de mí y me quitó el bóxer.

Recuerdo verle la cara y observarme con una mirada de deseo y lujuría, la vi sacar la lengua y pasarla por su labio inferior hasta morderse el labio. Ella seguro debía estar muy excitada pensando que podía hacer lo que quisiera conmigo.

Después de verme por unos segundos se volvió a subir en mis piernas y se quitó la blusa que llevaba y me dejó verle ese brasier color negro, liso, un poco grueso, pero, inclusive del grosor, no ocultaba la forma de sus pezones parados y duros, así que volvió a tomar mis manos y las puso encima del brasier.

Tengo que admitir que en ese entonces mi prima tenía unas tetas grandes, un poco más grande que un balón de volleybol, circulares y podía notar que eran fuertes, así que empecé a mover mis manos de arriba abajo, de izquierda a derecha, en círculos y si podía, apretaba. En un momento Priscilla mi prima mayor la estaba escuchando decir «sigue así, que rica me agarras las tetas, ahhh, ahhhh si, sigue así no parez» no pude aguantar la tentación, bajé mis manos y las metí dentro del brasier.

Sinceramente esa fue la mejor sensación que pude sentir, recuerdo que la piel de esas tetotas era suavecita, caliente, sus pezones estaban bien duros y firmes. Después de unos pocos segundos de estarle masajeando las tetas y el pezón, me agarró los brazos y me los bajo diciéndome:

Quédate quieto y no hagas nada más hasta que te diga.

Obedecí. Subió hasta llegar al punto de que su calzón rozará con mi pene y volvió hacer lo mismo de antes, moverse de arriba abajo rozando su calzón contra mí pene, me preguntó si me estaba gustaba, a lo que le contesté que sí.

A los pocos minutos, se detuvo, se movió el calzón hacía un lado, agarró mí pene y lo puso en medio de su calzón para que me apretará y volvió a moverse de la misma forma, de arriba abajo, tal vez, en ese entonces, mí pene era muy pequeño como para sentir algo, ya que lo único que sentía era como la tela del calzón de Priscilla rozaba en mí pene al ella se moversensin generarme placer..

Mi prima se estuvo por largo tiempo moviéndose de esa forma, sin penetración alguna.

No sé, si Priscilla llegaría a tener algún orgasmo o no, tal vez, tuvo uno orgasmo por la excitación del momento, porque, lo último que recuerdo es que ella soltó un pequeño gemido, mientras ella iba poniendo sus manos encima mi pecho y diciendo:

Que ricoo siii, mierdaaa que delicia, Ahhhhh Ahhhhh

Luego de decir eso y tranquilizarse me volvió a ver, y me dijo:

Ya sabes, no le puedes decir nada de esto a nadie, absolutamente a nadie, lo hiciste muy bien ¿Te gustó la experiencia?

A lo que yo acentué con mi cabeza, entonces Priscilla se bajó de mí y me dio la colonia ordenándome que me mudara para irnos a desayunar.

Ella agarró su ropa y se fue a mudar al cuarto de mis padres, mientras tanto, yo me quedé acostado unos segundos en mí cama, pensado en lo que había pasado, después me mudé y fui a donde estaba Pri, ella ya estaba mudada, cuando me vio me sonrió y me dijo que muchas gracias por haberle permitido jugar conmigo y volvió a repetirme que no se lo contará a nadie y que si me encontraba bien.

No le diré a nadie, me encuentro bien, solo con hambre, ¿Ya vamos a ir a desayunar, si?

Me sonrió, me agarró de la mano y nos fuimos a desayunar a la casa de nuestros abuelos.

Espero les guste y les haya parecieo interesante, entretenida y excitante este primer relato que publico acá.

Es una experiencia real en la que desafortunadamente no volvío a pasar nada más entre mi prima y yo, en terminos sexuales, quedando yo con la fantasía que volver a tocar a mi prima y que pase algo más que solo tocamientos.

Si les gustaría una segunda parte (esta si sería fictivia) diganme en los comentarios y comenzaré la trabajar en un segunda parte.